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- no puedo creerlo.
- ¿Que cosa?.
- mi padre dice que mi hijo es más bonito que yo.
- tiene razón, es igual a mi.
- yo creo que no se parece a ninguno de los dos.
- pues viéndolo bien, tienes razón.- dijeron ambos padres mirando a su bebé dormido en la cuna.

- por más que lo veo no sé.
- escuché por ahí que al nacer, los bebés no se parecen a nadie.
- bueno solo tiene un mes casi dos.
- quizá después se note.
- puede ser.
Se quedaron en un silencio, ambos pensando cosas nada que ver con su conversación reciente.

- ¿Que haremos?
- no lo sé, en realidad nunca tuve un plan, jamás me gustó pensar en el futuro, me enfoque mucho pensando y disfrutando el presente.
- no soy tan diferente a ti Hwannie, me crié con mi padre y siempre traté de mantenerlo feliz y orgulloso de mí, creí que siempre viviría y vería solo por él cuando terminara la universidad.
- ¿Jamás pensaste en ti?.
- no, mi padre me cuidó y estuvo siempre pendiente de mí, el jamás pensó en él después de la muerte de mamá, yo era más importante en ese momento así qué, quería devolver todo lo que él había hecho por mí hasta ahora.
- yo, no sabía eso Woo, yo siempre e sido niño de mamá y papá, al ser su único hijo a pesar de mi edad, siempre me he comportado muy infantil, no se si pueda madurar alguna vez.
- creo que es tiempo de pensar que pasará con nosotros tres.
- yo también pienso lo mismo.
La habitación se inundó en un silencio de nuevo.
- primero supongo que debemos terminar la universidad.
- sí, intentaré trabajar más duro para comprar o una casa o al menos alquilar un departamento.
- no pongas tanta carga en tu espalda Hwannie, yo también estoy en esto así que te ayudaré.
- Woo pero el bebé te necesita más a ti que a mí, además no quiero que se quede solo, he oído tantas historias de niñeras y guarderías que tratan mal a los bebés, y de solo pensar en dejar a mi hijo en manos de extraños me da cosa.
- pero quiero ayudar, no es justo para ti, además tengo unos ahorros que podrán ayudarnos un poco.
- bien, pero nada de dejar al bebé solo.- aceptó Junghwan.
- ¿por quién me tomas?, obviamente que el bebé no estará solo, al menos si no estamos nosotros mi papá aceptará cuidarlo cuando tenga tiempo, incluso tus padres también me dijeron que podíamos contar con ellos para eso, aunque obviamente solo será mientras vamos a la universidad.
- está bien, iré buscando un lugar para vivir.
- también yo, igual no falta mucho para que terminemos la universidad, este semestre haré mi pasantía.
- cierto, me había olvidado de la pasantía.
- no te preocupes por eso, son 4 horas diarias el resto podemos usarlas para trabajar o algo.
- está bien, creo que si podremos con esto.
- podemos hacerlo, yo sé que sí.



































































Yoshi debió de haber regresado hace tiempo a Japón, tenía unos pendientes que resolver, su madre había viajado sola a pedido de ella ya que deseaba que su hijo cuidara de su hija, Yoshi aceptó pero estaba preocupado, su padre le había dejado una gran herencia pero la familia de él los odiaba, todo porque su madre no era una persona de su "clase" cuando se casó con su papá, pero, ¿Y eso que?, De igual manera su abuelo había aceptado aquel matrimonio, lo único que le importaba era dejar a su hijo casado y con toda la herencia porque después de todo él alguna vez quiso casarse con el amor de su vida, solo que no contaba que estaba comprometido desde que había nacido teniendo que contraer matrimonio con la hija de uno de los amigos de la familia, aprendió a vivir con eso, pero para su hijo quiso algo diferente, por eso no dijo nada cuando su progenitor presentó a la madre de Yoshi, pero su esposa y la otra parte de su familia no estaba de acuerdo, pese a eso ellos siguieron con su vida, cuando Yoshi nació el único feliz era su abuelo, lástima que convivió muy poco con él, años más tarde su padre había fallecido en un accidente, para ese entonces Yoshi ya tenía 18 años, se mudaron a Corea debido a las peleas con la familia de su padre, los papeles de la herencia estaban a nombre de él, su tutora legal era su madre así que a distancia manejaban las empresas, pero, era tiempo de que Yoshi tomara el mando, más no contó con que tendría una hija tan pronto, pero estaba feliz de tener a su pequeño sol, ahora el problema era que tenía que contarle todo su pasado a Mashiho, y esperaba que lo entendiera, quería ir a Japón y poner las cosas en orden, regresaría a cuidar de su hija y darle todo lo que merecía, no solo a ella, a Mashiho también.


























































































































- Junkyu.
- Qué.
- mis padres quieren que lleve al bebé a casa, también quieren que vayas.
- ¿Cuándo?.
- el fin de semana, es el cumpleaños de mi madre, dijo que le encantaría convivir más con su nieto.
- bien, iremos entonces, solo por qué tu mamá me cae bien.
- ¿Gracias?.- Haruto no terminaba de entender la actitud de Junkyu, o bueno quizá un poco, después de todo sabe que lo insultó algunas veces y muy en el fondo sabe que se lo merece.
- si no es mucha molestia pon toda esta ropa en la lavadora.
- ¿Todo eso ensucia un bebé?.- Haruto quedó sorprendido por el canasto lleno de ropa de bebé.
- sí, así que como buen padre ve y lava su ropa, yo aún tengo que doblar la que está en la cama y arreglar otras cosas.
- bien, ¿Solo meto esto en la lavadora y ya?.
- ¿No sabes usar la lavadora?.
- si y no.
- ahhg, solo metes las ropa y llena la lavadora con agua hasta donde está te indique, colocas el jabón que también tiene una medida y marcas la velocidad y el tiempo, igual todo es de color no es tanta ciencia.
- bien, creo que si puedo.- Haruto se fue con su canasto y Junkyu se quedó con las ganas de darle un sape.



































































- ¿Que se supone que haces?.
- lavando ropa.
- Junkyu va a matarte.
- ¿porque?.
- tu hijo es pequeño pero esto hará que la ropa se encoja.
- ¿Qué?.
- muévete.- Asahi aventó a Haruto hacia un lado, pobre Junkyu se compadecia mucho por él, hizo lo que tenía que hacer y dejo a la lavadora lavar.
- listo, ahora solo espera a que se detenga, se debe de enjuagar y ponerse a secar.
- ¿Y ya?.
- ¿sabes qué?, cuando esto se detenga vas y me preguntas.- Asahi no le tenía mucha paciencia.

Haruto regresó a la cocina por algo para beber, eso de lavar ropa no era para él.

- ¿Has hablado con Junkyu?.
- hoy solo me habló para que fuera a lavar ropa.
- bueno espero que eso salga bien o te irá peor.
- no ayudas Junghwan.
- si quieres que te ayude comienza como al principio.
- ¿Cómo?.
- no sé, solo se tú mismo, antes siempre salían a comprar y compartían todo, ¿Porque no sales y compras cosas que le gusten?.
- ¿Crees que funcione?.
- no pierdes nada con intentarlo.- una tercera voz se hizo presente.
- ¿Seguros?.
- claro, al menos debes intentar de todo para que Junkyu logré volver a confiar en ti.
- estoy de acuerdo, primero debes de recuperar su confianza.- Yoshi apareció.
- bien lo intentaré.- Haruto regresó a revisar la lavadora.
- saldré a comprar unas cosas, ¿Alguno quiere algo?.- preguntó Junghwan.
- no gracias.- respondió Yoshi.
- yo tampoco necesito nada, gracias Hwannie.

Junghwan se marchó y la cocina quedó en silencio de nuevo.

- Mashi, quería hablarte de algo.
- dime.
- y-yo, viajaré a Japón al menos por una semana.
- oh, supongo que está bien.
- quiero que sepas que no estoy huyendo de mis responsabilidades o algo así, yo tengo un pasado que no se lo he contado a nadie.
- no es necesario que me expliques Yoshi, si dices que tienes que ir pues vé, yo cuidare bien de la niña.
- aún así prefiero decirte.

Yoshi le contó todo a Mashiho, este simplemente lo escuchó, sabía que eran problemas de familia y no queria meterse en eso porque después de todo, Yoshi solo era el padre de su hija pero él era libre después de todo, así que no le puso algún pero, simplemente acepto lo que Yoshinori le había dicho.



























































Covicho tocó mi puerta...😑 Pero ya estoy bien...

🍁Embarazado ¿yo? Treasure.🍁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora