DC Super Deku

X

#KillingInTheName

-¿Que es lo que intentabas?

El viento parecía más helado que antes. Livewire no respondió, y le quitó la mirada a Deku. Podía sentir su boca seca, pero ese no era el mayor impedimento para hablar. Era quizás la manera en que él la veía tan atentamente, como si le estuviera prestando tanta atención solo a ella que ni siquiera sabia como actuar. No era como cuando subía aquellos videos que se llenaban de interacción virtual.

Esto sí se sentía real.

-Yo...no lo sé.

-Buscas obtener algo, eso intentabas.- dijo descubriendo su mentira- ¿Y lo has logrado? ¿Obtuviste lo que buscabas?- cada pregunta se sentía como una apuñalada a su persona- Sé lo que has hecho. Todo está en internet y en los periódicos. Sé de cuanta gente te has burlado y a cuanta has lastimado con tus bromas. Pero nunca paras, no te detienes. ¿Por qué sigues? ¿No estas satisfecha? ¿Te divierte tanto el hacer sufrir a los demás?

Livewire abrió la boca- Y-yo n-no...- solo para ahogarse en sus palabras. Deku se acercó, sintiéndose mal, pero sabiendo que lo debía hacer. Dado que Izuku ya lo había hecho antes.

-¿Eres una sadista acaso? ¡Respóndeme!

Esa fue la gota que derramó el vaso.

Sin saber si fue su presencia obscura y atollante, o sus ojos negros y tormentosos, Livewire perdió su transformación. Aunque su traje permaneció, su piel dejo de brillar en celeste y pasó a ser un ligeramente pálido durazno. Su cabello cayó despeinado hacia el lado derecho de cara, mostrando su cabello negro con mechones teñidos de azul. Pero lo que hizo que Deku se echara para atrás no fue el primer sollozo que dejo salir; uno tras otro, acompañados por pequeñas lágrimas que rodaron por sus mejillas, si no el hecho que la reconocía.

Era esa chica de la escuela que le había acusado de lanzarse el gas en el auditorio. La misma que tenía un canal de videos de bromas de mal gusto. Eso era un problema, ya que pensó quizás por no abrir su mente, que era alguien mayor que él. Fue así que decidió ser directo y brutalmente honesto, pero había sido el enfoque incorrecto viendo el resultado. Ahora mismo se sentía culpable al verla así.

Culpable, porque él entendía como podía pasar de ser una villana algo caricaturesca a esto en solo segundos. Era solo una adolescente. Una joven que podía simolemente estar conflictuada y atormentada por algo que no podía controlar y le ganaba. Algo que le hacía pensar que era correcto hacer lo que hacía para obtener lo que sea que estuviera buscando.

-L-lo s-siento- sollozó. Eso, si era posible, lo hizo sentir peor.

-Disculpame. No quería hacerte llorar.- se disculpó con un nudo en la garganta. Sin embargo, esto le parecía demasiado extraño. ¿Por qué no percibía maldad en ella? No era como Dabi o Toga, quiénes a pesar de tener algo tras sus acciones, podía sentir la maldad en ellos. Ella en cambio se sentía como una niña que no parecía saber más que esto, pero necesitaba saber el motivo- Solo quiero saber que pasa. Quiero ayudarte.

Leslie limpió su cara en afán de quitar las lágrimas, y trato de montar una máscara molesta- N-no me vas a engañar, Conejo.- Izuku entendía que fueron sus mismas acciones desapercibidas lo que hacían que ella desconfiara de él. Se preguntó como podría arreglarlo antes de que ella continuará tras sorber su nariz- S-sé lo que le haces a los que atrapas. N-nunca nadie los vuelve a ver.

"Estos rumores..." pensó algo molesto. Sentía como si hubiera sido deshumanizado. Paró un segundo, sintiendo que dio con una idea. Una idea estúpida.