«Si tú eres el lord, ¿eso en qué me convierte a mí? ¿En la lady?»
La guerra ha terminado y todo parece ir mínimamente bien hasta que todo vuelve a derrumbarse para Adhara hasta el punto que intercambiaría su existencia por solucionar todo lo que hab...
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Una vez más terminada la lectura, los murmullos se oyeron por todo el comedor.
¿Por qué estaban esos cuatro tan interesados en Harry?
─ ¿Hasta cuando seguirá durmiendo? ─preguntó un estudiante viendo a la joven aún dormida en los brazos del azabache.
─ Se despertará en unos minutos, si no lo hará mañana ─contestó Deimos reacomodando a Adhara entre sus brazos.
Lord Slytherin desvió la mirada molesto mientras su versión más joven veía la escena con el ceño fruncido. ¿Desde cuándo compartía lo que era suyo? Este comportamiento de su yo adulto era extraño y no lo llegaba a comprender, aunque tampoco entendía como tenía una pareja en el futuro. Él no tenía un alma gemela, eso era lo que figuraba en su prueba de herencia de Gringotts.
Debía hablar con su yo del futuro en cuanto hubiera algún descanso.
Cabe aclarar que ninguno que conociera la actitud posesiva de Lord Gaunt o Lord Slytherin, podía creer que estuviera tan tranquilo mientras su pareja estaba en los brazos de otro hombre. Al lado suyo.
─ ¿Podría leer el siguiente capítulo? ─pidió el menor de la familia Black, Regulus Arcturus Black, con timidez antes de que Deimos preguntara una vez más quién quería leer mientras los murmullos comenzaban a cesar.
─ Por supuesto, heredero Black ─asintió Deimos pasándole el libro que se encontraba entre las manos del joven Lupin.
Regulus Arcturus Black era el heredero actual de la Ancestral y Noble Casa Black por motivos desconocidos al público, pero se rumoreaba que la causa era porque su hermano, Sirius Orión Black, había sido expulsado de dicha casa y, por tanto, desheredado. Por ende, al ser el segundo en línea, el título de heredero pasaba a él.
Claro que no había forma de verificar estos rumores sin una declaración del actual Lord de la Ancestral y Noble Casa Black, por lo que eran simplemente eso. Rumores.
Rumores que todo el mundo daba por verdaderos.
Regulus aclaró su garganta mientras veía las letras parecer en las páginas en blanco antes de comenzar a leer con suavidad.
─ Capítulo tres: Pergaminos de sangre.
─ ¿Pergaminos de sangre? ─comentaron muchos confusos.
Lord Sasaki solo soltó una risita sabiendo lo que eran, después de todo, su querido amigo también llamaba así a las pruebas de herencia.
─ Son las pruebas de herencia ─aclaró para los demás.
─ 1 de abril de 1991, meses antes del incidente del vidrio en el zoológico causado por Harry Potter ─continuó la lectura el joven Black─. Dos niños y una niña se despertaron por el continúo golpeteo en la ventana de sus habitaciones.
