Naruto abrió sus gemas con molestia, la luz del día lastimaba sus retinas, abrió sus ojos de golpe al no sentir a su azabache, giró su cuerpo, no había nada, tapó sus ojos con su brazo -que bueno que despiertas -el pequeño se sentó de golpe al ver a su abuela en la silla junto a la camilla -¿a quién buscabas? -el rubio negó con algo de decepción -nada, ¿qué sucede abuela? -la rubia cruzó sus brazos y una pierna sobre la otra -me han contado un poco sobre tus desvaríos este último año, tu club de fans y un grupo de amigas están afuera del hospital queriendo saber de ti -la mirada de la rubia se afiló, el Uzumaki tragó pesado -ya… ya abandoné eso abuela, te lo prometo -la rubia endureció el ceño -no por gusto, sino por la estúpida Hyuga -el rubio haría sufrir a su sensei y a Sakura por chismosos, eso era un hecho -pe… pero ya lo dejé, ya hablé con ellas abuela -la rubia mordió su mejilla -te creo, aún así te golpearé cuando estés bien -el pequeño se puso pálido -¿puedo saber el motivo real por el que abandonas tus estupideces? -el pequeño se sonrojó bastante, giró su rostro, la rubia sonrió -¿tal vez tiene que ver con el azabache que durmió contigo por la noche? -Naruto se puso aún más rojo -bu… bueno, sí, tal vez-
-Tsunade negó con una ligera sonrisa -está aprobado, me agrada, ayudó a salvar tu vida, siempre le estaré agradecida, además, al parecer es un buen centinela para ti -el rubio sonrió feliz, sus ojos brillaban llenos de emoción -gracias abuela, es importante para mí -la ex Hokage negó con diversión -no te engañes, no sólo es importante, pero bueno, veamos cómo se desarrolla esto -Naruto sonrió quedito -hay otro tema importante del que debemos hablar, ayer Sakura y yo nos dimos cuenta que algo está sucediendo con tu organismo -el rubio giró su rostro sin entender.
La puerta se abrió dejando pasar a Sakura con un aparato -Naruto me da gusto verte despierto y sano, después te golpearé por asustarme -el rubio tenía una gota cayendo por su nuca, la chica conectó el ultrasonido -ayer mientras cerraba la herida sentí que algo había de más en tu abdomen bajo, al inicio creí que era un tumor, estuve a punto de sugerir su extracción, pero con la herida no hubo tiempo -el rubio se puso nervioso -cuando salimos de aquí, ambas teníamos la misma duda, la verdad es que venimos a revisar, exactamente ¿qué es? a mi forma de ver parece una matriz, pero eso es imposible, eres hombre, así que revisaremos qué sucede -Naruto asintió con duda a su abuela, estaba nervioso, no tenía ganas de armar una escena.
La pelirrosa pasó el aparato por su abdomen bajo, revisando cuidadosamente el lugar, ambas mujeres veían la pantalla con cuidado, a momentos sus ojos giraban para hacerse preguntas mudas, ambas continuaban. La ex hokage talló su rostro con frustración y duda, Sakura sacó una muestra de sangre de la intravenosa en el brazo del rubio -ahora vengo lady Tsunade -la rubia asintió, tomó el aparato y continuó revisando minuciosamente, anotando medidas y características en silencio -¿qué -la rubia levantó su mano callando al rubio que quería preguntar, casi una hora pasó cuando Sakura regresó con velocidad, abrió la puerta, entregó el estudio a la rubia -es una maldita broma todo esto, demonios -
Sakura tragó pesado -estaba generando en grandes cantidades estrógeno para terminar de formarla, no sólo es eso Tsunade-sama- la rubia apretó el ceño -¿no sólo es eso? -la rubia levantó el papel leyendo el resultado, se giró con velocidad buscando algo en la pantalla, movía el aparato en el centro del vientre bajo buscando cuidadosamente -¿cómo es que?, con el ataque de ayer debió parar, aunque… -Sakura asintió -estaba encapsulado con chakra, por eso no me di cuenta de su existencia-
Tsunade giró su vista hacia el rubio quién tenía sus ojos demasiado abiertos, tenía miedo, no entendía una mierda de lo que hablaban -tenemos un, bueno, no sé si llamarlo problema, depende cómo lo veas -Naruto esperaba que hablarán, pero era claro que no sabían cómo decírselo -¿voy a morir? -Tsunade negó -no digas estupideces, es mucho más complicado, no sé porqué demonios, ni porqué, pero tienes matriz -Naruto abrió sus ojos demasiado, un terror comenzó a llenar su cuerpo, negó con desesperación -es una broma ¿verdad?, soy un maldito hombre -las médicos entendían su angustia -si fuera sólo la matriz no habría problema, hay un óvulo, está fecundado -el rubio negó sin entender -estás embarazado -
Naruto giró su mirada al punto que marcaba el ultrasonido, comenzó a temblar -ku ku kuramaaaaaaaa kuramaaaaaaaa ¿qué demonios? -el pequeño se puso histérico, entró en crisis -no lo sé cachorro, igual que tú me acabo de enterar, había sentido un ligero cambio, pero no le di importancia, no sé qué sucede -el rubio temblaba, se sentó de golpe -a… abu abuela, ni siquiera sé si me quiere, no sé nada, no es mi pareja ¿qu… qué demonios? -la rubia lo abrazó con fuerza, ninguna había visto en la pantalla al bebé por buscarle sentido a la matriz, revisando su formación, estaban impactadas al darse cuenta -tú lo quieres ¿no es así? -el rubio lloraba asustado, asintió con un puchero en sus labios -es un buen chico, no te dejará sólo, estoy segura que se hará responsable-
Naruto limpió sus lágrimas pensando en sus palabras, negó nervioso, no sabía qué pensar, Tsuande lo soltó para verlo -no… no quiero a nadie a mi lado por obligación, no… no… yo yo me juré no obligar a nadie a amarme, no le digan, tienen prohibido decirlo -se levantó de su cama, salió corriendo por la ventana, sin importar que estaba en bata -está asustado -Sakura asintió -¿qué debemos hacer lady Tsunade? Itachi-san debe saber -la rubia negó -es decisión de Naruto, hay que darle su espacio-
....
Naruto entró en su departamento, colocó una barrera en él para que nadie entrara, se metió en su cama haciéndose bolitas, se cubrió con su manta, comenzó a llorar desesperado, se sentía un maldito fenómeno, una vez más se sentía anormal, comenzó a imaginar nuevamente el rechazo de la gente, temblaba con terror, negó, no pensaba con claridad, tal vez lo mejor era huir, no podría aceptar una vez más el rechazo de la aldea, no ahora que había logrado tanto, se levantó, comenzó a guardar su ropa en pergaminos, su comida y su dinero -cachorro, no hagas estupideces, en tu estado si los otsutsuki te encuentran, estás muerto -el rubio se detuvo de golpe -en… entonces ¿qué demonios debo hacer?, dime ¿qué demonios hago? -
El zorro lo obligó a entrar en su espacio mental, jaló de él con sus colas, lo apretó a su cuerpo y comenzó a acariciar su espalda -cálmate cachorro, en ese estado en el que estás, harás puras estupideces, has madurado lo suficiente para saber que complicarás tu vida si huyes, esos sujetos te están cazando, coloca una barrera de chakra para que no te sientan, tienes pergaminos con demasiada comida, no necesitas salir por un tiempo, date este espacio para pensar y hacer las cosas bien, sólo quiero que sepas algo importante -el rubio asintió relajándose -no sólo es tu hijo, también es del Uchiha y tiene derecho a saber, no puedes negarle la oportunidad de estar a su lado si él quiere estarlo, es un buen cachorro y lo sabes -el Uzumaki se aferró a su pelaje con fuerza pensando en sus palabras.
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Probando algo nuevo (Itanaru)
Romance...recordaba a su Ero-sennin... el amor tan inmenso que tenía por su abuela, tanto que dejó de lado su corazón porque ese le pertenecía a la rubia y se entregó a los placeres del cuerpo, ahogaba sus sentimientos en sus parrandas para sentirse mejor...