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La pesadilla que tanto temía Park Jimin, había llegado, ese momento que había soñado y que le daba temor se había cumplido. Pesadilla donde Min Yoongi era preso de la ira y el desprecio de su padre, el no sabía que pudiera llegar tan lejos, no sabía nada, no conocía a su padre.

—¿Donde estás Yoongi?— Se preguntaba el pelinaranja.

Había pasado dos días desde la desaparición de Yoongi, había avisado a la policía pero le dijeron que tendría que esperar cuarenta y ocho horas para volver a poner la demanda de desaparecido. Pero el no iba a quedarse con los brazos cruzados, optó por avisarle a sus amigos, para que ayudarán a encontrarlo.

El no podía desaparecer así por que sí, el no era de irse por varios días, Jimin tenía el presentimiento de que algo malo le había pasado, lo sentía y no podía con la angustia.

—Tranquilo Jimin, va a parecer— Taehyung calma a su amigo.

Sentía dolor en el pecho, se sentía angustiado, molesto y triste, muchas emociones encontradas, es difícil pensar que lo dejaría, todo el mundo lo sabía.

—Ve a descansar— Habla Jungkook, levantándose para ayudar a Jimin a irse a su recámara.

Se sentía tan vacía sin Min Yoongi, no quería estar ahí, quería salir a buscarlo, ayudarlo sin importar qué, quería abrazarlo, regañarlo por hacer eso. Quería besarlo, y estar con él y no soltarlo.

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Dos días antes

Hoseok.

Salir de noche es agradable para mí, es tan agradable que me da paz, ver la oscuridad del cielo me recuerda a ella, y me da tanta tranquilidad, y ver las estrellas es ver los brillos de los ojos de mi amada, el aire fresco pegando a mi rostro, es caricia de ella para mí.

Camino por la calle oscura de Busan, con los brazos cruzados en el pecho, hace frío, es temporada de invierno, así que ay nieve por la acera, los vidrios de los puestos empapados.

Sigo caminando pero me detengo cuando veo a Yoongi salir de su trabajo, levantó la mano para saludarlo, pero no me ve, no estoy bien de la garganta para gritar, así que intento apresurarme para alcanzarlo, da vuelta en una esquina y aún lo sigo, intentado alcanzarlo «Por Dios sigue caminando tan rápido» sigo caminando, pero me detengo al ver que una camioneta sube a la acera impidiendo el paso a Yoongi, dos hombres altos y fornidos sale de aquel vehículo intentando noquear a Yoongi, pero este esquiva el golpe.

Voy corriendo en su auxilio, y uno de los que están peleando se da cuenta de mi presencia y saca una navaja, amenazándome en que si digo algo, o hago algún movimiento me lo clavara en el cuello.

—Dejenlo— Intento decir para que entren en razón.
No se en que problema se metió ahora, pero sea como sea, así no se arreglan las cosas.

No es la primera vez que lo saco de un lío como esté, Yoongi es un imán de problemas.

—No te metas niño— Dice el sujeto que esta en la camioneta.

Yoongi sigue luchando con el otro tipo, que le dobla de estatura, y puede que de fuerza también, ya que le da una patada en la costilla y este cae al suelo, quejándose.

Veo que lo sujetan del rostro y le ponen un trapo en la boca, que no se que carajos tenga, pero lo hace dormir y cuando veo que ya lo están subiendo en la camioneta, hago una maniobra para que el sujeto deje de amenazarme con la navaja que ya se en el suelo.

YOONMIN: Exotic Dancer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora