Somos Un Equipo

10

Inko Midorilla se encontraba en el trabajo en el momento en el que recibió la llamada del colegio de su hijo informando que había habido un ataque de villanos y había resultado herido. Su corazón se detuvo por un instante ante la preocupante información y emprendió rumbo a la escuela para ver a su Izuku.

La preocupada madre fue recibida por el director en la entrada de la UA y guiada hasta la enfermería. Atravesó la sala llena de camas de hospital, algunas de ellas con las cortinas cerradas, hasta que escuchó la voz de Katsuki tras una de las cortinas y no dudó ni un segundo en apartarlas y adentrarse en la pequeña sección de la enfermería, sus ojos ansiosos en busca de su hijo. Lo vio despierto, llevaba una venda envuelta alrededor de su mandíbula y estaba a punto de decirle algo a Katsuki cuando sus grandes ojos esmeralda se clavaron en los suyos propios que se desbordaban en lágrimas empapando su rostro.

-¡Izuku, mi tesoro!- Inko se lanzó a los brazos de su hijo y lo envolvió en un suave abrazo con miedo de hacerle daño si apretaba demasiado. Notó a Katsuki removerse incómodo por el rabillo del ojo y se separó del pecoso para examinar al rubio que no tenía heridas a la vista, Izuku solo llevaba la venda de su mandíbula y la mujer se deslizo en una silla libre al lado de la cama con alivio.

-Mama, estoy bien, solo me desmayé por pérdida de sangre y Kacchan no se ha hecho nada- Ante la preocupada inhalación de la fémina decidió corregir sus palabras agitando los brazos con vehemencia. -Quiero decir, no fue nada, de verdad, solo una pequeña herida en la mandíbula, nada grave.

-Deku, ese cabrón te desintegró la cara- Inko soltó un grito agudo del espanto y se inclinó a examinar a su bebé.

-¡Kacchan! No lo digas así, solo me rozó, apenas ha sido un rasguño- el pecoso hizo una pausa bajo la mirada acusadora de su amigo- Vale, fue un poco más que un rasguño, pero de verdad que estoy bien mama, no te preocupes, Recovery Girl ha dicho que solo me quedará una pequeña cicatriz, nada de que preocuparse.

-Izuku mi amor, no puedo no preocuparme, soy tu madre. Se que eres fuerte pero tienes que tener cuidado, si te pasara algo... no se que haría- La voz de Inko se tambaleó al final y sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas.

El resto de la tarde se la pasaron hablando y escuchando a Katsuki contar como después de que Izuku se desmayara había aparecido All Might y el villano de los portales que al parecer se llama Kurogiri había teletransportado a Shigaraki, o el psicópata de las manos como lo llamó el rubio. También se había llevado al villano pájaro con esteroides, es decir, el nomu, y habían abandonado al resto de los villanos a merced de los héroes yéndose solo ellos tres como los putos cobardes que son. Izuku regañó al rubio por su lenguaje e Inko se aguantó la risa con las interacciones de los dos adolescentes.

La UA les dio dos días de descanso e Izuku descubrió que a pesar de que no era el único que había resultado herido, había sido el más grave después de sus dos profesores. En esos días, había pasado el mayor tiempo posible con Kacchan y sus madres los habían tenido que arrastrar entre gritos y pucheros a sus respectivas casas para dormir.

La vuelta a clase también fue tranquila, a excepción de los gritos preocupados de los alumnos cuando vieron a Aizawa momificado en vendas entrar por la puerta del aula para dar clase, donde anunció el festival deportivo que tendría lugar la semana siguiente y en el que tendrían que esforzarse al máximo para conseguir héroes interesados en sus pasantías. El peliverde también se rió con los comentarios sobre su cicatriz y su nueva apariencia "ruda", afirmaciones que Katsuki negó mientras le estrujaba los cachetes ignorando sus quejidos de molestia.

El problema empezó cuando terminaron las clases, ya que cuando fueron a abandonar el aula se encontraron con un impedimento, el pasillo estaba abarrotado de personas. Izuku se asomó de detrás de Mina, que había frenado en seco ante el obstáculo y observó con asombro a los estudiantes apelotonados.

-Vaya vaya vaya, pero si son los alumnos de 1ºA, tan arrogantes por haber enfrentado a los villanos- Un chico rubio de pelo corto y repeinado se burló con voz irritante. -Pero no os lo creáis tanto, porque la clase B vamos a arrasar en el festival de deportes- Izuku estaba confundido ¿Todo este alboroto era por el ataque de los villanos?

-¡¿Qué está pasando?! No se debe bloquear el pasillo, hay gente que necesita ir a almorzar- La voz de Iida se escuchó desde dentro del aula y al pecoso le pareció ver una de sus manos agitarse sobre la cabeza de sus compañeros, pero ese era el menor de los problemas, porque Katsuki se había hartado de esperar a que los de delante salieran y se estaba abriendo paso a empujones hasta la puerta del aula donde se podía ver la causa del bloqueo.

-¿Haa? ¿Qué cojones pasa aquí? ¿Acaso hay una puta fiesta en nuestro aula y no me he enterado?- Izuku se golpeó mentalmente, ese comentario no iba a ayudar en la situación.

-Así que tú eres el chico del examen de ingreso que iba explotando robots gritando como un energúmeno- El rubio se giró en dirección a la voz y quedó frente a un chico de pelo morado con grandes ojeras cuyo pelo parecía desafiar a la gravedad. 

-Ese soy yo ¿Quieres que te mate?

-¡Kacchan! No amenaces a la gente que ni siquiera conoces- Katsuki lo miró con el ceño fruncido, pero solo resopló y se cruzó de brazos

-¿Kacchan? ¿Qué clase de nombre es ese? ¡Parece el de un bebé!- El rubio de antes interrumpió.

-A ti si que te mato bastardo- Gruñó el de ojos rojos empezando a crear pequeñas chispas en sus palmas e Izuku se apresuró a tirar de su chaqueta para evitar que se lanzara sobre el idiota, pero el pelimorado volvió a intervenir.

-Todos los de las clases heroicas sois iguales, os creéis mejores a los demás por vuestros quirks super poderosos y destructivos, pero el resto tienen que trabajar duro para llegar al mismo nivel. No os lo creáis tanto porque el festival deportivo también sirve para transferir estudiantes de educación general a heroísmo- Su mirada se afiló y su voz se volvió más sugerente -Y viceversa- Después de eso se dio la vuelta y salió del pasillo dispersando con él un gran número de estudiantes.

Hola, se que he tardado bastante, pero los exámenes me dejaron seca de inspiración. PERO no hay problema porque he vuelto y ya tengo pensado el próximo capítulo casi entero, me falta escribirlo. Siento mucho la espera.

¡Espero vuestros votos y comentarios! Hasta el próximo capítulo.