Luego de la aniquilación de sus padres y próximo a alcanzar su edad adulta, 1.800 años, el príncipe Nouel de la Comunidad vampírica del Este, necesita una pareja para convertirse en rey.
Tras buscar al adecuado sin suerte alguna, entre los varones d...
Siglo tras siglo, el mundo ha ido cambiando sin detenerse, tanto en su apariencia, como en las costumbres de la sociedad que ha ido habitado en él.
Así que lo que en el pasado había sido un majestuoso castillo, denominado como la gran fortaleza vampírica de la Comunidad del Este, en medio de la frondosa maleza salvaje y en una extensión de tierra llamada Tailandia, en los días presentes se ha transformado en una moderna y poderosa edificación, en el centro de una ciudad llamada Bangkok.
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Con esa inevitable evolución, tanto los chupasangres del Este como los demás, esparcidos por el mundo, tuvieron que adaptarse y aprender a convivir entre los humanos pues mientras estos se multiplicaron por millones, los seres de piel fría y sed de sangre fueron más escasos.
Las luchas por el poder aún siguen produciéndose en la actualidad, aunque deben hacerse con discreción pues las redes sociales lo desvelan todo y esos vampiros expuestos, sin tregua son cazados y exterminados.
Aprender de ellos hasta mezclarse e imitarlos en sus actos y costumbres fue una buena opción pues y ya no solo fueron vistos como comida, aunque tan solo por la noche.
Los vampiros tuvieron que ocultar además de sus identidades para no ser extinguidos, sus actividades, por lo que el banco de sangre denominado Corporación Hiroco, con distribución por todo el país, en realidad no es más que la tapadera de la granja de sangre humana, que el rey Korn había fundado en la antigüedad.
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También, los que en siglos pasados habían sido vistos y nombrados lacayos al servicio de los monarcas y jefes de las comunidades, en días presentes son llamados empleados.
El ejército que durante siglos había defendido y protegido con sonada valentía a la sociedad vampírica, también cambió su nombre pasando de ser el escuadrón real a llamarse Guerreros de la muerte.
Así mismo, con el tiempo, las pesadas espadas con las que se libraron y se ganaron multitud de batallas, han sido sustituidas por armas en algunos lugares como en la corporación liderada por Nouel, príncipe de la comunidad del Este.
Sus armas están cargadas con balas de luz diurna, una solución luminosa que simula la luz solar y que tras entrar en el cuerpo de los vampiros enemigos, los quema desde el interior, evaporizandolos al instante.
