Estrellas - Creek

★Dime, ¿Cuándo fue?★

Tweek estaba sentado en la mesa de su cocina, con un cigarro y un vaso de ginebra en su mano, temblaba por la elección tan precipitada que hizo al llamar a Craig, pero necesitaba aclarar su mente y averiguar todo lo que había pasado. Si no lo conseguía, el vacío que sentía en el pecho probablemente no lo abandonaría.

Ahora Tucker estaba en camino a su casa, no le dio una explicación del por qué lo necesitaba, tan sólo lo citó allá para lo que suponía Craig, hablar.

Y no estaba equivocado, era el plan principal de Tweek. Aunque el rubio recientemente se dio cuenta de la peor forma de su poco control cuando se trataba del pelinegro.. En tan poco tiempo lo había cautivado, puede que fuera porque estaba arrepentido o quería enmendar y pedir perdón de sus errores del pasado, lo dudaba..

Simplemente ahora creía que las palabras de Bebe le hicieron reflexionar.

El timbre resonó por toda la casa, poniendo en alerta a Tweek, sabía quién se encontraba allí, de cierta forma se arrepentía un poco de haber tomado una decisión tan precipitada, necesitaba respuestas y puede que no fuera el momento oportuno pues sentía un miedo inexplicable al estar tan cerca de la verdad que se escondía de él desde hacían años. Apagó el cigarro luego de darle una larga calada y tragó todo lo que quedaba en su vaso en seco. Procedió a ir a abrir la puerta, encontrando esos ojos vedes y la cabellera oscura que tanto conocía y amó en un pasado no tan lejano.

El pelinegro entró en el lugar, llenando sus fosas nasales con el olor de Tweek impregnado en la casa. Sintió la mano de Tweak rodear la suya y guiarlo hasta una pequeña sala al parecer el salón de la casa, y allí había un ventanal que tenía vistas hacia la ciudad, algo que le pareció hermoso a Craig, tanto como el rubio. El sol estaba bajando y al igual la luz iba yéndose poco a poco.

Ahora, ambos yacían uno frente del otro, sin hablar. Sólo conectando sus miradas de vez en cuando, era una situación incómoda para los dos, aunque ninguno deseaba que la compañía del otro se esfumara en ese momento.

-¿Te has enamorado de alguien en todo este tiempo?- la pregunta hecha por el rubio fue inesperada por su compañero. El cual necesitó un para de segundos para responder. ¿Tendría que decir que sí..? Llevaba todo ese tiempo enamorado de Tweek, así que no, probablemente no se enamoró de otra persona, nunca olvidó al rubio.

-No.. No he conseguido enamorarme de otra persona..- dijo secamente, esperando que Tweek entendiera que se refería a él.

-¿Otra persona?- El rubio preguntó, lo dijo firme aunque dentro de él sintió una punzada y ganas de llorar. ¿Acaso antes ya de por sí había otra persona? Pensó temiendo la respuesta.

-¿Qué..? Creí que lo sabías.. Tweek, esa.. esa persona eres tú.- Acabó si frase lentamente, como arrepintiéndose un poco de decirlo. Por la cara del rubio supo que no esperaba aquello. -¿No era obvio acaso..? Llevo enamorado de ti desde que nos conocimos.. sabes que lo di todo por ti y sigo queriendo hacerlo..-

-¿Y por qué lo hiciste?- trataba de mantener la compostura, pero un nudo se estaba formando en su garganta provocándole un dolor allí haciéndolo incapaz de articular bien una frase completa. -Craig.. quiero perdonarte, entender todo aquello que hiciste.. y necesito que me digas, ¿Qué pasó esa noche..?- Craig apartó la mirada por unos segundos, pensando las palabras indicadas para comenzar su relato y poder aclarar todo para Tweek, había llegado el momento de hablar y el rubio necesitaba las respuestas. Si eso incluía su perdón, lo contaría con todos los detalles si lo pedía con tal de dejar de dañar a Tweak.

-Dime, ¿Cuándo fue?- hizo una pequeña pausa, no esperaba respuesta del rubio -Hace dos años, casi tres, supongo.. Teníamos veintitrés y veintiún años y.. Bueno, pensaba que era buena idea... Pedirte matrimonio,-paró de golpe. La cara de Tweek no tenía precio, estaba en un estado en el que no sabía qué sentía o qué debía decir u hacer. Pero no planeaba decir nada y dejó al pelinegro continuar. -Fui a un bar, para pensar y justo esa noche iba a pedirte que te comprometieras conmigo pero no pudo ser...- el rubio casi estaba a punto de llorar por la impresión, se acercó a Craig un poco más, ahora estaba a su lado y agarró su mano, apretándola.

-No sé si quiero seguir escuchando esto..-

-Tweek, necesito que lo sepas.. ya has pasado demasiado tiempo sin saber qué ha pasado..- El rubio calló, diciendo en un susurro que continuara su relato. - Allí, en la barra había un chico rubio, cerca de mí.. empezó a invitarme a copas, me lo tomé como un amigo y me siento estúpido por... Por haber sido tan inocente en ese momento, creí que sólo quería un amigo con el que beber.. Las horas pasaban y continuábamos bebiendo más y más, cada vez perdía más el sentido y él me escuchaba hablar, me sentía cómodo.. llegó un momento en el que no puedo recordar nada, sólo cuando me desperté en su casa y tenía muchas llamadas tuyas.. quise irme en ese momento y llegué a casa cuanto antes.- terminó.

-No.. ¿No recuerdas lo que siguió luego de que te embriagaras?- preguntó el rubio. Craig apretó su mano y acercó su mano a la cara pálida del rubio para acariciarla.

-Cariño, de verdad quieres saberlo.. ¿O no? - El rubio lo pensó por un momento, rectificó. Con su mano libre secó sus lágrimas. Miró los ojos del pelinegro, esos ojos verdes se le hacían tan bonitos ahora. Continuaba pensando qué debía hacer ahora con Craig, era obvio que quería perdonarlo y quizás, sólo quizás intentarlo de nuevo con él. Aunque continuaba teniendo sus dudas de si era lo correcto o no hacerlo. En todo caso, no quería ser precipitado con sus decisiones ahora que estaba algo sensible, pensaría cuando estuviera más tranquilo la opción correcta a tomar.

-Tweek..- El mismo apartó la mano del pelinegro de su cara, para posar las suyas en la nuca de éste y robarle un pequeño beso.

De aquel inocente beso pasó a otro más prolongado y sucio. Poco después ambos devoraban la boca del otro como si fuera la última vez que lo podrían hacer, aunque no era así. Cada vez se sentía el ambiente más caliente al igual que ambos chicos se sentían así. Los roces se convertían en toques que ardían por la situación, Tweek había tenido un poco de sus respuestas, no todas pues necesitaba saber mucho más sobre qué pasó con Craig todo ese tiempo..
Pero ahora no lo veía necesario, sólo disfrutaba del contacto con su exnovio y el sentir que de nuevo era amado por alguien de verdad..

Horas después, ambos se encontraban en la cama del rubio, ya era casi media noche, todo estaría oscuro sino fuera por toda la luz que entraba de edificios próximos al del rubio y su manía a la oscuridad de la noche, no soportaba ese negro profundo que aparecía en la noche, se sentía melancólico por alguna razón con tanta oscuridad.
Tweek estaba apoyado en el pecho de Craig, moviendo sus dedos por todo el torso de este, estaban exhaustos, lo habían hecho muchas veces ese día. No era nada significativo y ni siquiera sabía qué iba a pasar a partir de allí, era obvio para los dos que ambos sentían algo por el otro, por una parte estaba bien aquello. Lo bien que se sentía enamorarse o simplemente, darse cuenta de que sigues enamorado de la misma persona desde hacen años y que sea correspondido.

Aunque también por ambas partes había cosas malas; de parte de Craig: Thomas y sus celos.
Y de Tweek: su trabajo.

Tweek disfrutaba su trabajo, le gustaba sentirse deseado por muchos, lo descubrió en el momento que comenzó a grabar, pero ahora la situación cambiaba, sería incómodo si volvía a ser pareja de Craig y ambos tuvieran que estar en el mismo lugar de trabajo, Tweek en acción con otras personas y Craig grabándolo todo. Se planteó por un momento dejar el trabajo, pero fue momentánea la idea, su suministro económico venía de allí...

Ahora, Craig y Thomas..
Era algo complicado todo aquello, el amor odio que Craig sentía hacia el chico con tourette por todo el tiempo que pasaron juntos. Y no era estúpido, sabía y conocía los hábitos controladores de Thomas hacia él, quería hacerlo suyo, como un esclavo o algo así.. pero el pelinegro siempre fue indomable, no cambiaría eso ahora.

Tweek miró a Craig, tenía los ojos cerrados y parecía dormitar, sintió calor en sus mejillas y alcanzó a darle un dulce beso en los labios a modo de buenas noches. Se acurrucó un poco más, disfrutando el calor corporal que ambos emanaban, sintiendo un profundo sueño, acabando por dormirse en el torso del pelinegro escuchando los latidos de su corazón y su relajada respiración.

-Craig.. No puedo odiarte..- sus palabras finales. Estaba seguro, había comprobado que seguía enamorado del pelinegro.. y le encantaba estarlo...

...

Holamm

Para el domingo tendré el siguiente capítulo, este era dedicado a Tweek y Craig sólo, para no marear la trama demasiado. Ya en el siguiente van a aparecer más de los personajes.
El capítulo es un poco corto, pero no puedo escribir en el portátil y sólo puedo en mi móvil, bueno esta es mi aportación. Probablemente tenga fallos ortográficos por el autocorrector but idk.

At. daniella