Lucas llegó a su casa, mientras su padre preparaba la cena.
-Hijo, que bueno que ya llegaste, ¿me ayudas a preparar la salsa?
-Sí pa', voy a dejar mis cosas en la habitación y regreso ¿vale?
Caminó por el pasillo que llevaba a las recamaras. Abrió la suya, y dejó su bandolera y su chamarra sobre la cama, despues regresó a la cocina.
-¿Qué tal te fue en tu curso? Cuéntame acerca de la escuela, tus amigos y demás.
Mientras cortaba los tomates para la salsa, le contaba a su padre como le había ido.
-Bien, lo importante es que hay salud, no saqué unas notasas, pero tampoco malas, y pues Roberto, el cuate del que te había hablado la vez pasada, se cambió de escuela- y así prosiguió su charla-. Oye Pa' ¿estarías dispuesto a dialogar con mi madre y convencerla de que me cambien de preparatoria?
-A que muchacho, ¿qué no te gusta tu escuela?
-Sí, solo que... digamos, quiero cambiar de aires- pronunció sonriente.
-Haber muchachito, digame la verdad. ¿Qué pasó?
-Bueno...digamos que me reté a palabras con un profe y bueno... Salimos mal, y me da miellito-dijo encogiendose- que se desquite con mis calificaciones de los futuros cursos.
-A verdad, ¡quería cambiar de aires ni que mangos!, sabía que no me decias la verdad, pequeño grandulón-dijo dandole un golpecito con su puño al brazo de su hijo. Jesus era un padre amoroso- ¿es todo lo que me vas a contar?
-Seee, tengo que tener más anecdotas para distraerte los siguientes días de vacaciones en la tienda.
El padre de Lucas tenía una tienda de antigúedades, cualquiera diría que chiste tiene una tienda así, pero es un negocio muy fiable, nunca falta la gente rara que quiera alguna antigúedad. A pesar de que sus padres llevaban tres años divorciados, Lucas y su padre jamás dejarón de comunicarse y llevarse tan bien.
-Y... ¿Dónde vivirías? Porque la preparatoria de aqui te queda retirada de la casa de tu madre.
-Obviamente aquí contigo.
-Si nos escuchara tu madre, segurito me castra. Vale yo hablaré con ella y trataré de convencerla- Lucas sonrió- pero no prometo nada.
Cuando terminaron de cenar vierón un rato la tele, bueno su papá estaba viendo el box, mientras Lucas leía...
"... la chica caminaba por un oscuro pasadizo, en ese momento resbaló, y cayó al fondo de un pozo, para despues escucharse un grito de terror.
Terry trató de encontrar el lugar de donde provenían los gritos, cuando escuchó una voz en su oido..."-Muchacho, ya es tarde, largo, a dormir, que mañana me tienes que ayudar en la tienda.
Lucas respingó agitado, de tan sumido que estaba en la lectura, no se había dado cuenta que se había terminado el programa de box, y sólo estaban anuncios en la tele de cremas antiarrugas.
-No inventes viejo, ¿no ves que soy cardiáco?. Su padre soltó una carcajada.
-Carajo chaval, antes era "papá o pa'" ahora hasta "viejo" me dices. Vale, si no te quieres ir a dormir, yo sí. Mañana te quiero a primera hora.
Jesus se retiró de la sala. Lucas tomó el libro de terror que estaba leyendo. Cuando llegó a su cuarto, observó el computador. «¡Rayos! Olvidé conectarme, espero y no me haya estado esperando» pensó recordando la charla de Facebook. Apagó la luz de su dormitorio, pero se quedó intrigado... ¿Quién sería aquella chica que despertó en el parque? O mejor aún ¿cómo se llamará, dónde y con quién vivirá? Talvez sea la unica vez que la vea. Pensando en todo eso, se quedó dormido.
Ais!!! Que bueno se está poniendo esto...
Se van tranzando las hebras...Ojú!!! Esto me agrada e.e
Nos leemos en el siguiente capítulo.Besos *3*
Viluu Lobato ;)
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Nunca más en Soledad
Novela Juvenil¿Qué hacer cuando has sufrido muchos golpes en la vida? -Liliana, por favor, no corras más, y dame la cara cobarde-era Lucas por n-esima vez persiguiendola. Es bueno huir, quiza. Pero...¿por qué le huyes a algo que no conoces, o que pretendías conoc...