𝙑𝙖𝙡𝙚𝙧𝙞 | Kirk Hammett

𝕾𝖊𝖓̃𝖔𝖗𝖆 𝕳𝖆𝖗𝖕𝖊𝖗

Valeri

Ahora los dias eran mas silenciosos de lo normal, mentiría si dijera que no extrañaba la bulla que ocasionan los chicos.
Últimamente me estoy quedando sola en el departamento, ya que estos se quedan en los lugares donde practican, que es en la casa de la otra banda, y este edificio tiene pinta de estar abandonado, créanme, ni el hombre más valiente de aquí soportaría quedarse un día entero solo, en este lugar repleto de insectos asquerosos, y ratas, o eso creo. Ni siquiera se cómo sigo viva.

-VALERIA ABRE.

Hablando de ratas.

-¡Lars! Sigues vivo hermano -Le abrí la puerta-

-Val perdón por no llamarte, estuve muy ocupado ensayando, pero adivina qué.

-¿Que?

-Mañana es nuestro última presentación, y será en el bar de aquí, ya sabes, el que vamos siempre.

-¿Entonces piensas pasar la noche aquí?

-Asi es.

-Que bien, nunca pensé decir esto, pero enserio los extrañaba, estar aqui sola es muy tétrico.

-Claro que no, a ti todo te da miedo.

-No seas mentiroso, tus pantalones se mojaban cada que veías una película de terror.

-¡Claro que no!

-¡Claro que si!

-COMO SEA.
-Vine a llevarte a cenar waffles, pero como te comportas como una niña, pues que pena, ¡ADIOS!

-¡HASTA LUEGO!

La puerta se cerró, y me senté en el sillón. ¡Rayos!, no había pensado que iba a cenar. Abrí la refri para encontrarme con pasta de ayer,pizza de hace mil años, y yogurt, y en la alacena solo había pan, así que decidí salir a comprar algo para cenar, pero al abrir la puerta, Lars seguía parado ahí.

-¿Quieres ir a cenar? -pregunto en un tono bajo, pero claro que lo escuche-

-¿Estuviste todo el rato ahí?

-¿IRAS A CENAR? ¿SI O NO?

-BIEN, Si te escuché, y sí, si voy.

-El coche está abajo, andando.

-¿A dónde vamos? -Cuestione ya dentro del auto-

-Primero iremos por mis amigos, después, vamos al bar, de siempre, ya que tenemos que cordinar algunos asuntos, para tocar mañana.

-¿Y luego?

-Vamos a casa, o ¿Quieres ir a otro lugar?

-No, de hecho ya me empezó el sueño.

-Espero que no te quedes dormida, como Cliff, porque si alguien te tiene que cargar, creeme que no seré yo.

-No te preocupes, me pediré un café cargado para que no tenga que pasar eso -reímos- Vi algunos folletos en la calle sobre ustedes.

-Si, los mandamos a hacer para que la gente pueda conocernos, ya sabes esas cosas.

-Se están haciendo oír bastante, entonces¿Todo va bien?

-Genial, viene mucha gente a vernos.

-Ahora último tocaran en uno de los bares más conocidos de la zona, así que supongo que vendrá más gente aún.