_________ Yagami es la menor de tres hermanos, su hermano mayor Ligth tiene el poder de limpiar el mundo de la gente cruel y despiadada, para que la pequeña crezca en un mundo sin crueldad.
¿Qué podría pasar durante su misión?
- Advertencias -
• Ser...
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La Yagami menor estaba en su habitación personal del edificio, jugaba ella sola con los tantos juguetes que tenía, eran bastantes desde muñecas, peluches, carritos, juegos de té, disfraces, incluso tenía un castillo lo suficientemente grande como para que Ligth entrara ahí.
Esta niña humilló hasta a su escritor, todo fue cortesía de L, según él para que la nena no se aburriera al estar ahí.
Que me pague mi terapia.
-- ¿Ma té, teno otito? -- habló la nena jugando con los peluches.
Tenía una linda fiesta de té, tenía un vestido y una tiara.
-- Dico té, gacias teno
Sirvió el líquido invisible en las tacitas a sus peluches.
-- ¡Oh! ¡Ma gatetas! -- tomó un platito vacío y fingió darle galletas a los invitados -- ¡Nada nada!
...
Mientras ella jugaba sola, era vigilada por una de las cámaras, todos podían apreciar jugar a la nena.
-- Insisto en qué exageraste en darle todos esos juguetes -- Hablo Soichiro, el padre de la bebita.
-- Solo fue un pequeño gasto, no hay problema -- dijo L moviendo su mano de arriba abajo restándole importancia.
Ligth no había dicho nada hasta ahora, solo admiraba como su nena jugaba solita.
-- La pequeña (N) es muy consentida -- Mencionó Matsuda.
-- ¡Ella es tan tierna! -- halago Misa.
-- Oye Ligth, ¿te sientes bien? -- cuestionó Aizawa al mirar al castaño.
Este se veía muy concentrando pensando en algo, notaron cómo sus expresiones cambiaban, pasaron de estar tranquilo hasta estar irritado.
-- ¿Ligth? -- llamó su padre.
Este salió de sus pensamientos para luego hablar.
-- He estado perdiendo mi tiempo aquí, no he parado con la investigación -- suspiró con fastidio -- Tengo que dejar esto de lado, no es mi prioridad ahora
El castaño se levantó de su asiento y comenzó a caminar hacia el ascensor que lo llevaban a las habitaciones.
L no sabía a qué se debía su conducta, solo se dejó llevar por el chico.
-- ¿A dónde vas Ligth? -- cuestionó Misa.
Este los miró antes de cerrar las puertas del ascensor.
-- Voy a ir a jugar con mi pequeño caramelo, no he estado con ella estos días
