El banquillo del parque
Sábado, 11 de marzo. 12:17 p.m.
Bzzzzz - Bzzzz
Desperté de golpe a causa de la vibración de mi celular, el cuál estaba muy cerca de mi rostro, al parecer me llegó un mensaje según ví.
Mensaje de WhatsApp:
Kassia: Buenos días, imbécil. ¡Apuesto a que te desperté!
Dante: La verdad es que sí, estúpida.
*inserte sticker de un gatito enojado*Kassia: ¿Te gustaría ir al parque a criticar a las personas?
Con esa propuesta en juego me fue imposible decir que no.
Un rayo de luz pasaba por en medio de las cortinas entreabiertas, por alguna extraña razón había olvidado cerrarlas anoche pero lo que es más raro aún es que me haya despertado muy apenas por el mensaje y no por toda esa luz chocando contra mi rostro.
Después de que pasaran varios días lloviendo, y con temperaturas muy bajas de por medio, por fin había salido el sol. Me levanté de la cama con prisa intentando no marearme en el acto.
Cuando pude estabilizarme me puse de rodillas con apuro intentando buscar mis zapatillas por debajo de la cama, encontré una allí y luego, visualizé la otra en el otro extremo de la habitación, resultaba ser extraña la sustancia entre ellas, era como si estuvieran divorciadas o algo así.
El mismo día. 1:11 p.m.
Veía mi cabello húmedo gotear a través del espejo empañado del baño, terminé de secar por completo mi cabello, parte por parte, y luego me puse una camiseta cómoda para la ocasión. Bajé con apuro las escaleras y me dirigí al comedor.
—Buenos días mamá— me senté en una de las sillas vacías,— ¿qué tal durmió mi linda y hermosa madre?
De espaldas a mí se encontraba ella, mi mamá, con su pelo rojizo tirado todo hacia un lado con toda su atención centrada a la estufa, terminando lo que parecería ser el almuerzo del día de hoy.
—Vas a salir, ¿verdad?— preguntó.
—E inteligente también— tomé un sorbo de café. —Sí.
—¿Saldrás nuevamente con Kassia? — inquirió.
—En serio, eres lista— mordí un pedazo de mi tostada. —¡Demasiado lista!
—¡No hables con la boca llena!— me golpeó detrás de la nuca. —¿Cómo sigue tu brazo?.
—Un poco mejor, aunque todavía duele — respondí mientras me frotaba la nuca.
—Por cierto Dan, me recuerdas ¿por qué últimamente andan muy juntos si se conocen desde hace un año ya?— preguntó, con una sonrisa acusadora en su rostro.
—No sé a que tipo de "juntos" te refieres pero recuerda que cuando nos conocimos ella había terminado con su novio —mencioné.
—¡Oh! Entonces, ¿eres el siguiente en la lista?— empezó a reír.
—¿¡Qué!? ¡Nooo!— levanté mi rostro en su dirección—. ¿Podrías prestarme dinero?
La pelirroja me miró, dudosa y con una mueca preocupada en su rostro. Era obvio que algo la acomplejaba o cuánto menos le había preocupado.
—Está bien Dan —ella empezó a revisar dentro de sus bolsillos, al poco tiempo encontró dinero y me lo dió.
—Muchas gracias mamá, ya me iba de todas formas— respondí con una sonrisa. —¡Hasta luego Bella!
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Tiny Human Brain #PGP2023
Science FictionEsto es a lo que solemos llamar comúnmente "una historia de amor" o como me gusta llamarlo a mí: una tragicomedia pero también, una historia compleja con un trasfondo increíble. Amarás a cada uno de los personajes pero no te encariñes con ellos. Dan...