Prólogo

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Seis adolescentes en un antro en una noche de sábado. ¿Qué podría salir mal? Sigma ya había hecho una lista de unas cuantas cosas, pero la situación ya lo sobrepasaba.

Agatha estaba completa y absolutamente ebria, cantando karaoke descalza mientras bailaba break dance sobre la mesa. Fyodor, que parecía al borde del desmayo, se negaba tercamente a dejar de beber y sentarse a recuperar el aliento, y siguió con su perreo intenso. Gogol estaba estafando a los borrachines. Y Dazai y su novio, Chuuya (Dios se apiade de sus almas) parecían a punto de tener sexo en la mitad de la pista de baile.

Dejó escapar un suspiro. ¡Lo único que quería era una noche normal! Los chicos le habían prometido que ir de fiesta y beber hasta el desmayo era lo que hacía cualquier joven promedio, pero incluso entre algo tan común y corriente como aquello sus amigos conseguían llevarse toda la atención. Cuando se unió a la orquesta de la Uni, no creía que se vería envuelto en situaciones como aquella.

Sin embargo, ahí estaba, rodeado de sus amigos genios/borrachos/prodigios/idiotas en un antro en la puta mierda de lejos de su casa el sábado antes de la semana de exámenes. Aún no había bebido nada y ya se sentía mareado y con ganas de vomitar.

Sigma suspiró. Fyodor se le acercó tan sigilosamente que no se dio cuenta de que lo tenía al lado hasta que se dio la vuelta y casi le da un paro cardíaco.

—¡Santo Dios! —Exclamó, llevándose la mano al corazón— Me asustaste.

—PerdOn —Se disculpó el ruso hipando.

Agatha se acercó también a trompicones, y se recostó contra el hombro del joven de cabello bicolor, riendo tontamente y acomodándose un mechón de pelo tras la oreja.

—¡Oíghan uztedess Doz! —Les gritó a Dazai y Chuuya— ¡Conzigance un mothEl!

Dazai y Chuuya, también borrachos como una cuba, rieron y se pegaron más el uno al otro.

—¿Vamos a un motel? —Preguntó el castaño en voz baja, pasando su mano por los muslos de su pareja.

—¿Mhg? Ajá, uN mOtheL SuEna vIen —Chuuya restregó su entrepierna con la del contrario—. ¡Hoi eS nOche De sExOoOo!

Entre risas y tropiezos, caminaron torpemente a la salida. Tal vez a pedir un taxi e ir un motel, o quizás a ir al baño a vomitar todo el alcohol que habían ingerido, para luego tener sexo ahí mismo. Esos dos no tienen pudor alguno.

—Boi ah iRme a vailAr —Masculló Fyodor, pero Sigma le agarró el brazo y alguien más le cayó encima.

—¡Eh, Dos-kun! —Saludó Gogol— Ojo con la anemia. Te veo bastante ahogado.

—Es cierto —Dijo Sigma—. Debes tener cuidado, descansa un poco.

—Ño —Terco como mula, el ruso se separó de ambos—. Voi a bEbeR.

—¡Es bErdad! —Exclamó Agatha— ¡SigmA-cHan aún no A beBido!

—¡Ah! ¡No, yo no quiero...!

Pero Sigma no pudo negarse. Sus amigos lo acorralaron gritando "¡Bebe! ¡Bebe!". El alboroto causó que borrachos desconocidos se unieran al coro, y al poco tiempo medio antro estaba animando al joven a beber.

Así que, sin poder resistir la presión, tomó un trago. Y luego otro, y otro... 

Al final, las siluetas empezaron a desdibujarse y perdió la noción de lo que sucedía a su alrededor.


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Ok , antes que nada, ¡Feliz año nuevo!

Espero la hayan pasado súper y que hayan comido mucho.


Ahora sí, ¡Bienvenidos a esta nueva historia! He estado buscando historias de Gogol x Sigma, pero ninguna me convence demasiado (similar como lo que me pasó con el Fyoyazai), además tampoco he encontrado muchos fanarts, así que quise hacer esta historia.

Después de todo, los escritores escribimos lo que nos gustaría leer.

Espero les guste!

Conquistando a SigmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora