Cada día muero un poquito
Grito fuerte, asustada, confundida
Mis velas se prenden de inmediato y el espejo explota, los pedazos salen volando
Escucho puertas abrirse, las he despertado, pero se que contarles esto, o sobre algo más, no es una opción, así que corro a mi baño, tomo un valde de agua y mojo mi cara, queriendo terminar con la sangre
Escucho como entran a mi cuarto
—¿Yaiza?— escucho sus voces
Me coloco la toalla en la cara, limpiandome, pero me recargo en la puerta
Estoy muy asustada, pero no podía hablar —¿Que hiciste? Tu cuarto esta hecho un asco, y te he dicho que apagues las velas en la noche
Siento como quieren empujar la puerta del baño pero no lo logran
—Lo siento, no las quería despertar
—¿Que haces ahí? —siguen empujando la puerta
—Yaiza, ¿Estas bien? Hay sangre en el piso — habla mi tía Bertha
—S- si, es solo, perdón por despertarlas, tuve una pesadilla, luego el espejo se rompio y me corto el- el brazo
Me asomo al balde de agua, asegurandome que no hay más sangre en mi rostro, luego con un filo del balde me corto el brazo, ahogo el dolor dentro de mi boca
—Dejame verte— pide mi abuela
Así que ya abro la puerta, con la toalla en el brazo, salgo del cuarto, todas están aquí, menos mi padre, espero que nadie note mi cara húmeda
—Enserio no quería despertarlas— digo tímida, como si ahora mi existencia fuese un crimen
—Aquí esperame, voy a ponerte miel y unas plantas para que cierre rápido— mi abuela sale rápido de mi cuarto
—¿Como rompiste el espejo?— me cuestiona Royce
—Ammm, yo- yo no- no lo rompí, ¿Como podria hacerlo?, les digo que grite por la pesadilla y luego el espejo no se, exploto
—¿Que soñaste?— pregunta mi madre
—Yo, no... no quiero hablar de eso
—¿De que te sirve tener una madre que interpreta sueños si no te puede ayudar?
—Te juro que no se, me lo he preguntado toda mi vida— musito sin pensar, es como si ya sintiera la bofetada sobre mi, pero antes de eso llega mi abuela
Se sienta a mi lado y pone las plantas en mi brazo, las envuelve con un pedazo de tela
Escucho como sale Salime de mi cuarto quejandose entre dientes de que no la dejaba dormir, luego Juddie, diciendo que tiene mucho sueño, le sigue Royce diciendo que solo la hago perder tiempo con mis cosas extrañas, mi abuela me sonríe antes de irse al igual que mi tía Bertha
—¿Y mi padre?— pregunto
—Dormido, se quejo cuando gritaste, pero ya sabes como es, se quedo dormido de nuevo
Lo miro cabizbaja—¿Por que mi padre no me quiere?— pregunto con la voz casi cortada, con miedo ahora incluso de hasta llorar de nuevo
—No digas eso Yaiza, tu padre te quiere, pero le cuesta demostrarlo, y ya duermete— sale
¿Por qué le cuesta cuando se trata de mi? Jamas he visto que se le dificulte demostrarle su amor a mi hermana, y no solo a mi padre, si no ha toda mi familia

ESTÁS LEYENDO
No en esta vida
RomanceLa vida en la época de 1800, en un pueblo en Inglaterra llamado "Chastity", Yaiza entenderá que en ocasiones no hay que morir para estar en el mismo infierno y la vida la obligara a convertirse en la villana de un cuento de hadas que no le dio su "F...