-¡Hola Singto!. ¿Cómo estuvo tu graduación? Acabo de salir de una reunión y me estoy preparando para...
-Papá, estuvo bien, pero necesito decirte algo. Necesito un gran favor. Surgió algo muy inesperado, yo... hice algo que le costó el trabajo a alguien. Es un artista demasiado talentoso y quería aplicar en la empresa el año pasado para el puesto de dibujante senior y caricaturista. Yo mismo, respondo por él al cien por ciento. ¡Es un persona súper responsable e ingenioso! ¿Considerarías contratarlo?
Mi padre se quedó en silencio por un rato. -Bueno, en realidad estamos abriendo un nuevo departamento y habrá nuevos puestos disponibles, así que... puede ser una oportunidad para contratar a un nuevo caricaturista. Pero dime primero, ¿qué le hiciste?
Apreté mis párpados.
-Puse en peligro su reputación, o mejor dicho... la destruí frente al decano. Y lo despidieron por eso. Fue estúpido e imprudente, no estaba pensando. Por favor, papá, necesito arreglar esto, ¡Se lo debo!
-Jesús, hijo, ¿por qué harías tal cosa...? Ni siquiera sé que decir. - suspiró. -¿Y ahora quieres que lo corrija...?
-¡Papá! Por favor, te lo juro, seré el mejor empleado que puedas imaginar, compensaré mi estupidez, me arrastraré ante ti de ser necesario ¡por favor, dale una oportunidad, te lo suplico.
Resopló, luego hubo silencio.
-¿Por qué es tan importante, Singto? Por favor, dime la verdad.
Tragué hondo. Mierda. ¿Sentía que le estaba ocultando algo?
¿Era ahora o nunca? ¿Iba a luchar o me rendiría? O profundizar aún más en la red de mentiras interminables. Cerré los ojos y escuché los latidos de mi corazón.-Él es mi novio.
En el momento en que las palabras salieron de mi boca, sentí un extraño poder en mí. Fue como... si en ese segundo, madurara. Sentí una sensación extraña, casi impactante. Me enderecé, tomando la decisión interior, tomaría todo lo que dijera con dignidad.
-¿Es realmente tan bueno en el arte?
Parpadeé. ¿Realmente preguntó solo por eso?
-¡Sí, lo es! Es increíble. Hablaré con él, así que te enviará su currículum (Hoja de Vida, CV)-Está bien. -pude escuchar la resignación en su voz. -Le daré una oportunidad si realmente es bueno, Singto.
-¿No vas a... preguntar nada más? - Todavía no podía creerlo.
-Hijo, confío en que sabes lo que estás haciendo. Te apoyaré pase lo que pase. Quiero creer que te crié bien. Y quiero tu felicidad, ante todo.
-¡Gracias papá! ¡Lo aprecio mucho! Yo... realmente, realmente hago todo lo posible para no fallarte.
-Hijo, lo sé y espero que lo sigas haciendo.
*Esta noche la pasé al límite, con problemas para dormir, dando vueltas de un lado a otro.
Krist no respondió, lo cual fue bastante molesto, pero pude entender el estado de ánimo en el que se encontraba.
Probablemente me odiaba ahora. La situación era culpa mía, por mucho que no quisiera admitirlo, pero esa era la verdad. Mi cortejo infantil le costó su trabajo. No había forma de evitarlo.
Temprano en la mañana me duché y le pedí a mi hermana que me prestara su auto.
No tenía uno propio, ya que vivía en el campus durante los últimos años.
Estuvo de acuerdo solo porque era sábado y no tenía que ir a trabajar. Ella también trabajaba en la empresa de nuestro padre, diseñando sus propias joyas siendo su pequeña empresa unipersonal.
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Cαყҽɳԃσ ҽɳ ʅα ɳιҽʋҽ SK
RomanceLuego de una desilusión amorosa y de citas fallidas, el estudiante universitario Singto Prachaya, decide detenerse en buscar la persona ideal para él. Hasta que se enamora a primera vista de su profesor de Artes, haciendo diversos intentos para que...