Adela

capitulo 1

Adela

A veces me pongo a pensar el cómo sería vivir siendo feliz. Tengo el presentimiento de que algún día llegara ese momento en el que pueda decir 《volví a ser yo misma》 pero en este caso no es así. Recuerdo el día en el que estaba con mis padres en el parque, mi papá me había acompañado a columpiarme en las hamacas mientras mi madre se quedaba sentada en el césped tomando un poco de sol.

Ese día al estar en ese lugar me hacía sentir libre, escuchar a los pajaritos cantar, los rayos del sol pegándome en mi rostro, sentí la brisa del viento recorriendo cada parte de mi cuerpo. No me dejaba pensar en otra cosa que no se sea paz ni tranquilidad. Hasta que llego el día de la tragedia, todo cambio dentro de mí me sentía completamente distinta ver a mis papas muertos delante de mis ojos me hizo sentir insuficiente. No entendía por qué o quién había hecho una cosa tan semejante, lo que si sabía era que el asesino de mis padres seguía prófugo y ahora mismo podría estar quitándole la vida a otra persona o incluso a una familia.

Vivía en Hamburgo, Alemania. Casi toda mi familia vivía en este país, pero desde que mis padres murieron yo me estoy quedando en la casa de mis abuelos. Hace tres meses estoy viviendo con ellos solemos tener peleas, pero nada de lo normal. Básicamente todas las peleas eran por mi alimentación, mi estado físico, mis emociones eso casi todos los días en todas las semanas.

Desde que estoy con estos humores mi abuela decidió llevarme al psicólogo yo le dije varias veces que no lo necesitaba, pero como siempre nunca me escucho y mi abuelo le hacía caso a ella por lo que era un caso perdido.

El lunes por la mañana me levanté y fui a desayunas, en cuanto me senté mi abuela ya empezó con sus quejas de que coma porque estaba muy flaca.

-Adela... Hoy necesito que comas bien estas demasiado flaca.

- Abuela ya te dije que no tengo hambre no me obligues a comer- En eso veo que mi abuelo mira a mi abuela como dirigiéndole la palabra.

- Mi niña escucha, sé que no quieres comer por lo que le paso a tus padres, pero- Sabia que mi abuelo decía todo esto para que comiera, pero no tenía apetito – tu abuela tiene razón estas demasiado flaca-

Sabía que había bajado de peso por no comer. La mayoría de las noches lloraba desconsoladamente al recordar a ellos. A mis padres.

Los mire seriamente pero no sabía que decir mire el plato de comida que estaba delante de mis ojos y pensé 《Adela tener que comer...Te va a hacer bien》 suspire.

- Está bien tiene razón voy a comer.

Ellos asintieron felices. –Recuerda que a la tarde tenemos la cita con la psicóloga- Mierda se me había olvidado- Así que estate lista en un rato. Asentí sin decir ni una palabra.