La reina mestiza

Capítulo 7

Un día antes de comenzar con el plan...

Era domingo, el único día de la semana que tenía libre completamente y por tanto el día perfecto para realizar todos encantamientos necesarios para la próxima noche.

Se dedicó la mañana entera a seguir las instrucciones para hacer las grullas, consiguiendo un total de cinco de esos animales de color negro para que cuando sobrevolasen cerca de los techos no llamasen tanto la atención como las blancas lo harían.

Las suficientes para tener a todos controlados.

Ahora solo necesitaba lanzar los hechizos necesarios y encontrar una excusa para rondar por todo el edificio toda la tarde.

La hora de comer había llegado y antes de poder ir al comedor su madre abrió la puerta justo después de tocar.

-¿Vienes a comer?- preguntó mientras se acercaba a ella.

A Lyra no le dió tiempo a esconder las grullas, pero si el libro, a su madre le entró la curiosidad al ver aquellos papeles con formas.

-¿Vas a cambiar la lectura por la papiroflexia?

-No, ¿por qué la pregunta?

-Las grullas- dijo señalándolas- te han quedado bien, son bonitas.

-¿Quieres una?- si su madre aceptaba le haría el camino más fácil- ¿Si quieres cuando las pinte te la llevo?

Con un asentimiento su madre acepto el regalo.

Lyra ya tenía la excusa para vagar por el castillo y colocar los animales de papel. Lyra se levantó y acompañada de su madre fueron a comer.

☾ ☾ ☾ ☾

Cuando llegaron al comedor Tobías ya se encontraba sentado a la derecha del sitio de Seleria. Lyra se sentó a la izquierda de su madre y cuando pasaron los diez minutos que solía tardar su tío en llegar se extrañó.

-¿Dónde está Velarion mamá?

-Se me había olvidado decírtelo, se fue ayer por la mañana después de hablar conmigo, pero me dijo que estaría aquí mañana antes de que os fueseis.

Dos sirvientas llegaron con la comida, hoy tocaba pasta, por lo que la reina y su hija dejaron de hablar entre ellas para agradecerles por la comida. Tobías se mantuvo siempre callado.

Habían terminado el plato principal cuando Tobías carraspeó.

-Lyra, tu madre y yo tenemos algo que decirte- él estaba sonriendo y Lyra conocía esa sonrisa, nada bueno para ella podía salir de esa boca cuando esa mueca estaba en su cara- tu madre y yo hemos decidido aumentar la familia, como sabemos que no te interesa tu legado, creemos que es lo mejor para el reino y claramente sabemos la ilusión y alegría que esto te aporta.

Lyra formó la cara de ilusión más grande de su vida, podría ser actriz de no ser por todo esto, pensó.

-¡Enhorabuena! No sabéis lo feliz que estoy por vosotros- abrazó a su madre y a Tobías le dedicó una mueca de odio mientras lo hacía- Pero contradiciendote, estoy muy interesada por mi legado, es de lo más interesante además de que cumplir con las tareas que este conlleva es lo que más me llena en el mundo.

Hubo un silencio tenso tras esto que se rompió con la entrada de una de las trabajadoras.

-¿Van a querer postre?