ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 6: ᴅᴇ ᴠᴜᴇʟᴛᴀ

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Segundos más tarde los 3 habían llegado por fin a la casa de Sindri. Suspiraron aliviados al entrar en terreno conocido. La cosa se había puesto un poco fea y lo mejor que pudieron hacer fue irse de allí.

Atreus sujetaba a Eyra con firmeza para que no se cayera al suelo, tenía su mano por la espalda, aguantándola por la cintura y ella se agarraba con fuerza al hombro de este.

-Hemos llegado, estamos en casa-. Dijo este con una pequeña sonrisa, giro su rostro para ver el de ella y se entristeció al ver como tenía su mirada perdida en la nada, y como por sus mejillas caían lagrimas.

Entonces Eyra no pudo más y se derrumbo.

Cayó de rodillas en el suelo y se llevo las manos a la cara

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Cayó de rodillas en el suelo y se llevo las manos a la cara.

El llanto, mezclado con insultos y maldiciones era lo único que se podían escuchar en el lugar. Atreus no sabía que hacer o que decir, a si que se limito a arrodillarse a su lado e intentar consolarla.

Kratos al ver aquella escena supo que entre los jóvenes el sobraba, confiaba en que su hijo consolaría a Eyra mucho mejor de lo que él lo podría hacer, así que en completo silencio, entro en el casa.

-Ey, vamos para adentro ¿vale? Vamos a asearte un poco y a descansar-. Le dijo con voz suave y apretándole con delicadeza el hombro.

-Están muertos Atreus... los ha matado. Incluso a mi hermano pequeño. Ese... ese monstruo los ha exhibido como un trofeo-. Decía Eyra entre lagrimas recordando la escena que vio, aun tenía en su mente la imagen del sufrimiento que mostraban las caras de sus padres.

-Lo siento mucho Eyra, eso es algo que nunca debería de ver nadie. Lo que ha hecho es una autentica atrocidad-.

-Debería de haber estado ahí con ellos, haberlos ayudado a defenderlos, y al final , morir con ellos. Pero peleando en todo el momento junto a ellos, nunca me lo perdonare-. Las lágrimas empezaron a salir con más fuerza y Eyra encorvo su espalda hasta casi tocar el pecho con sus rodillas.

-¡No digas eso! Si eso hubiera pasado nosotros nunca nos hubiéramos conocido-. Exclamo Atreus ante las palabras de la rubia.

-Soy una vergüenza para mi clan, no merezco vivir. Ni siquiera he tenido el valor para enfrentarme a mi tío. Simplemente debería de morir-.

-¡Para por favor! No me gusta que digas esas cosas. Si estás aquí es por algo, quizás tu madre te ayudo a escapar porque sabía que tú eras la única que podía salvar a vuestro pueblo. Tus padres se sacrificaron por ti, no hagas que todo eso haya sido en vano-. Las palabras de Atreus llegaron al fondo de su corazón.

Quizás si tenía razón, quizás su madre sabía que su propio hermano los había traicionado y que ella era la única que podía reclamar su trono, que le pertenecía por derecho.

Eyra miro fijamente a los ojos azules del chico.

-¿De verdad piensas eso? ¿De verdad crees que puedo salvarlos?-. Pregunto con un hilo de voz.

𝘿𝙖𝙣𝙯𝙖 𝙙𝙚 𝙙𝙧𝙖𝙜𝙤𝙣𝙚𝙨 「𝙂𝙤𝙙 𝙤𝙛 𝙬𝙖𝙧」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora