Estaba caminando junto a un grupo de personas con que me había ido encontrando en el camino, éramos sigilosos. No había nada alrededor, sin embargo, podía haber. Las calles silenciosas y vacías con el zumbido a lo lejos me estremecían, tenía la piel erizada todo el tiempo.
Llegamos al centro comercial y buscamos las máquinas expendedoras para abrirlas, teníamos que encontrar comida. De pronto un llanto a lo lejos me paralizó. Era el llanto de un bebé.
Me moví alrededor para ver pero no pude encontrar nada, hasta que una mujer que venía conmigo corría hacia nosotros con el rostro encogido, no decía nada pero su rostro hablaba por sí sólo. Había encontrado algo horrible. Caminé hacia donde venía y lo vi.
Un bebé cubierto de sábanas viejas y rasgadas, lloraba, al lado del bebé una mujer. Con el vientre completamente partido a la mitad como si hubiera sido rasgado desde adentro, porque seguro así fue. Me quedé un poco mareada por la imagen pero rápidamente tomé al bebé. Al girarme los demás me veían con el rostro completamente aterrado. Caminé hacia ellos y se alejaron, nadie hablaba, no había ruido hasta que un zumbido estruendoso invadió el lugar. Eran muchos zumbidos.
A través de las ventanas se veían las sombras y corrimos a escondernos. Yo corrí al aparcamiento, la zona más profunda del centro comercial, todo estaba lleno de grandes contenedores como los que llevan los buques por el mar.
Un estruendo resonó en todo el lugar y luego de un enorme temblor el aparcamiento quedó con una zona completamente al aire libre, corrí a la más oscura y me oculté como pude. Ahí estaban.
Enormes, con sus rostros humanos, pero esa forma alargada y grotesca de sus cabezas. Las asquerosas patas y las alas zumbando, eran hombres, lo fueron quizás. Ahora eran una especie de mantis gigantes. Asquerosos, carniceros y depredadores.
Reclamaban al bebé hablando en nuestras cabezas, oía sus voces parecidas a los zumbidos que hacían sus alas resonando en mi cráneo. Era doloroso y horrible. Abracé con fuerza al bebé y corrí a un contenedor y lo cerré desde adentro.
Seguro lo abrirían, seguro se llevarían al bebé, seguro moriría aquí. Pero almenos lo habré intentado...
______________________________
de 2023 | Diario de sueños
El bebé ofrenda
Resumen: centro comercial, huir, ser enorme asqueroso y como insecto, habla, mantis que habla, bebé en mis brazos de mujer muerta, contenedores.
Sensación: Miedo.
Notas: A veces mis propios sueños me perturban mucho.
ESTÁS LEYENDO
Cuentos Cortos | Diario De Sueños
Short StoryHistorias basadas en la realidad que creo cuando sueño, cosas muy locas, muy divertidas o muy aterradoras. Diario de sueños para guardar y contar mis sueños de forma más narrativa y descriptiva. Estoy un poco obsesionada con entender lo que sueño as...