Debutar no fue una tarea sencilla, y lo que vino después tampoco. Mingi tuvo que enfrentarse a mucho, a sus miedos, y a su pasado. Al amor, y al odio.
☂︎
ONE SHOTS
𝐌𝐀𝐑𝐀𝐓𝐇𝐎𝐍
☔︎
HongMin + HwaGi + YunGi + YeoGi + SanGi + WooGi + JongGi
Yeo Gi ────── Yeosang era muy celoso, por eso comenzó a dejar su nombre a lo que le pertenecía.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mingi no usaba ropa muy reveladora, solían vestirlo con jeans sueltos, camisetas anchas o suéteres, algunas veces exponían su cuello y su pecho, pero no lo suficiente, por lo que Yeosang estaba muy confiado en lo que hacía, muchas personas jamás verían esas marcas, pero quizá sí las adecuadas.
―Y-Yeo... Yeosang ―Mingi mordió la almohada y contrajo cada músculo de su cuerpo al sentir que la velocidad con la que Yeosang estaba torturándolo aumentaba.
―¿Quieres que pare, dulzura? ―preguntó ronco, disminuyendo drásticamente la velocidad de sus movimientos.
Mingi negó con la cabeza desesperadamente y movió sus caderas en un intento de que Yeosang aumentara la potencia de sus movimientos. Yeosang sonrió y volvió a retomar la velocidad anterior, haciendo que la cama volviera a mecerse.
Yeosang volteó el cuerpo de Mingi, viéndole de frente. Los ojos dilatados y llorosos de Mingi se fijaron en su erección, entrando y saliendo de él provocando que su excitación aumentara el doble.
―Aw, mi amor, estás cerca...
La polla venosa de Mingi se sacudió suavemente y Yeosang volvió a tomarla en su mano, comenzando a masturbarlo.
―No... No... ―Mingi intentó quitar la mano de Yeosang, pues estaba tan sensible que dolía.
Yeosang chistó suavemente y lo soltó justo a tiempo cuando la corrida de Mingi manchó su abdomen y los espasmos de su ano comenzaron a torturarle, mandándolo a él a su propio orgasmo poco después.
El cuerpo de Mingi estaba ligeramente lastimado, habían marcas en los lugares correctos, desde pequeños rasguños hasta mordiscos y suaves hematomas.
Yeosang había llegado a eso tiempo atrás.
La relación de Yeosang y Mingi mejoró notablemente cuando el mayor hizo el intento de ser más cercano a Mingi, en un principio solamente no quería que las personas creyeran que ellos se llevaban mal, simplemente no habían sido tan cercanos como con el resto.
No fue rápido, pero tampoco lento.
Yeosang compraba la comida y se la llevaba al trabajo cuando Mingi se quedaba hasta tarde, algunas veces tomó prestado el auto de su mánager para ir a buscar a Mingi y comenzó a tomarse muchas más atribuciones con él a medida que el tiempo pasaba.
Ninguno de los dos pareció planearlo, pero un día, cuando cayó la primera nevada y el menor regresaba tarde a casa, Yeosang lo esperó con mantas térmicas y un postre que sabía que le gustaría mucho porque había escuchado que quería probarlo. Los ojitos de Mingi brillaron llenos de lágrimas y Yeosang sintió una profunda tristeza en su corazón, deprimiéndose porque no podía hacer mucho por él; Yeosang no podía quitarle sus traumas, no podía hacer que se sintiera mejor cuando tanta gente le decía lo malo que era.
