-Entonces, otra vez pa, ¿por qué viene Shisui y no mi Itachi? -el Uchiha tenía un aura negra, era como la quinta vez que el pequeño preguntaba -cariño, tu prometido tiene bastante trabajo, ya logró que los aceptaran, alguien debía quedarse en mi puesto mientras regreso -el pequeño levantó un puchero -Shisui pudo hacerlo o el vago de Kakashi -Minato sonrió con una gota en la nuca, el aura de Shisui cada vez se veía más derrotada -es tu cuñado cariño, estás a punto de destruir su autoestima -El pequeño lo vio con reproche y un puchero más marcado -no seas dramático ttebayo, yo sólo tenía dudas -el azabache asintió -acepta que aún no me perdonas por apoyar a Izumi al inicio -el pequeño afiló su mirada volviéndose gris -nada de eso -el comandante quería regresar -me pasas un paquete de dangos, Itachi los guardó en el pergamino que te dio antes de salir -Shisui asintió, sacó un paquete -creí que eran documentos -Minato negó con una sonrisa -son los dulces de Naru para sus antojos -el azabache volteó sus ojos -Itachi te mima demasiado -ambos rubios negaron -no lo suficiente ttebayo -Minato sonrió divertido -les agradecemos mucho esto Naru -el azabache sonrió al pequeño al darse cuenta de su gran corazón -eres algo increíble, ¿sabes? -el pequeño sonrió algo avergonzado -nada de eso, soy egoísta, quiero un hermanito -Minato negó divertido, su hijo era muy humilde.
Naruto usaba un sello para ocultar su estómago y el chakra de los bijus, no quería más problemas, aprendió que esos sellos le abrieron el mundo en muchos sentidos, un mes antes Itachi había levantado una barrera de amaterasu en el área de los Zetsus de los que habló Naruto, eran demasiados, el fuego había ardido por cinco días consumiendo a cada uno de ellos, el fuego se expandió por todos desapareciendo todo a su paso junto al árbol en su interior.
Las puertas del salón de la cumbre kage en el país del hierro se abrieron, sólo faltaban ellos, el Tsuchikage vio al rubio kage con recelo, A sonrió a su rival, Gaara saludo con respeto a su aliado, Mei lo revisaba con morbo, Naruto la vio con cuidado "bastarda" -ambos acompañantes traían su uniforme anbu, sin sus máscaras por protocolo para la cumbre.
-Hokage-dono, sólo faltaba usted -el rubio sonrió amable a Mifune -ya estamos aquí -Minato tomó asiento, sus guardias subieron al palco, Naruto levantó su mirada para ver a un rubio insistente, sonrió al ubicar que era un sensor, el pequeño negó con diversión, después saludó con una sonrisa a Gaara y a sus hermanos -nos enteramos hace unas semanas que atacaron Konoha, al parecer fue algo importante -el rubio kage- levantó una ceja ante A, asintió -así es, sólo algunos salieron lastimados, no hubo bajas, Akatsuki quiso llevarse a nuestro jinchuriki, pero le fue imposible, sus líderes en persona fueron por el, no sé si sentirme honrado, lástima por ellos, uno está muerto y el otro en la cárcel sin red de chakra -la mirada de sorpresa de los kages al rubio era evidente -eso es imposible, esos bastardos tenían demasiado poder, se llevaron a varios jinchurikis, incluyendo a Nibi y a los bijus de la Roca, Bee eliminó a Kisame Hoshigaki con dificultad -Mei asintió -también sanbi desapareció, lo teníamos ubicado en una laguna y ya no se encuentra, Rokubi también fue extraído, perdimos contacto con Utakata, era un poderoso shinobi -el Hokage sonrió con soberbia en su interior -no dudo de su poder, el primer sujeto que nos atacó tenía el rinnegan -un frío recorrió a los presentes -casi destruye nuestra aldea con un solo ataque, gracias a Kami, nuestro jinchuriki se dio cuenta a tiempo y levantó una barrera, fue muy difícil eliminarlo, ni siquiera pensamos en atraparlo, simplemente lo destruimos, pero antes de eso invocó a un ser que nunca creí que pudiera existir, al juubi, al bijuu de diez colas -un silencio cubrió la sala -no nos quedó otra opción más que sellarlo-
El anciano se levantó -¿crees que somos estúpidos?, eso no existe ¿dónde están nuestros bijus? -Minato levantó una ceja con falso desconcierto, negó -nunca los usaron, deberían empezar a buscarlos antes de qué organizaciones criminales se hagan con ellos, deben tenerlos en su guarida aún -el anciano no creía ni una sola palabra, levantó su mirada, afiló sus ojos al ver al pequeño -¿cómo es posible que tu jinchuriki no tenga daño alguno? -el pequeño rascó su oreja con el dedo meñique, los kages lo veían con cuidado -porque tengo un bijuu que me quiere ttebayo -otro silencio cubrió la sala, Minato sonrió ante su desfachatez.
A giró su mirada a "C" este negó con frustración, no podía sentir su chakra, el gigante apretó sus puños -¿entonces debemos creer que no sabes nada de los bijus?, ¿así por tu palabra únicamente? -el Hokage respiró con cansancio -¿qué es en verdad lo que buscan?, no los tenemos, no soy estúpido, deben tener espías en mi aldea, ya debieron informarles que las bestias nunca se presentaron, lo único que vimos fue al juubi, el lugar donde se selló no es accesible para nadie, ni siquiera para nosotros -los kages lo veían con cuidado, dos de ellos no confiaban -¿tienes una deuda conmigo y ahora osas querer verme la cara? -el rubio kage- afiló su mirada, sus ojos se hicieron grises y fríos, causando un escalofrío en los presentes -no existe tal deuda Oonoki, no comiences un conflicto si sabes lo que te conviene -el anciano se elevó sobre la mesa con una mirada de odio, colocó sus manos en un sello.
Shisui de inmediato brincó frente a su kage con el rostro del susanoo para cubrirlo. Naruto bajó del palco con cuidado, mientras caminaba su cuerpo adquirió un chakra dorado, sus ojos un sombreado naranja y algo que no se había mostrado antes, un grupo de magatamas a su espalda, su vestimenta era distinta, el aire en la sala se hizo bastante pesado, los guardias cayeron al suelo sin poder levantarse, los kages sentían la presión con bastante fuerza, veían al pequeño con terror por tal muestra de poder, el jinchuriki comenzó a elevarse del suelo -no se atreva a amenazar a mi padre -Minato no se movía, su mirada era fría al igual que la de su hijo, no estaban jugando, Kurotsuchi la nieta del Tsuchikage y Akatsuchi con dificultad brincaron del palco, pero Naruto con dos cadenas los sostuvo, no podían moverse.
El anciano lo veía desafiante, aunque era claro que su poder no tenía comparación, la cabeza del zorro apareció alrededor del pequeño causando terror a los presentes -anciano decrépito, ¿quieres saber qué sucedió con mis hermanos? -los de Konoha fingieron desconcierto, el resto lo vieron con sorpresa -estaban dentro del cascarón, dentro de juubi, ahora mismo están sellados y no podrán regresar, todo es culpa del egoísmo humano, tú, Madara, Hashirama, todos ustedes son la misma mierda egoísta, con sus acciones crean a estos criminales, Madara, Nagato, Obito, los hermanos Oro y muchos más que buscan poder egoístamente, poder para superarse unos a otros, deja de joder con mis hermanos, no te pertenecen, no eres nadie para querer controlarlos. El cachorro es buena gente, pero recuerda esto, yo soy una masa de odio -la cabeza con la mirada afilada desapareció con una clara amenaza, la piel del anciano sintió el peso de esa frase.
El hokage lamió sus labios con ansiedad, esperando Oonoki cediera y se creyeran esa historia. Mifune habló -al parecer los bijus también están sellados -la mayoría asintió, el anciano con el ceño marcado tomó su lugar, el rubio pequeño giró para ver a su padre, este asintió, las cadenas soltaron a los guardias, bajó al suelo donde la transformación se perdió -Shisui me das otro paquete de dangos, aún tengo hambre -el Uchiha sonrió, deshizo el susanoo, le entregó otro paquete de dulces, ambos regresaron al palco ante la mirada atenta de los presentes -al parecer tus guardias no son un juego -Minato negó con una sonrisa -gracias a kami tengo guardias eficientes y poderosos, con tantos enemigos y el precio por mi cabeza, era evidente que mis guardias deberían estar como mínimo a mi nivel -estaba claro que ambos eran poderosos shinobis que rebasaban el nivel kage -¿podemos saber dónde los sellaste? -Minato negó -yo no los sellé, el shinobi que lo hizo es mi principal susesor para Hokage, aunque tengo varios-
Naruto sonrió feliz, su Itachi podía ser Hokage -deberías ponerte a entrenar Shisui, ttebayo -el Uchiha lo vio con un aura negativa -por favor, es su yernito, esto está vendido -Minato giró su rostro un poco, afiló su mirada al Uchiha, este se enderezó y tragó pesado, el pequeño rio con bastante descaro -alguien redoblará guardias definitivamente ttebayo -el pequeño veía el mundo arder con un dango en su boca -su espada es especial, es un arma sagrada, todo lo que sella lo manda a un limbo del que nunca saldrá, lo lamento, no encontramos otra solución en el calor de la batalla, no era como que pudiéramos atraparlo vivo e investigarlo, era demasiado poderoso -todos asintieron -ya que estamos aquí, A me gustaría ofrecerte una alianza de paz, como la que tengo con Suna -Gaara sonrió asintiendo, Minato había hablado con el días antes, estaba de acuerdo -Mei-san, igual la oferta es para usted y para quien quiera unirse -el anciano se levantó -tch no tengo más que hacer aquí, me largo -el anciano salió, el rubio negó con pesar -me interesa, dime tu oferta -el Hokage sonrió a A -a mi también me interesa, cuenten conmigo Hokage-dono -Mifune asintió -una alianza de paz no suena mal -la cumbre giro en base al acuerdo de paz.
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Mi acosador (Itanaru)
Romance-desde que llegaste a la aldea te he estado observando... -Naruto abrió sus grandes gemas con sorpresa, cuando reaccionó y recordó al cuervo se levantó para golpear al mayor... -desgraciado pervertido, eras tú...