•Pov pedri
Me sentía como un tonto al lado del papá de Amelia, estaba hablando con el doctor en inglés y yo no entendía ni la mitad de lo que estaban hablando, cosa que hacía que me pusiera más nervioso aún de lo que ya estaba al no saber lo que decían sobre el estado de Amelia.
Le doy una sonrisa a medias al doctor cuando se va, me acerco rápidamente al papá de Amelia para preguntarle lo que hablaron.
—esta estable, bueno, a medias, está en coma y no se sabe por cuánto tiempo, no se sabe si llegará a despertar. Aquí en Italia las cosas son diferentes, si no despierta en un mes deberán de desconectarla
Me quedo mirando un punto fijo por un buen rato, sin decir ninguna palabra, estaré semanas sin ver sus ojos? su sonrisa, su voz, sus chistes malos, como siempre me quiere llevar la contraria en todo.
Miles de flashback de recuerdos juntos se me vienen a la mente como si fuese una película, no quiero que se acabe nunca, me niego a que se acabe.
—puedes pasar a verla primero si gustas —me dice dándome un apretón en el hombro antes de pasarme el pase de visita
No le digo nada, sólo tomo el pase para dirigirme hasta la habitación que me habían dicho que se encontraba, siendo sincero, no sé si estaba listo para ver a Amelia llena de cables y máquinas por todos lados, no quería verla herida, muriéndose, me rompería ahí mismo y el hecho de no tenerla a ella para que me levante hace que me duela mucho más.
Abro la puerta con cuidado, al entrar la veo en la camilla, con miles de cables por su alrededor y el oxígeno conectado a su boca, su pelo rubio seguía con algunas partes con sangre haciendo que se noten más por su pelo claro.
Parece tan pequeña, tan maltrecha, apreto la mandíbula y mis ojos repasan los cortes en la cara,cuello,piernas y las manos, cortes profundos que no dudo que dejaran una que otra cicatriz, me fijo en su muñeca, donde tiene una herida cerrada por 10 puntos.
Era bastante grande, la más grande de todas las demás , repaso cada parte de su cuerpo herido hasta llegar a la venda que le envuelve la cabeza.
Me siento a su lado tomándole de la mano que no tenía accidentada, trataba de controlar las lágrimas, como si Amelia me fuera ver y me regañaría por estar llorando.
Porque sin duda lo haría, diría que no es gran cosa y que todo estaría bien, yo suelto una risa ante imaginarla diciendo eso.
—te pondrás bien, cierto rubia? siempre lo haces, siempre te levantas, no es así? —le digo esperando que ocurra un milagro y me contesté, pero no hay respuesta, solo el sonido del monitor cardiaco— joder Amelia cuanto lo siento, no debiste de haber venido a Milán para ver el partido, todo es mi culpa, yo debería de estar en esa camilla, no tú, no te lo mereces . Debes de despertarte vale? para volver a casa, ir a Sevilla a visitar a tus abuelos, hacer pizza aunque salga mal, venga si quieres nos subimos otra vez a un globo aerostático si tú quieres, debes de ir y modelar para esas marcas importantes que tanto luchaste para que te llamarán, tienes que seguir mandándome fotos en el trabajo diciendo que me extrañas, decirme cada vez que puedes canario o platanito —me rio entre sollozos al acordarme de los tontos apodos que me ponía pero que aún así me gustaban— dijiste que me llevarías a tu casa para conocer a tus perritos, debes de cumplir tu palabra, vale? Que todavía quedan muchos recuerdos por crear juntos...no me dejes porfavor
El único sonido de la habitación son mis sollozos y el monitor cardíaco, porque por más que quisiera escuchar su voz , ver sus ojos abiertos, verla sonreír, no pasa en ningún momento porque Amelia no despierta.
Quién sabe en cuanto tiempo más no lo hará, trato de pensar en positivo, de verdad que trato, tengo esperanza de que Amelia despierte antes de que se cumpla el mes, ella es fuerte y lo hará, estoy seguro.
Me quedo un rato más ahí, mirándola o simplemente estando con ella a su lado, estaba siendo egoísta? claramente, ya que su familia estaba esperando a que yo saliera para que ellos entrarán a verla pero tenía miedo, mucho miedo de salir y que después pase algo.
Un toque en la puerta me interrumpe, una señora de unos 45 años abre la puerta con una sonrisa a medias en su cara.
—Buenos días, soy Tamara, la nueva doctora de Amelia, me asignaron para que no haya problemas por el idioma, soy una de las pocas que habla español —ella suelta una risa leve antes de dejar la carpeta que tenía en sus manos sobre la mesa — eres su novio?
—algo así —ella asiente antes de volver a hablar
—lamentó lo que le pasó, cada avance que tenga se los informaré, ya sea algo malo o bueno, saben que si en un mes ella no se despierta la deb...
—la deben de desconectar —la interrumpo terminando la oración por ella— lo sé, pero ella es fuerte y despertará
Al decirlo en voz alta me reconfortaba a mí mismo, para tratar de pensar en positivo y que suceda eso, porque no quería pensar en otra cosa.
La doctora se queda un rato más en la habitación, anotando cosas, no sabía que eran pero ella las anotaba mientras veía a Amelia, no quería molestarla en su trabajo, así que salgo del lugar no sin antes dejarle un beso en la frente a Amelia y susurrarle un te quiero.
Vuelvo al lugar donde estábamos antes , todos se encontraban ahí, para mi sorpresa también estaban Álvaro y Alice.
—cómo está? —se apresura allison en preguntarme, qué le podía responder? No había una respuesta en concreto
—no se sabe cuándo despertará —le digo y ella me mira con la mirada perdida, la atraigo hacia mi pecho para poder darle un abrazo— ella es fuerte allison, despertará, yo lo sé
Ella asiente con la mirada llena de lágrimas, le pasó el pase de visita a ella y su papá , en realidad se podía entrar de a uno pero en estas circunstancias no importaba nada de eso.
Saludo a Álvaro y a alice, quienes me trataban de darme ánimo y apoyo, cosa que agradecía. Ferran me dice que vaya al hotel, debía de bañarme, despegarme, cambiarme de ropa, comer algo ya que lo único que había tomado había sido un café desde mi almuerzo de ayer y eso que ni siquiera era comida.
Luis es quien me acompaña hasta el hotel en su auto, ambos necesitábamos una buena ducha después de haber estado toda la noche en la clínica. Al menos ahora me podía quedar más tranquilo después de haber visto a Amelia, lo único que quedaba era tener esperanza y pensar en positivo.
"¿Puedes escucharme gritar porfavor no me dejes? Aguarda, aún te quiero, vuelve, todavía te necesito " chord overstreet
Nota<3
Que partidazo el de hoy Dios mío, todos se lucieronen realidad inventé eso de que en Italia pasaba un mes y la debían de desconectar, no se como será allá
en un rato más les subo capítulo 🫶🏻
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¿Destino o casualidad? - pedri González
Fanfiction•Destino o casualidad? El destino sugiere que todo ocurre por un plan predeterminado, mientras que la casualidad lo atribuye a eventos fortuitos y azarosos. Ambas ideas nos llevan a cuestionar si nuestras experiencias están ya escritas o son produc...