Donde Cobramos Vida || Drarry / Harco ||

Capitulo 4

'No todo es tu culpa Harry.' Sí, Draco Lucius Malfoy, el archienemigo de Harry Potter había dicho esas palabras.

Al principio, Harry decidió reírse, luego se dio cuenta de que Malfoy hablaba en serio. Así que solo se encogió de hombros.

Luego se dirigió de regreso a su dormitorio. Se coló con cuidado, asegurándose de no crear una escena. Hermione estaba estudiando en la sala común, pero estaba tan cansado que tuvo que arrastrarse hasta su cama.

Estaba inquieto. Repetía las palabras de Malfoy en su cabeza una y otra vez. Era reconfortante, después de todo el alboroto que había sucedido, Harry se culpaba a sí mismo.

Solo que, si su madre no se hubiera sacrificado por él, él no tendría que cargar con toda esta responsabilidad sobre su hombro. Una cosa era tener una amenaza de muerte flotando sobre tu cabeza y otra ser responsable de muchos otros. Draco le había dicho las palabras exactas que necesitaba escuchar, que quería escuchar. Después de unas horas, se durmió.

'Harry... Harry Potter' Era una voz, casi haciéndole señas para que se acercara. El rostro de Voldemort apareció ante él. Se sintió impotente.

'Dame la Profecía.' Harry todavía estaba luchando. Su cuerpo estaba congelado. No podía alcanzar su varita, se sentía impotente. Voldemort se acercaba...

El sueño cambió.

'Mata al repuesto... Mata al repuesto' Entonces chispas verdes salieron disparadas de la varita de Colagusano y golpearon a Cedric. El terror recorrió la columna de Harry mientras dejaba que se hundiera.

Cedric Diggory yacía inmóvil contra el suelo. Muerto.

Harry se despertó sobresaltado. Estaba cubierto de sudor. Estaba jadeando pesadamente. Lentamente, se dirigió al baño, se duchó rápidamente, se cambió a algo casual y se dirigió a la sala común. Ron y Hermione saludaron a Harry con una sonrisa.

"¡Buenos días compañero! ¿Cómo dormiste?" preguntó Ron.

"Muy bien Ron." Harry se sentó frente a los dos. Empezaron a discutir sobre las clases y Hermione prácticamente estaba teniendo un ataque de pánico. Ron y Harry le aseguraron que lo haría bien.

"Honestamente, 'Hermione, eres la última persona que debería estar preocupada por esos exámenes extraños, Ron y yo ni siquiera hemos comenzado". dijo Harry.

"De ninguna manera. Ambos vendrán conmigo a la biblioteca este fin de semana y vamos a estudiar". Dijo ella.

Harry gimió y Ron golpeó su brazo. "Tuviste que decir eso, ¿no?" Ron dijo. Harry se rió.

Tampoco estaba ansioso por estudiar con Hermione porque ella se aseguraría de que dominaran todos los temas. Sin mencionar que ambos eran terribles en la teoría. Ron decidió que haría que Harry se arrepintiera de esto. No dudó de él.

"Me debes una partida de ajedrez". Ron dijo.

"¿Por qué?" Preguntó.

"Debido a que eres terrible en el ajedrez y al ver que acabas de arrojarnos a los dos debajo del autobús, quiero vencerte y halagarme en el proceso". Ron dijo.

Hermione puso los ojos en blanco. Harry sacudió la cabeza con incredulidad.

"¿Salimos a desayunar?" preguntó Hermione. Ron asintió y miró a Harry.

"Vayan ustedes. Los veré más tarde. Además, tenemos que ir a Hogsmeade más tarde". dijo Harry, con una sonrisa tranquilizadora.

"Amigo, ¿se trata de Seamus?" preguntó Ron, claramente preocupado.

"No, simplemente no tengo hambre". Él mintió. Tenía hambre, porque no había comido desde la noche anterior.

Se llegó a un acuerdo entre los otros dos y se marcharon. Regresó a su dormitorio.

Hedwig no estaba a la vista, así que comenzó a completar su ensayo de encantamientos, sobre encantamientos de locomoción. Después de una hora, había escrito 4 rollos de pergamino. Hermione habría estado orgullosa. Lo dejó a un lado y estaba a punto de hacer su ensayo de pociones cuando Hedwig voló. Harry notó que llevaba algo. Con cuidado, desdobló la nota, acarició a Hedwig con el pulgar y luego encontró otra bolsa que llevaba su lechuza.

Draco.

Potter

No te vi en el desayuno, scarhead. ¿Entrenamiento para el ballet?

Envié esas tartas de melaza que devoras todas las mañanas. ¿Tengo que obligarte a alimentarte?

PD: No los deletreé, si eso es lo que estabas pensando.

-D

Harry se sonrojó furiosamente. ¿Eran amigos ahora? ¿Por qué a Draco le importaba? Sin embargo, comió las tartas lentamente.

Decidió escribirle una nota a Draco.

Malfoy,

Eres muy observador y no, no necesitas alimentarme a la fuerza. Sí, los revisé en busca de hechizos y no encontré ninguno. Gracias, supongo. ¿Por qué estás haciendo esto de nuevo?

PD: Yo no engullo.

-Harry

Entonces Hedwig salió volando por la ventana con la nota. Harry instantáneamente se arrepintió de haber enviado esa nota.

¿Qué pasa si alguien más lo encuentra? Ambos estarían metidos en la mierda. Pero no se detuvo en ello. Hermione y Ron regresaron después de un tiempo. Seamus aparentemente lo estaba buscando.

Luego los arrastró a ambos a la biblioteca. Protestaron, pero ella era Hermione Granger y decidió que tenían que aparcar el trasero en la biblioteca y estudiar.

Harry le pidió que revisara el ensayo de encantamientos por él y ella quedó muy impresionada. Ron estaba copiando el suyo. Entonces Draco entró y Ron se burló.

"¿Te importa si me siento aquí?" Preguntó. Estaba tan perfecto como siempre. Caminaba con tanta confianza como si fuera el dueño del lugar. Su voz era suave pero exigente.

Hermione le lanzó una mirada mortal a Ron, claramente pidiéndole que se callara. Harry se hundió en el libro, porque estaba sonrojado. Ron le dio un codazo a Harry y lo miró, el sonrió.

Malfoy estaba justo al lado de Harry y frunció el ceño, tratando de concentrarse. Hermione fue a algún lugar a buscar referencias de encantamientos y Ron la siguió, queriendo alejarse del Slytherin.

"Engulles, ¿sabes?"

Harry suspiró. Miró a Draco. "Yo no." Respondió.

Él se rió. "Envié las tartas porque me ayudaste con el hechizo Potter".

"Vaya." dijo Harry.

"¿Esperabas algo más, Scarhead?" preguntó Draco.

"No se." Respondió.

"Estás confiado Potter." Él suspiró. Harry se encogió de hombros.

Hubo un silencio incómodo entre ellos.

Draco estaba escribiendo algo en su pergamino. Harry volvió a leer. Hermione regresó con tres libros.

"¿Estás revisando esto para leer un poco?" preguntó Harry, sarcásticamente. Ron estaba tratando de no estallar. Ella les lanzó otra mirada y decidieron callarse. Habían aprendido hace mucho tiempo, a no contrariarla.

Harry notó que Draco deslizó algo en su bolso. Le guiñó un ojo y se alejó. Las mejillas de Harry se sonrojaron. Después de una hora, decidieron regresar a la torre. Lentamente, Harry sacó el pequeño trozo de pergamino.

Encuéntrame en el lago negro a las 11:30 p. m.

PD: No te pierdas la cena.