LIVE OR DIE [EN EDICIÓN]

¿Quienes son ustedes?¿Quien eres tu?

Capitulo 6

¿Quienes son ustedes? ¿Quien eres tu?

*Flashback*

Matt estaba desinfectado el corte que me había hecho al intentar matar a un enfermo o mordedor como el les dice.

—Aun no entiendo como es que tu daga casi te atraviesa el cerebro.

—Ni yo Mathew pero en fin, fue un simple corte.—Reste importancia.

—¿Solo un corte? ¡Casi puedo ver tu cráneo!

—Ya no exageres Matt.

Termino de ponerme una gasa de tela en la cabeza y se sentó a lado de mi soltando un gran suspiro.

—¿Y eso porque?

—Porque no se que haré si te pasara algo.

—Seguir sobreviviendo ¿no?—Dije como si fuera cualquier cosa.

—Es fácil decirlo Brooke, pero yo creo que si un día tu me faltas entonces yo me voy a derrumbar y no podre seguir, no sin ti.

—¡Hey! Escucha, nada me pasara y si llega el momento tu tendrás que seguir sin mi, no dependas de los demás, no dependas de mi ¿entendido?

—¿Como seguir sin mi mejor amiga?

—A ver Matt.—Acune su rostro entre mis manos prácticamente obligando a que me viera a los ojos.—Si algo me llegara a pasar quiero que me prometas que seguirás adelante y que sacaras a todas estas personas adelante.

—No puedo prometerte eso Brooke.

—Mathew.—Solo le llamo así cuando estoy molesta.—Quiero que me prometas que lo harás, por favor Matt, por Owen, por mi.

—Bien...—Soltó todo el aire de sus pulmones.—Pero prométeme que no morirás.

—No te prometo nada, pero intentare no hacerlo.

*Fin de Flashback*

Abrí pesadamente mis ojos, un sueño, simplemente había sido un sueño. Levante poco a poco mi torso hasta que mi cabeza recibió un gran golpe.

—¡Maldición!

Me senté con cuidado de no volver a pegarme con lo que sea que me había pegado hacia unos segundos, sobe mi cabeza y talle mis parpados con la mano izquierda para aclarar mi vista, cuando abrí los ojos al instante me di cuenta que esta no es mi habitación y mucho menos el observatorio, intente levantarme del todo pero algo me lo impidió, mi mano estaba sujeta a la cama con unas esposas jale varias veces para intentar soltarme pero esto fue en vano. Note una mesita a más o menos un metro de mi y en esta se encontraba mi navaja, con mi pie hice que cayera al piso y poco a poco la atraje hasta que pude tomarla con mi mano, estaba intentando zafarme cuando escuche algunos paso que se acercaban cada vez más a mi.

Me escondí en el hueco que quedaba entre la litera y la pared, cuando lo sentí cerca de mi intente lanzarme hacia aquella persona pero fue en vano pues dio unos pasos hacia atrás y las esposas me impidieron acercarme a aquel hombre que en esos momentos me apuntaba con su ballesta.

—¡Hey! Tranquila no pienso hacerte daño.

—Suéltame y aléjate de mi.

—No puedo soltarte si estoy lejos de ti.—Dijo arrogante.

—Bien entiendo, ahora me vas a soltar ¿o que?

Se acerco poco a poco hasta estar a unos cuantos centímetros el uno del otro y me arrebato la daga, la dejo en la misma mesa en la que estaba antes y me soltó, en un movimiento rápido mi navaja estaba de nuevo en mi mano y estaba a punto de matarlo cuando sentí un gran dolor en la cabeza y mi vista se nublo.