𝐔𝐍𝐃𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐀𝐌𝐄 𝐌𝐎𝐎𝐍

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟑𝟓

CAPÍTULO 35
"MOMENTO DE PELEAR"

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La nieve había endurecido, el frío recorría cada rincón y el momento tan esperado había llegado.

Los Cullen y sus amigos llegaron a un gran campo, donde encontrarían a su destino.

—Si sobrevivimos, te seguiré a cualquier parte mujer —Garrett observó a Kate.

—¿Y ahora me lo dices? —replicó con gracia antes de regresar su mirada al frente y sonreír para el hombre.

Todos veían a quien tenía al lado, su pareja, su buen amigo o familia. Cada mirada expresaba la adrenalina y emoción del momento... hasta que aparecieron.

A través de la espesa niebla, los Volturi y su gran ejército con caperuzas negras que les llegaban hasta los tobillos tras ellos fueron visibles. Con cada paso, su objetivo estaba más cerca, al igual que el deseo de su líder.

—Aro está buscando a Alice y Andrea —mencionó Edward observándolo a la distancia.

Ninguna de sus hermanas estaban allí.

La mirada rojo carmesí del vampiro líder efectivamente buscaba a las dos Cullen que tanto deseaba tener en su clan.

Tanto Tanya como Kate vieron a su hermana Irina con ellos, se estremecieron al igual que ella al volver a verse.

Entonces, cuando el aterrador número de fieles a los Volturi parecía gigante, los cambia forma de las varias manadas aparecieron de entre los árboles en el otro extremo respaldando al bando de Forks. Andrea como humana caminaba a la cabeza junto a Jacob, que estaba como lobo.

Cada uno tomó lugar junto a algún grupo así como la híbrida y su esposo llegaron con Bella, Edward y su hija.

Ambas neófitas se observaron entre sí para asentir y luego fijar su mirada en el enemigo.

Carlisle fue el primero en dar un paso adelante y dirigirse a Aro.

—Aro, hablemos como solíamos hacerlo, de manera civilizada.

—Palabras justas, Carlisle, pero algo fuera de lugar considerando el batallón que reuniste en contra de nosotros.

—Te doy mi palabra. Esa nunca fue mi intención. No se quebró ninguna ley.

—Vemos a la niña —aseguró Caius— ¡No te burles de nosotros!

—¡No es una niña inmortal! —dijo Carlisle explicando para todos los demás—. Todos ellos lo atestiguan, mírala tú —señaló a la pequeña que se escondía junto a su madre— mira el color de la sangre recorriendo sus mejillas.

—Artificios —objetó Caius.

Aro elevando su mano, lo hizo callar.

—Yo encontraré cada faceta de la verdad, pero, de alguien más central a la historia... Edward, viendo a la niña colgada del brazo de tu nueva compañera, asumo que estás involucrado.

Edward acarició el cabello de su pequeña antes de dejarla y avanzar hasta Aro, Renesmee se movió para quedar entre su madre y su tía, además de que Jacob estaba allí con ellas. Bella trató de extender su escudo hasta su esposo que avanzaba con cada paso, pero no le fue posible.

Aro tomó con prisa la mano del vampiro para comprobar la veracidad de la historia que los Cullen tomaban, encontrando que todo, era cierto.

—Quisiera conocerla.

Edward, para nada a gusto con su petición, aún así se vio obligado a cumplirla. Dándose vuelta y observando a su familia, Edward las esperó. Bella y Renesmee empezaron a caminar escoltadas por Jacob y Andrea, junto a Emmett que se les unió luego.