☀️Cariño Astral [Sun/Moon]🌙

[Capitulo 20]

(Narradora):

No era de esperarse el que los niñeros se preocuparan por la nana, ya no era momento de pensar en ocultarle cosas, su preocupación estaba enfocada en el bienestar de la niñera.

Es de mañana y como se era de imaginar la luz en el local abundaba, por lo que no es posible que Moon fuera a por ella. Sun tendría que hacerlo.

—Pero no se donde está, ¿Por que debo ir yo?, ¿no podemos buscar algún camino para que vayas tu?, Moon...

(¿No siempre dices que quieres ayudarla?, no es momento de que tengas miedo solecito.)

Aún con miedo Sun supo que debía aceptar, ninguno de los dos sabía que podía haber estado pasando con la nana, pero de lo que estaban seguros era que estaba cerca de las arcades de la zona este.

—Por lo menos tiene con que entretenerse...¿eh?—, (no creo que sea buen momento para tus bromas)

Ambos salieron de la guardería, tienen suerte que no hay ningún guardia del protocolo diurno haciendo vigilancia, solo staffbots. Con algo de suerte podrían llegar hasta ella sin algún problema. Su paso era ligero y el sonido de sus cascabeles era desesperado, a diferencia de Moon, Sun no lograba mantenerse sereno, en cambio, cada vez se alteraba más e iba más rápido.

(Debe ser demasiado conveniente que este lugar no cuente con suficiente personal humano de seguridad), —Al menos... al menos tenemos el lugar mucho mas libre...

A pesar de ser cierto sus comentarios, no pudieron evitar encontrarse un pequeño grupo de guardias. Sun no hacia nada mas que asustarse y ponerse cada vez mas nervioso, no había parado de decir que quedaría grabado como se salía de la guardería. Al ver que una de las guardias se acercaba, se trató de ocultar utilizando las paredes y algunas macetas.

—que va, ¿Qué mas podrían haber hecho?, a la señora nada mas le dieron una tarjeta de regalo con un pequeño descuento en la tienda de regalos...Como siempre.

—es que ya no es nada nuevo que ocurran esas cosas y la verdad ya no se que es peor, que esa sea la disculpa de la empresa, o que la señora lo acepte como si nada.

—pero que se le va a hacer.

—Hey, ¿les puedo preguntar algo?—, interrumpió una chica de cabello castaño. Los demás asintieron. —Ahora que hay una nueva trabajadora, ¿que opinan de ella?.

—¿a que te refieres?—, preguntó el varón frente a ella.

—digo, que, que opinan sobre ella. A mi se me hace otra rarita.

—pues a mi también—, agregó la tercera chica del grupo. —lo único que falta es que se haga amiga de la nana de la guarderia y de la guardia pelopintada que hace turno de noche junto a ella,+ y el grupo de raras estaría completo.

—vamos... ustedes si que no pueden estar un dia sin soltar su veneno, ¿no es asi?.

—No me digas que tu no piensas lo mismo Jhon.

Sin querer los niñeros estaban escuchando una conversación ajena, una conversación que tanto al sol y a la luna les comenzaba a disgustar.

—y entonces, ¿Qué haremos con eso?.

—que podríamos hacer Dani. Solo esperar que la nana esa no ponga al niñero en contra de nosotros, o la guardia... ¿Vanessa?, nos haga algo raro. Eh escuchado que tiene gustos... demasiado raros.

—y que hay de la nana, ¿que has escuchado de ella Sheyla?

—bueno... es algo que a mi me parece loquísimo, algunos de los otros trabajadores dicen que el niño que siempre llega con ella... ¡podría ser su hijo!.