C U A T R O

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Daryl me ayudo a bajar de su moto, lo cual me sorprendió, sinceramente más allá que no lo conozco mucho, no esperaba este acto.

Le agradecí por eso, y luego desate el nudo de su campera y se lo di despacio, pero niega.


-Más tarde refresca, lo necesitaras. –Contesto mientras prendía un cigarro.

-Gracias, entonces.

-Eso de las dos de la tarde estaré en esta misma esquina, y volveremos a la cabaña. –Exhalo el humo por la nariz y un poco por la boca.

-Okey, gracias nuevamente. –Respondí.

-Escuche lo que hablaron con Rosita. –Levante la vista asombrada. –Y no aceptare como un no a esa salida, a menos que quieras que hable y cuente todo a Nicholas. –Le dio una calada al cigarro.


¿Se está invitando solo?


-Era una conversación privada y un favor nada más para mí, no te incumbe. –Escupí.

-Es una puta cabaña, lo cual vivimos todos y me incluyo.


Revolee los ojos y decidí irme sacando un suspiro.


~*~


Las entrevistas que había presentado para anotarme para trabajar, no fue muy buena que digamos, debido a mí poca experiencia laboral nadie me dio la oportunidad, y yo tengo problema con los nervios. Vivo nerviosa, mi cuerpo completo es un estúpido de nervios que lo que hace es hacerme más débil, tiemblo y eso tal vez no es buena señal para el contratista. Me maldigo para mí misma con eso.

En todo me decían que me estarían llamando, pero sé que eso no es así, de hecho me auto-digo que no tendré suerte y tendré que trabajar con Nicholas cosa que no quiero, porque quiero ganarme económicamente bien sin plata de alguien, ya me dio una casa para vivir gratis.

Rezongando, paso por una tienda de ropa interior, donde en un cartel decía que buscaban personas con/sin experiencia, lo cual lo veía como algo de esperanza pero era uno o dos por ciento.

Saque un suspiro ultima vez, rezando que sea la última del día y así salir feliz con un trabajo ya en manos.

Me pare derecha ya preparada y me acerque a la cajera con una pequeña sonrisa, me atiende con mucha simpatía y me gusto su manera de atenderme.


-Vi el letrero de que buscaban chicas con o sin experiencia. –Sonreí un poco.

-Oh claro. –Asintió. –Estamos buscando chicas, ¿quieres anotarte? –Asentí sonriendo y me acerque a llenar mis datos. –Luego me lo entregas, y al final del pasillo, te llamaran para una entrevista.

-Muchas gracias. –Sonreí más y la chica me devolvió la sonrisa y siguió cobrando a los clientes por las compras.


Luego de entregar mis datos, espere ser llamada.


~*~


Salí con una gran sonrisa, feliz de haber conseguido un trabajo. No dejaba de saltar de la emoción y me iba caminando tranquila hacia aquella esquina donde Daryl me iba a esperar, faltaban diez minutos para las dos de la tarde.

Love Me Like You Do  | Daryl Dixon | (18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora