Mari mira fijamente a las puertas de la iglesia de nuevo. Sabe bien qué estarán revisando. Sabe bien qué muy probablemente, ya se hayan dado cuenta de su tumba destruida. Sólo sé qué quiere asegurarse. Mari lleva una pala y una caja de herramientas , por si las dudas.
Abre las puertas. Son las 6:30 de la mañana. Descubre qué aun esta vacio. Suspira profundamente. Ve la puerta. Por suerte, no se destruyó. Sólo la desprendio. Rápidamente, y recordando las lecciones que su padre le dio, ajusta rápidamente la puerta de nuevo. Hecho. Ahora toca la parte difícil.
Entra de nuevo al cementerio, y aún se sorprende al ver ese enorme hueco donde ella solia estar. Su feretro fue completamente destruido, pero la tierra sigue estando ahi, y la marca de su tumba, su epitafio, sigue intacto. Empieza a usar la tierra dispersa para enterrar de nuevo bien el feretro, y con cuidado, reacomoda su epitafio de nuevo donde solia estar. Al ver todo de nuevo en orden, sale de la iglesia y suspira de nuevo.
—Eso salio bastante bien, considerando nuestra situación.
“¿Sigues aquí?”
—Te dije, siempre estoy aquí, vigilandote. Pero, ¿Porqué arreglarlo todo? ¿No quieres qué la gente sepa de tu regreso?
Se siente un poco sola.
—¿Y porqué no los llamas y les dices qué regresaste?
“Oh, adelante, me encantaria oir a Hero desmayarse desde el otro lado de la llamada. Nada me encantaría más”.
—Hey, estas siendo sarcástica, es un avance en la dirección correcta.
Mari le hace la ley del hielo.
—Hh. Bueno, parece qué necesitas tiempo para pensar en esto.
Mari se pone a recordar viejos tiempos.
Recuerda alguna ocasión en la qué vio a Hero siendo molestado por unos bravucones de la escuela. Mari tiene un secreto. Mari puede ser la persona más amorosa del mundo, pero tiene un serio problema.
Un temperamento muy frágil. Cada misero error podia ser motivo de enojo para ella. Estaba lista para golpearles, pero entonces, una mano la detiene.
Sunny.
Sunny es un chico muy solitario y introvertido, ¿Entiendes? Sin embargo, a pesar de ello, ella y el siempre causan un efecto en los demás. Si no es caer perdidamente enamorados de ellos, es algo más.
En Mari es la profunda admiración por ella.
En Sunny...es la capacidad de hacer felices a las personas.
El siempre lograba hacerla feliz. Mentira y dirá que mantenía a Sunny cerca porqué era su hermano. Qué porque a veces era divertido.
Pero la verdad es qué le gustaba tener al chico cerca.
Sunny era su pequeño orgullo.
Pero luego ella lo arruino todo, se dice a si misma.
Mari se levanta del escondite y se escabulle entre los pequeños niños y jovenes qué aun juegan en aquel oxidado parqué, ya olvidado hace mucho, y lleno de basura.
Mari ve hacia el cielo. Es un dia azul, pero no sabe si es paz o tristeza.
No importa. Sólo quiere sentir de nuevo todo. Sentir este pueblo de nuevo. Conectar con el... así que decide ir a la fuente, y, mientras nadie la mira, roba todas las monedas que puede y las mete en sus bolsillos mientras silba.
—…¿en serio?
“¿Qué? Necesito el dinero”.
—Si, pero...hay empleos de medio tiempo qué te admiten demasiado rápido por aquí, y lo sabés.

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El Renacimiento de Mari - Un Fanfic de Omori
FanficLlámalo destino. Llámalo milagro. Llámalo coincidencia imposible. Sea lo que sea, Mari ha vuelto de entre los muertos después de 9 años de su abrupta y espantosa muerte. Y ella, la pandilla, y todos en Faraway, están emocionados, y asustados. ¿Cómo...