Amor De Tres |Station 118|

Capítulo 3

Buck y Eddie habían cumplido su promesa y ahora nos encontrábamos de camino al gimnasio.

-¿Ya tienes calefacción? - pregunto Eddie mientras Buck conducía.

-Si pero no se como se usa - dije con una risa - Mis padres vendrán a cenar por lo que les preguntaré - dije.

-No será tan difícil - dijo Buck.

-Bueno pues después entramos en mi casa y miramos a ver - dije y el asintió.

Llegamos al gimnasio y a mi me dieron una tarjeta como de prueba en la que podría venir gratis todo este mes y luego si me gustaba apuntarme.

Fui al vestuario y dejé mi bolsa de deporte en un casillero, cogí mi botella de agua y salí de allí esperando a Eddie y a Buck.

-Sois unos tardones - dije cuando les vi salir. Ellos rieron y les seguí hasta las máquinas. - ¿Tan pronto vamos a empezar con el sufrimiento? - les pregunte.

-No, primero te pondrás en la cinta y correrás unos cinco kilómetros de forma suave - dijo Eddie.

-Suelo correr catorce - dije.

-No seas terca y obedece - me dijo Buck y yo reí.

-Okey - dije y me fui a la cinta seguida de Eddie.

Puso la velocidad y la distancia que correría junto al nivel de inclinación. Cogí mis cascos y los conecte a mi teléfono.

-Buck y yo vamos a estar haciendo pesas, de que termines ve allí - me dijo Eddie y yo asentí - Y deberías atar tus cordones - dijo y yo mire a mis zapatillas.

-Te odio - dije y vi como el reía.

Comencé a correr mientras escuchaba música y veía como Buck y Eddie hacían pesas. La máquina aviso de que ya había hecho la distancia y puse medio kilómetro más para hacerlo caminando.

Termine y bebí un poco de agua mientras me acercaba a donde Buck y Eddie estaban haciendo pesas.

-¿Ya está? - pregunto Buck y yo asentí quitando mis cascos. - ¿Cuál es el máximo que puedes levantar? - pregunto mirando la máquina.

-Cincuenta kilos sin complicación y con un poco más de complicación setenta - dije y el asintió.

-Vamos a por los sesenta - dijo Eddie.

Me senté en la banca y le puse el tope a mis piernas.

-Ahora no llego a por la barra - dije riendo.

Eddie la bajo y la cogí llevándola a mi pecho.

-Baja cinco kilos por favor - dije después de hacerlo bajar dos veces y ellos rieron.

-Bajaremos a cincuenta - dijo Eddie y yo solté la barra.

-Encorva un poco la espalda y date más para delante - dijo Buck poniendo una mano en mi espalda baja.

Me dio la barra y lo pude hacer mejor, estuve unos diez minutos y pare cuando Eddie me lo mandó.

-Bien, empecemos con las dominadas - me dijo Eddie  y yo asentí.

Buck se sujeto a la barra de las dominadas y me miro.

-Eddie te ayudará a subir y luego me abrazaras con las piernas - dijo Buck y yo asenti.

-¿Te peso? - le pregunté y el soltó un risa.

-Muchísimo mira - dijo y soltó un brazo haciendo que me abrazase más a él.

-Eres tonto - dije colocandome bien en la barra y el soltó una risa.

-Separa más las manos - me dijo Eddie y yo asentí.

Buck y yo comenzamos a hacer el ejercicio y después paramos.

-Ahora tu sola - dijo Buck.

Solo puede repetirlo dos veces y me baje de la barra.

-Menos es nada - dijo Eddie y yo reí mientras bebía agua.

-¿Nos vamos? - pregunto Buck y yo asentí.

Me di una ducha rápida y me puse algo cómodo, salí y vi que ellos estaban saliendo al mismo tiempo.

-¿Queréis pasar? - pregunte cuando llegamos a mi casa.

-Vale - dijeron ellos y Buck aparco el coche.

Abrí la puerta y desconecte la alarma. Fui hasta la puerta del jardín y abrí a Rex quien entró corriendo a la casa ladrando a Buck y Eddie.

-Ey, basta, a ellos no les tienes que ladrar, son buenos - dije cogiéndolo en brazos.

Rex miró con desconfianza a Buck y a Eddie pero cuando lo pose en el suelo comenzó a oler sus zapatos contento.

-¿Queréis tomar algo? - pregunté caminando hasta la cocina.

-¿Hacemos una ensalada cesar? - pregunto Buck y yo asentí.

Entre los tres preparamos la ensalada y salimos al porche a comerla.

-Debes mirarle la calefacción - le dijo Eddie a Buck y yo reí.

-De qué termine esto - dijo el señalando su plato con ensalada.

Rex estaba atento a nosotros por si se nos caía comida aprovechar él. De que vio que no le dábamos nada levantó su pata colocándola en mi pierna para que le diese comida.

-Eres un consentido - dije dándole un trozo de pollo.

-¿Que tiempo tiene? - pregunto Eddie.

-Cuatro meses - dije.

Terminamos de almorzar y lleve a Buck donde tenía la instalación de la calefacción.

-¿Estas segura de que te la han instalado bien? - pregunto

-Si - dije con una risa - En el catálogo venia así - dije.

Mire a Eddie y los dos estallamos a carcajadas al ver a Buck enfadado.