TEMPORADA UNO - El mejor amigo de mi hermano ✓

Capítulo XXII

Maratón 3

—¡Sira, cuid...! —no me da tiempo a avisarle porque le cae un cubo de agua encima.

Yo lloro de la risa, Gavi se aguanta para no explotar a carcajadas y Pedri sale de detrás de la puerta, riéndose.

—¿¡QUIÉN HA SIDO!? —grita Sira, enfadada.

—Era para... Gavi... —le dice mi hermano entre risas.

—Pero, contigo ha quedado mejor —añade este, riendo sin parar.

—¡SOLO PERDONO QUE SE RÍA T/N, A VOSOTROS NO! ¡COMO OS PILLE! —se escurre el pelo.

—Te traigo... Una toalla —Pedri se va rápidamente al baño, aún riendo.

—¡Tú! —señala a Gavi —. ¡Deja de reírte o te arranco los cuatro pelos que tienes!

—Venga, ven —Gavi tira un paso para adelante, aún divertido.

—Toma la toalla —llega Pedri y se la da.

—No sé a cuál de los dos odio más —Sira se seca bien el pelo.

—Ven, te dejaré algo de ropa seca —la ayudo mientras la llevo hasta mi cuarto.

Ella ha elegido lo que quería llevar y se lo he dejado. Cuando bajamos, el charco que había ya está seco y fregado por Pedri y los chicos están más relajados.

—La pobre Sira se viene a comer y le tenéis que torturar —murmuro, negando con la cabeza.

—Que era para Gavi —aclara Pedri.

—Pero, le ha caído a Sira.

—Pues que no hubiera pasado por esa puerta.

—Eres como un crío, no se puede razonar contigo.

—Soy más mayor que tú.

—No lo parece —enarco una ceja —. ¿Qué vamos a comer?

—Os apetece... ¿Verduritas? —bromea Gavi.

—Puag —pongo cara de asco —. Hoy no me apetecen.

—¿Hago unas hamburguesas? —pregunta Pedri.

—¡Sí! —exclamamos los tres a la vez, dejando a Pedri con cara de cansado.

—Eso significa que nadie me ayudará.

—Efectivamente, hermanito —le doy una palmadita en el hombro y me siento en el sofá.

—Que pesada —resopla, yéndose a la cocina.

—Eso tú.

—t/n, ya no te oye —habla Sira.

—Pues que sepa que es un burro.

—Cuidado no le rompas el corazón con esas palabras tan feas —comenta sarcásticamente Gavi, mirándome con la ceja enarcada.

—Tú cállate.

—Voy a ayudar a Pedri, no lidiaré con esta chica que parece un perro rabioso —se levanta, pero le detengo.

—¿Acaso te has visto a ti en el campo?

—Sh, perro rabioso.

—No me lo tomo enserio si me lo dices tú, el dinosaurio enfadado —me cruzo de brazos.

—Por esta vez, tienes razón —frunce el ceño.

—Siempre —lo corrijo, apartándome para que pase —. Que no se te olvide.

—Mentira —canturrea mientras entra a la cocina.

—Piojoso —lo miro mal.

—¿Crisis de pareja?

—¿Te vas a la mierda? —ladeo la cabeza, con un tono serio.

—Era una broma.

—Pues deja esas bromas —me cruzo de brazos.

—¡Gavi! —lo llama.

—¿Qué? —este se asoma desde la puerta de la cocina.

—Deja que yo ayude a Pedri, quédate con t/n —le guiña el ojo y al pasar por su lado, le da un golpecito en el hombro.

—Le falta un tornillo —comento mientras Gavi se sienta a mi lado.

Él se ríe ante mi comentario y se queda mirándome mientras uso el móvil, cuando lo veo de reojo, hablo.

—¿Vas a dejar de mirarme ya o qué?

—P... Perdón —aparta la mirada rápidamente.

Le revuelvo el pelo, divertida y él se ríe.

—No te pongas rojo, anda —le saco la lengua.

—No estoy rojo, estoy colorido.

—Idiota —me muerdo el labio inferior, divertida.

Poco tiempo después, nos ponemos todos a comer hamburguesas. Hablamos y nos reímos un poco ante los comentarios graciosos de Sira.

—Yo voy a dormir un rato —habla Pedri cuando terminamos.

Al final decidimos todos dormir un rato, Sira se va a ir con Ferran. Cuando cada uno vamos a nuetras habitaciones, me acomodo en la cama, pero Gavi entra a la habitación con su pijama de Lilo & Stich.

—¿Pued...?

—Sí, ven —lo interrumpo, dejándole un espacio en la cama.

—Menos mal, ahora noto raro dormir solo —se tumba y me abraza.

—No seas tan pegajoso —bromeo.

—Anda cállate y duerme —me roba un beso, dejándome en shock por unos segundos.

—Cállate tú que no puedo dormir.

Al final, me quedo durmiendo entre sus brazos, cálida. Esto no volverá a pasar, eh. Es porque estaba incómoda yo sola, nada más.
Cuando me despierto, Gavi está dormido muy tranquilo.

—¡EL ÚLTIMO EN LEVANTARSE ES UNA RATA! —grito, despertándolo de golpe mientras me pongo en pie.

—¡t/n, joder! —se queja, bostezando —. Eres gilipollas.

—Insultos no que te echo —amenazo, enarcando una ceja.

—Uy, mira como tiemblo —me muestra la mano de manera irónica.

—Venga, levanta —le doy un cojinazo.

—¿¡Pelea de cojines, eh!? —se levanta rápidamente y me lo devuelve.

—¡Te voy a ganar! —cojo un cojín y comenzamos a pelearnos, riendo.

—¿Qué es este escándalo? —entra de repente Pedri.

Gavi, sin pensarlo, le tira un cojín y mi hermano se une a la pelea. Estamos así como diez minutos hasta que, cansados, nos tiramos al suelo, riendo.

***

Hola! Quiero aclarar unas cosas ⚠️

— El maratón es al final de 3 capítulos porque no he podido escribir más y no quiero dejaros sin subir capítulos.

—Para compensarlo, haré otro maratón (aún no sé de cuántos capítulos) pronto, avisaré cuando.

Y pediros disculpas porque estoy cambiando mi habitación y no he podido actualizar rápido<3

¡¡FELIZ AÑO NUEVO 2023!! 🫶🏼