🦋PROYECTO HILOS ROJOS PARTE I🦋-[BORRADOR], (1) #karmaadwards2023 [+18]

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Me encuentro de rodillas frente al inodoro, no paro de vomitar mientras mi mente no deja de dar vueltas tras lo presenciado hace tan solo un par de horas. Me niego esas vivencias, lo que quiero es retroceder y vivir en la ignorancia. Regresar meses atrás, cuando el valle rojo solo eran cuentos.

Me levanto con dificultad, el servicio da vueltas y rodeándome, nada más puedo ver el recuerdo de mi padre anunciado aquella desdichada noticia.—"Son mis hijos"— su voz se hace eco a mi alrededor. Una y otra vez formando un bucle. Unos golpes en la puerta me reclaman.

—Circe, necesitamos que salgas. Tenemos que estar todos juntos.— Las voces de mis amigas se escuchan en mi habitación, me imagino que el resto de la familia estarán ocupados buscando a Cercenus. Por otra parte, los Goychea están creando el antídoto para el veneno de Rambra, impregnado en el cuchillo. Tras mucho discutir, Armando decidió que era mejor no mover a Agamenón, hasta su recuperación.

Sé que lo segundo no debe de tardar mucho, estoy deseosa de quitarme el dolor físico que se acomoda en mis antebrazos. Pero, eso significa que Agamenón se entere de la verdad. ¿Sentirá la misma repulsión?

Es inevitable eliminar mis sentimientos de golpe, pero al mirarme en el espejo solo me repugna la idea de tener lazos sanguíneos con él.

Otra forma de finalizar todo tras la fórmula, es crear el rechazo con el hechizo. Anular el enlace de matrimonio y romper el lazo.

O esa es la excusa que me quiero poner, ahora que está hecho, no deseo separarme de Agamenón. Sin embargo, descubrir nuestros orígenes, hacen que de nuevo el estómago se revuelva y otra bocanada de vómito refluya queriendo salir.

Mi estabilidad emocional ha decaído, mis padres han jugado con todos nosotros. ¿Qué es lo que necesitan? Ambos son poderosos sin necesidad de afianzar ninguna relación. Devastada y traicionada por mi propia familia, sumado a la perdida de más seres queridos me rompe desde dentro. El veneno está llevando a la muerte a Agamenón y estoy segura de que compartir la misma sangre también. Sin saber por qué, la culpabilidad me invade. Una vez más insisten con los golpes en la puerta.

—Circe, abre. Juntas encontraremos una solución, confía en nosotras. — Esas palabras hacen eco en mi cabeza, no puedo evitar reírme sin ningún control. ¿Arreglarse? Qué positivos están todos de repente, yo solo tengo ganas de esconderme bajo una roca hasta que me falte el oxígeno. Llorar y hundirme en mi propia miseria. He decidido dejar de lucha, cansada de sentirme una marioneta para los demás.

Los recuerdos vuelven, momentos íntimos que no puedo negar que he disfrutado. Sentimientos que me está constando gestionar e ilusiones que han acabado destruidas. Una arcada más que hace que continué vomitando. Me repugna el hecho de que me he acostado con mis medios hermanos. ¡Con ambos! Llegando a enamorarme de uno de ellos, y sin ser sincera con mis sentimientos. Él morirá antes de saber que lo amo. Y yo viviré con el castigo de nuestro incesto, el amor roto que jamás florecerá y de su muerte. "Perdóname, Agamenón".

Al final dejo que caiga la barrera que nos separa, entran al servicio y siento el abrazo caluroso de mis amigas. Me alegra ver que esta vez están apoyándome, me rompería si vuelven a darme la espalda. Es reconfortante tenerlas en este duro momento.

Cuando se separan de mí, es Aitana quien limpia las lágrimas que se derraman de mis ojos. Sonríe y me mira con pena, sé que es lo que en estos instantes todo el mundo siente por mí y... Mi marido. Es extraño pensar de ese modo en él, no entiendo muy bien como debo llamarle.

Necesito fortalecerme de energía, salir y respirar el aire natural del bosque.

—Esta vez estamos aquí, podemos encontrar una solución para arreglar las cosas y Cercenus aparecerá. — Quiero confiar en que esta vez no salgan corriendo, en que su miedo no las haga querer huir y dejarme sola una vez más.