𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐄 | Elvis Presley

𝐭𝐡𝐞 𝐟𝐞𝐚𝐫

❝𝒆𝒍 𝒗𝒆𝒓𝒂𝒏𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒄𝒂𝒍𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒚 𝒕𝒆 𝒉𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒅𝒐 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒕𝒐𝒅𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒆 𝒕𝒊𝒆𝒎𝒑𝒐...

—¡Deja de ser un maldito narcisista, todo siempre tiene que ser sobre ti!—un arrebato de ira exploto en la mujer.—¡Siempre has tenido todo, la hermosa casa, la esposa más amorosa, los mejores hijos, el negocio y todos los medios se inclinan ante ti! ¡Y yo no tengo nada!—la señora lanzó un jarrón a los pies de su marido.—¡Nunca quise aceptarlo, pero el divorcio es lo mejor que nos puede pasar!

—Eres una maldita Clara, todo lo que tienes es gracias a mí, los lujos, los malditos diamantes que estás usando, los viajes salieron del "negocio" gracias al puesto que tengo, me debes mucho cariño. Deja de ser tan dramática.—solo tomo un puro y veía a su mujer en un ataque de histeria.

—¿Dramática? Me has estado engañando con otras mujeres, las traes a mi hogar, no tienes ni una pizca de vergüenza.—el coraje que sentíaera demasiado.—Yo te di todo de mí, te lo entregué y mira como resulta.

—¿Qué querías que hiciera? Yo me sentía muy solo, jamás estabas, no tenemos sexo y siempre ponías excusas tontas tenía que buscar en otra parte.

—¿Acaso nuestros hijos son algún tipo de excusa?—el silencio reinó en la habitación, los adultos solo se veían, por las mejillas de la mujer corrían lágrimas.

Ella amaba a su esposo, él era la persona más importante en su vida, por eso se casó con él.

—¿Qué hice yo? ¿No fue suficiente?—sus preguntas hicieron que el hombre se diera cuenta del gran daño que había hecho.—Al parecer no lo fue.

Y eso solo era la punta del iceberg, el matrimonio Winchester ya había tenido variados altibajos, desde la muerte de dos de sus hijos, engaños y la poca atención que había a la familia, los terminaron por romper. ¿Un divorcio? Ja, por favor, se sentía tan avergonzada, se había hecho la de la vista gorda sobre los múltiples engaños de su esposo por evadir la realidad le fue peor, era la burla de la sociedad.

Lo que ambos padres no sabían es que su hija escuchaba todo desde la puerta, ella sabía sobre esas mujeres, su padre jamás las oculto cuándo las traía a la casa solo le decía que guardará silencio, ya que si mamá se enteraría se pondría muy triste o le regalaba algo para que se callara, su hijo mayor lo había manipulado al decir que "eran parte esencial de su trabajo" bueno no sabía que ser senador de Carolina del Norte necesitará traer mujeres a su hogar a David le pareció una tontería ahora que era mayor que siguiera diciendo eso, igual que su madre hacia el que no veía nada, Angelina los dejo solos para subir con su hermano.

—David, ¿Puedo pasar?—el chico le dio el paso a su hermana, él estaba en su cama junto con una guitarra que le habían regalado en su decimoquinto cumpleaños mientras que escribía en su cuaderno de cuero.

—¿Qué pasó?—se preocupó al ver en como la niña tenía un semblante de preocupación.

—Mamá y papá ya no se quieren, creo que se van a divorciar.—le rompía el corazón ver a su hermana de esa manera y como la casita feliz se iba desmoronando ante sus ojos. Los últimos tres años las mentiras habían aumentado, si su mamá había aguantado tanto es por ellos porque quería que sus hijos tuvieran una "familia normal", no les faltara ninguna figura y poder ser felices, pero se arruinó. Sabía que era hora de hablar con la verdad con su hermanita.

—Ven aquí.—dejo aún lado sus cosas y palmeo para que se sentara aún lado de él a lo que ella lo hizo.—Muchas veces las personas se dejan de querer y solo se hacen daño cuando están juntas, es por eso que lo mejor es estar separados. Talvez mamá y papá solo necesitan hablar, tomar un tiempo, pero estaremos bien.—como se suponía que le explicará esta situación.