Lejanía

Capítulo 5

Cristal

Llegamos a mi salón de belleza favorito, está a cuarenta minutos de mi casa pero vale la pena, mi melena negra solo ha sido tratada por el personal de ese lugar.

-Princesa estas hermosa así- me dice Nick.
-Amor, quiero arreglarme- le contesto, toma mi mano y da un ligero beso.
-Esta bien hermosa- dice y nos bajamos del coche.

Al entrar por la puerta escucho la leve música del lugar, es muy amplio y minimalista. Tres áreas de peluquería, dos de manicura y pedicura y una de masaje para concluir.

-Buenos tardes señorita Gold, hace mucho que no la vemos por aquí- me saluda amablemente la dueña del local.
-Buenas tardes Carolina, ya extrañaba este lugar- le digo a modo de respuesta.
-Imagino que usted es su pareja- se dirige hacia Nick.
-Soy su tío señorita- responde cortante.

-Cristal vamos a empezar con tu hermoso pelo negro, Amelia mientras tanto irá arreglando tus uñas y luego Mateo te dará un masaje, cuenta de la casa no te preocupes- me explica Carolina mientras mira a Nick y admito estar celosa.

Me decido por cortar un poco las puntas de mi cabello para que quede recto y hacen algunas ondas en él, para variar. Las uñas consisten en un tono verde como siempre pastel tanto en manos como en pies.

-¿Te gusta?- le pregunto a Nick.
-Estas preciosa- me dice con un brillo en los ojos que solo veo cuando me mira.

Insiste en pagar el entonces realizado el pago nos dirigimos a la Dior a comprar algo de ropa. Luego de muchas vueltas me decido por un vestido gris escotado y un poco largo, unos zapatos de tacón cuadrado y llevo también unos pendientes con piedras plateadas. Esta vez si pago yo así que listo todo nos vamos.

Me baño y me arreglo nomas Nick me deja en mi casa y él se marcha para prepararse. Son las 6:50 pm así que supongo tener tiempo. Me baño y me depilo por completo, salgo en bragas al cuarto para vestirme allí, maquillo mi rostro muy sutilmente y lo reconozco, soy linda.

Nick toca el timbre de mi puerta y yo bajo para irnos. De camino ponemos música en su auto y me toma de la mano cariñosamente. Nos dirigimos a un restaurante cerca de su casa, nunca he ido ya que es nuevo pero confío en el buen gusto de mi "tio".

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Nícolas

He visto a Cristal crecer y hacerse mujer, enferma, arreglada y sin arreglar, pero cuando la he visto hace unos minutos perfectamente vestida y arreglada he sentido que volví a enamorarme de esa chica. La tengo a mi lado llevándola a una cita, nuestra primera cita, juro que ni mi cuenta bancaría hace sentirme tan millonario como ella. Ella es la mayor fortuna que tengo.

Llegamos al restaurante donde previamente hice reservación para dos, tengo planeada una sorpresa para mi princesa malcriada y estoy impaciente por ver sus hermosos ojos negros brillar cuando la vea.

-Buenas noches señor y señora Crown, por favor dígame si tiene reservación- nos saluda el encargado de administración.
-Si, una reservación a nombre de Nícolas Crown- le digo.
-Señorita Crown permítame tomar su bolso, no permitimos bolsos en las mesas- veo como el administrador mira a Cristal de arriba a abajo.
-De hecho, es señorita Gold y si, tenga mi bolso- le responde ella y reconozco sentirme mal cuando corrigió el apellido.

Nuestra mesa está perfectamente situada al aire libre con vista al cielo estrellado de esta noche. Una camarera se nos acerca a tomar nuestra orden para los entrantes y bebida, pedimos solo vino tinto.

-Si supieras lo hermosa que te ves...-digo mientras veo como se ruboriza.
-Tu me ves hermosa porque me quieres- toma mi mano.
-Yo te amo princesa- digo y beso su mano delicadamente.

Pasado un rato nos traen nuestra orden para cenar, mi hermosa niña pide una pasta con mucho queso, si, pagué de más para que le agregaran queso solo porque se cuanto le gusta. Mientras que yo pido tacos mexicanos con picante. La comida está exquisita y me deleito viendo a Cristal disfrutar su comida.

Retiran nuestros platos de la mesa para traer nuestra cuenta, creo que es el momento indicado para darle la sorpresa a mi niña.

-Cristal...- le digo algo nervioso.
-Dime cariño- me responde ella.
-¿Te gusta Grecia?- le pregunto sabiendo que si le gusta, siempre ha querido viajar a ese país.
-Yo amo Grecia- me dice emocionada.

Saco de mi chaqueta un sobre obviamente de su color favorito y con su nombre.

-Señorita Gold, me encantaría poder llevarla conmigo a una experiencia paradisíaca en dicho lugar que tanto ama- le digo divertido y ella sonrie mientras abre el sobre.
-Nick estos boletos son para mañana- me dice sorprendida.
-Son tres días preciosa, solo acepta por favor- me coloco de rodillas ante ella.
-Claro que acepto cariño- dice para acto seguido dejar un beso tierno en mis labios.

Pagamos la cuenta llevo a Cristal a casa, acordamos ver una peli y dormir juntos hoy. Primero debo ir a casa a recoger mi equipaje y traerlo a su casa al igual que llamar a Robert y decirle que estare fuera unos días, Cristal acordó decirle a su madre que iría de viaje con unas amigas.

Dejo a Cristal en casa y me dirijo a la mia, al llegar nana me recibe con un beso y mi maleta ya lista en la sala de estar.

-Eres la mejor nana- le digo dejando un beso en su cachete.
-Nick ten cuidado con esa muchacha- me dice nana.
-Nana yo la amo- le digo.
-Se que la quieres mi niño pero debes tener cuidado e ir despacio- me explica.
-Te lo prometo nana, te quiero- dicho eso guardo la maleta en el auto y voy para casa de mi amorcito.