21

135 12 5
                                    





1 mes ha pasado desde mi propuesta, 1 mes en el que sigo desempleada, 1 mes en el que hemos estado preparando la boda, pues Leidy también quiere que sea antes de que nazca nuestro bebé.

Encontramos otra escuela para Aly, a la cuál se ha adaptado muy bien, se vé contenta con el ambiente y eso me hace feliz porque cambiarla fué una decisión sólo de Leidy y mía, dejando su amigos y todo atrás.

Por otra lado Leidy cuenta con 9 semanas de embarazo, dentro de unos días tendremos la consulta y estoy ansiosa porque su vientre ya está muy abultado, pero sin importar eso se vé preciosa. Ella sigue trabajando en la recepción del despacho y aunque sé que no está contenta con eso sigue porque yo aún no encuentro trabajo y eso me está desesperando mucho. Tengo ahorros y aún conservo lo que mis padres me dejaron, pero ella insiste que todavía no lo vá a dejar a pesar de que no está nada feliz en ese lugar.

Con respecto a mí sigo sin encontrar un puesto en algún colegio y eso me desanima porque ya llevo 2 meses sin trabajar y eso me hace sentir inútil.

¡Ely!. — Alex no ha dejado de darme ánimos para seguir buscando, pero tal vez lo mejor será buscar trabajo de otra cosa. — ¡Te conseguí trabajo!. — gritó tan fuerte que tuve que alejar el celular de mi oído.

— ¿Qué?. — pregunté levantándome de la silla. — ¿Hablas en serio Alexander?.

Si sólo que no tiene nada que ver con niños. — dijo ya sin gritarme.

— ¿Entonces?.

Ayer por la noche me sentía con ganas de tomar unos tragos, entonces salí al bar de siempre, pero por alguna extraña razón estaba cerrado. — siempre me tenía que dar un contexto previo a decir lo verdaderamente importante. —Fuí a uno que estaba a unas cuadras al que una vez nos sacaron por provocar una pelea ¿lo recuerdas?.

— Si lo recuerdo perfectamente porque fuiste tú quién provocó la pelea al intentar ligar con una chica que estaba con un tipo que era el doble de grande y fuerte que nosotros.

Bueno entré y gracias a los dioses no me reconocieron. Pedí un trago y todo marchaba bien hasta que tuve que ir al baño y había un letrero que decía que estaban contratando bailarinas. éste hombre está loco si es lo que ya estoy pensando. — Salí del baño para regresar a la barra dónde pedí informes sobre los requisitos que necesitaba la bailarina, me los dieron y les dije que ya tenía a la perfecta. Te tienes que presentar mañana a las ocho.

— ¿Estas loco?. — pregunté sorprendida por su estúpido relato. — ¿Cómo se te ocurre que voy a trabajar de bailarina en un bar? Si Leidy se entera me saca de los pelos de ese lugar y seguro me deja sin más descendientes.

¿Puedes abrir la puerta y te explico mejor?. — primero juega conmigo por celular y ahora resulta que está afuera de la casa. Me levanté con cara de querer golpear su lindo rostro por tan estúpida idea. — Gracias ¿esta Aly en casa?.

— No, hoy fué su primer entrenamiento en el equipo de fútbol. — cuándo le dije a Aly que podía empezar a entrenar y jugar fútbol con más niñas de su edad se puso muy feliz y no me soltó hasta que la dejé dormida en su cama.

— Me alegro es muy buena y le gusta. — dijo sentándose en un sofá.

— ¿Quieres algo de tomar?. — pregunté por cortesía porque en realidad no le quería dar nada.

— ¿Tienes vino?. — asentí y fuí por el. — Gracias. — le dió un sorbo disfrutando el sabor, era un buen vino ya que el poco alcohol que hay en ésta casa es mío ya que Leidy no toma y ahora que está embarazada menos. — Es bueno.

La Mamá De Mi Alumna // Adaptación LeidelyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora