12 días WinterBaron

9

Suéter

Bucky estaba viendo el baño, indeciso de tomar una ducha o no, hacia frío, mucho frío, no había sudado nada, olió su ropa y nada, estaba prácticamente limpio, pero se sentía sucio, como que algo recorría su cuerpo y cabeza, así que suspirando derrotado camino a la habitación, donde estaban sus pertenecías, reviso su maleta para sacar ropa limpia.

Su mano toca el fondo, sintiendo papel, con el ceño fruncido y con miedo, saca con cuidado lo que estaba tocando, su sorpresa fue grande al ver el regalo envuelto que le había comprado a Zemo para navidad, se le había olvidado.

Sintiéndose de lo peor, volvió de dejar el regalo en la maleta, pero ahora en la parte superior, le daría el regalo en la cena, se sentía un poco bien, porque Zemo no le regalo nada.

Con ello en mente, toma ropa y camina refunfuñando al baño.

--¿Sabes?, creo que pase por alto algo en la cena de navidad. – comienza Bucky con lo que quería hacer.

--¿Ah sí?, ¿Qué cosa? – pregunta con verdadero interés Zemo, pensando que había faltado esa noche.

--Se me olvido por completo algo.

--Explícate mejor, no te comprendo. – pide con amabilidad el castaño.

--No te di tu regalo de navidad, pero eso lo soluciono ahora mismo.

Sin tiempo para dejarle decir algo a Zemo, el pelinegro abandona con velocidad la sala, a los pocos segundos regresa con un regalo entre sus manos.

--Te había comprado un regalo, pero lo olvide por completo, pero aun te lo puedo dar. – explica con pesar Bucky.

Le entrega el regalo, Zemo está sorprendido, lo toma con cuidado, lo observa, el papel muy navideño, lo abre tranquilamente, al quitar todo el papel y extender lo que estaba dentro, frente a él está un suéter navideño, la parte inferior de rojo y lo demás de verde, pero lo que llama más la atención es la imagen grande que abarca todo enfrente, un santa Claus sentado en un inodoro con los pantalones abajo.

Se queda sorprendido, pero le divierte lo que está viendo, así que suelta una carcajada, haciendo relajar a Bucky, esperaba que no le aventara el regalo o que le dijera que no le había gustado.

El castaño se levanta, deja el suéter en la mesa y se va a la habitación, entre sus cosas busca también un regalo, regresa junto a Bucky y le entrega el regalo.

--A mí también se me olvido, te compre un regalo de navidad.

El ojiazul lo toma, sorprendido de que Zemo también le haya comprado un regalo y que se le hubiera olvidado. Rasga el papel y saca lo de dentro, un suéter también, color rojo, y en el frente en grande, una chimenea, frente a este santa Claus desnudo, solo tapando sus partes íntimas con un gran regalo, y en una mano una botella de cerveza.

Bucky ríe por la imagen, algo perturbador de ver, pero es divertido.

--Creo ya tenemos suéter para usar en fin de año. – propone Bucky divertido.

--¿De verdad?

--Si, mira, son muy divertidos. – anima el pelinegro alzando ambas prendas.

Zemo los mira por segundos, analizándolos, es verdad, son divertidos porque no son lo usual que se usarían en navidad, pero en su forma rara contemplan el espíritu navideño.

--Sí, creo que estarían bien.

--Así se habla. – celebra Bucky.

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