213 | HyunLix

XI

—¡Capitán! ¡Aquí hay un cuerpo! —vociferó unos de los bomberos.

—¿Donde? —se escuchó abajo.

—¡Suba al segundo piso!

Esperó a que estuviera junto a él antes de entrar a la habitación.

—En la cama —señala.

El cuerpo reposaba entre los resortes del colchón, casi caído, llegando parecer un nido.

—Terminen de apagar las ligeras llamas en el lugar, les indicaré a los paramédicos para que vengan con mantas térmicas, revisen si hay otros cuerpos.

—Está desnudo —uno de los bomberos dio la espalda al encontrarse con eso.

—Oh por Dios —el oficial buscó a su al rededor algo con lo que se pudiera cubrir el cuerpo. —Mira, ponle eso encima —le pasó a otro oficial un trozo de tela sin saber exactamente qué era.

Este se lo colocó encima como había indicado y continuaron regando agua en el lugar para detener el algunos objetos que seguían incendiados.

Los paramédicos fueron hasta la habitación y se acercaron al cuerpo, con cuidado, uno de ellos, colocó sus dos dedos debajo de su mandíbula y en su muñeca.

—Está vivo, tiene pulso.

—Pero... ¿como es posible? todo está perdido.

—Subámoslo a la camilla, con cuidado.

Movieron el cuerpo, lo colocaron de manera recta y fue transportado hasta una ambulancia.

—¿James? aquí Gordon, solicito autorización para ingreso de emergencia con carácter de urgencia, por favor asignar —el paramédico habló por la radio.

"—Aquí James, hospital central, les estarán esperando para la asistencia, cambio."

Habían llegado con rapidez al lugar, depositaron el cuerpo en una camilla más alta unos médicos le recibieron y llevaron el cuerpo hacia dentro.

—Joven, de algunos veintitantos, con posibles quemaduras de segundo y tercer grado, incendio por explosión.

Acomodaron la camilla en una sala y esta fue rodeada por varios enfermeros.

—Oxigeno —colocaron una máscara cubriendo su boca y nariz.

El cuerpo fue descubierto y los enfermeros comenzaron a limpiar su piel.

—Revisemos las quemaduras.

—Doctor, no hay ninguna.

—Su piel está sucia y no podemos verlas correctamente.

La mirada del doctor fue hasta una de las enfermeras y está negó con su cabeza, por lo que decidió revisar por si mismo, dándose cuenta de que era cierto. El cuerpo fue limpiado por completo quedando aún más desconcertados.

—No hay ninguna herida superficial —menciona el doctor.

Le fueron realizados varios estudios para comprobar el estado del paciente, el cual fue positivo y a este punto, no entendían que pasaba.

—La policía pidió el informe y concluyó el joven de encuentra bajo arresto para investigación, un oficial custodiará la habitación hasta que despierte y luego será transportado a la comisaría.

La enfermera recepcionista asintió.

—Preparen todo para la localización de sus familiares, es todo.

—Gracias doctor Wang.

Felix comienza a moverse lentamente y a soltar quejidos. El doctor se acercó a este y lo observó por un momento. El pelirrubio quiso sentarse, pero fue detenido por los hombros para que permanezca recostado, este miró con extrañeza al hombre que tenía enfrente.