夏°•natsu•°《Shin Soukoku》♡

Capitulo 4

𝐀𝐧𝐭𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐚𝐝𝐚 𝐪𝐮𝐞𝐫𝐢𝐚 𝐚𝐯𝐢𝐬𝐚𝐫 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐟𝐮𝐞 𝐞𝐝𝐢𝐭𝐚𝐝𝐚, 𝐬𝐢 𝐡𝐚𝐬 𝐥𝐞𝐢𝐝𝐨 𝐥𝐚 𝐯𝐞𝐫𝐬𝐢𝐨𝐧 𝐚𝐧𝐭𝐞𝐫𝐢𝐨𝐫 𝐭𝐞 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐦𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐥𝐞𝐞𝐫 𝐥𝐚 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐚, 𝐡𝐞 𝐜𝐚𝐦𝐛𝐢𝐚𝐝𝐨 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐧𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐬𝐚𝐬.
La historia fue editada el  19/09/2023
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Akutagawa:

Observe aburrido el reloj que yacía en mi muñeca.

20

Ya han pasado 20 minutos y todavía nada, el imbécil de Jinko seguía sin aparecer.

El callejón en el que me encuentro, en algún momento iluminado por la brillante luz del sol, ahora había sido tragado por las sombras que la noche traía consigo.

Ahuyente rápidamente un mosquito, cualquier otra persona en mi lugar hallaría la oscuridad reconfortante, en mi opinión las sombras son un aliado para los asesinos, son una especie de pared invisible que te protege del alcance de todos, la oscuridad es el mejor aliado para matar.

Pero... Tampoco te pueda confiar, la noche es traicionera, nunca sabes que hay en ella, si bien es el mejor amigo de los asesinos, también es el peor enemigo de los niños.

Aún recuerdo las noches frías en los calles de piedra, el observar con temor la luna que están saliendo, sabiendo que eso significaba dormir, nunca sabes que ocurrirá, el miedo al no despertar y vivir en la oscuridad no es algo que se pueda olvidar.

Sacudí la cabeza para ahuyentar a los malos recuerdos, si Jinko no aparece pronto ire a buscarlo para matarlo.

Volví a mirar mi reloj.

28

Solo me queda esperar atrapado en esta oscuridad.

3ra persona:

Mientras el mafioso seguía encerrado en esa red de pensamientos, un albino corría a toda velocidad hacia el mientras intentaba no tropezar.

-¡Akutagawa!- exclamo intentando llamar la atención del pelinegro.

Casi enseguida el mencionado volteo a verlo con los ojos llenos de furia, por su mente corrían docenas de insultos dirigidos al más joven.

No solo llegaba tarde, si no que también tenía el descaro de gritar su nombre frente a una calle de las más concurridas.

Furioso envolvió a Rashōmon alrededor del cuello del de ojos bicolores, estaba realmente enojado pero el otro parecía no darse cuenta.

-¡Idiota! ¡Sueltame!- gritaba intentando arañar la tela con sus garras de tigre- ¡Akutagawa!¡Por favor!

A regañadientes el mayor lo libero de Rashōmon y lo lanzó al suelo.

-Habla Jinko- Dijo Akutagawa mientras se cruzaba de brazos y lo miraba exigiendo una explicación - ¿Cuál es la razón de tu tardía aparición?

-...- El menor esquivo su mirada sintiéndose culpable- Lo siento, no tengo excusas, se me pasó el tiempo.

El pelinegro apretó los puños antes de agarrar al más joven del cuello de su camisa y arrastrarlo hacía la salida de aquel sombrío callejón.

-¿Akutagawa?

- Cállate, no estoy de humor para escuchar tu patética voz.

- Perdón...

-¡Deja de disculparte!  A partir de hoy eres parte de la Port Mafia, no arruines nuestra imagen con penosas disculpas.

-Lo sien- antes de que terminara esa palabra Akutagawa le tapó la boca con Rashōmon.