𝐔𝐍𝐃𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐀𝐌𝐄 𝐌𝐎𝐎𝐍

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟖

CAPÍTULO 8
"DESCUBRIÉNDOME"

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Desde aquella noche, donde sus amigos Andrea y Jacob habían salido corriendo luego de que ambos casi pelearan con unos desconocidos, Bella estaba inquieta; esto debido a que desde la salida al cine con Mike Newton, Andrea y Jacob, no había sabido casi nada de sus amigos.

Los padres de ambos le habían dicho que tenían mono, una infección viral que compartían por el gran tiempo que pasaban juntos Black y Clare, Bella creyó eso al principio, pero cuando apenas intercambiaba escasos mensajes de texto con su mejor amiga dudó sobre qué tan real era la información que le daban.

Cada vez aumentaron más las llamadas y los mensajes insistiendo hacia los chicos. Jacob ni siquiera los respondía pero Andrea por otro lado trataba de mantener tranquila a su amiga, diciéndole que estaban mejorando aunque debían estar aislados unos días más.

Para la chica era importante que su amiga estuviera a salvo y además, todo el cambio que estaba viviendo era algo que primero debía aceptar y entender para después compartirlo con el mundo y sobretodo con Bella.

—Juro que estamos bien —respondió Andrea en medio de su llamada con Bella mientras, en realidad, se sentía demasiado confundida y ajena a su propio cuerpo.

—¿En serio? Quisiera verlos. Solo quiero volver a estar con ustedes dos, mis amigos.

Andrea sonrió amargamente sabiendo que aún no era momento de revelarse a Bella la verdad.

—Escucha, no puede ser pero te prometo que tan pronto como pueda te explicaré todo, ¿sí?

Con esas palabras Andrea le dejó en claro a Bella que no se trataba de una simple infección. Había algo más.

—Está bien... cuídate, ¿de acuerdo? —agregó Bella.

Andrea sonrió para responder, sin importarle que su amiga no la viera.

—Igual tú. Un abrazo.

Al finalizar la llamada Andrea dejó su teléfono sobre su cama y abandonó su habitación, encontrando a sus padres, que llegaban de la reserva.

—Hola, cariño —la madre de Andrea esbozó una sonrisa caminando hacia ella mientras su esposo dejaba algunas cosas en el suelo— ¿Cómo sigues? —preguntó acariciando el cabello de su hija mientras le daba una mirada cálida.

La chica sonrió de lado antes de responder.

—Tan bien como se puede —replicó viendo a su madre y luego a su padre, quien se unió a ellas— todo esto ha sido mucho que asimilar.

El suspiro fugaz de la mujer resonó entre los tres.

—Lo entiendo, cariño —dijo— pero puedo asegurarte algo. Entenderás todo esto y sobretodo lo aceptarás —sonrió— será parte de tu vida... será tu vida y sé que serás feliz con ello.

—Tú madre tiene razón —habló el señor Clare—. Tú eres mucho más ágil e inteligente que nosotros —comentó con cierto tono divertido— tu madre era algo torpe cuando lo descubrió.

—¡Oye!

Andrea y su padre rieron al escuchar la queja de la pelirroja. El hombre le guiñó un ojo a su hija para continuar.

—Y yo era un completo lobo solitario —sonrió— buen término, ¿no?

Andrea sonrió sabiendo a qué se refería.

—Tú hija mía, llevas menos de una semana y ya aconsejas a Jacob. Hablas con los demás chicos, recibes los consejos nuestros y tratas de continuar tu vida con normalidad —la mirada en el hombre era de orgullo—. Tú mi niña hermosa, serás la mejor loba de la familia Clare y de las mejores de la historia.