Capitulo #38 "Decepción"

222 11 106
                                    

>Delegación<
6:30pm

Apenas su amigo Takashi se marchó de su hogar, Draken se cambio de ropa y toma rumbo hacia la delegación de la ciudad de Tokyo.  

No sabía que lo había llevado a visitar a Seishu Inui, pero ahí estaba, viéndolo detrás de los barrotes.

— Solo quince minutos — recordó en un tono de fastidio el policía de guardia de celda.

El rubio parece tan sorprendido como él, y no podía culparlo, aunque compañeros de medicina, no eran precisamente ni amigos, ni cercanos.  Un espacio en blanco entre ambos se hizo cuando Seishu lo trato de la mierda por ser becado al inicio de Ayome.

—Hola, se que preguntarte cómo estás no sería adecuado, pero… ¿Cómo andas?

Seishu mojo sus labios y se sentó en la cama de concreto.  La incomodidad era palpable entre ambos, pero Draken buscaba hacerlo funcionar.

—¿Puedo serte sincero?

—Adelante.

—Como la mierda, el cuello y el trasero me duelen, ya tengo cinco días que no sé lo que es una ducha,  apesto a miércoles, y extraño comer mi pan integral en las mañanas. De no ser por la comida que me trae mi hermosa madre, estaría ahí desmayado.  Ayer tuve un compañero de celda, un borracho, casi me guindo a pelear con él, pero lo sacaron… Estoy, en conclusión, molido. 

Draken sonrío con compresión.

Seishu se levantó y se apoyó de los barrotes, mirando al rubio con incertidumbre.

—No me malinterpretes Draken ¿pero qué haces aquí? Es decir, no somos amigos ni nada parecido — Mojo sus labios de pronto nervioso — ¿O es para reírte?

El chico del tatuaje alzó una ceja.

—¿Por qué me reiría?

—No te trate de la mejor forma el día que llegaste a Ayome — paso una mano por su cabello rubio — No se me ha olvidado.

—Olvídate de eso, es factura vieja — se encogió de hombros.

Seishu asintió y entonces soltó la dudo que también lo tenía carcomiendo desde que lo metieron a la celda.

—Seguro muchos de los chicos me detestan, lo que hice no estuvo bien — pronuncio, aunque irónicamente él no hizo nada.

Draken paso su mano por el barrote y palmeo su hombro.

—No, en realidad, muchos se cuestionaron y sorprendieron por tu acto, que aun ni lo creen. Parece te tienen en buena estima los que te conocen desde hace tanto — le dice, recordando más que todo las palabras de Mikey — Bueno, de Nahoya si no se te sabría decir, no ha dado su opinión al respecto, por lo que sé.

— Sin duda me disculpare con Smiley…

Se quedaron en silencio de nuevo, hasta que Draken miro al chico de reojo y saco su mano.

—Solo pase a visitarte, Inupi.  Debo decir que el mirar cómo te esposaba el policía dejo una fuerte impresión en mí, y eso que mira que vivo al pie de un barrio. Era el pan de cada día desde que era un niño.

Seishu solo miro fijamente.

—Supongo que ver a un niño pijo siendo castigado por la ley, y no saliéndose con la suya… Es como que me llamo la curiosidad de venir a ver cómo se las estaba empeñando aquí dentro — soltó al final un poco sardónica pero sin dejar el tono divertido.

Seishu soltó una risa para su sorpresa, aligerando el ambiente entre ambos.

—Supongo merecía eso.

&quot;𝕮𝖔𝖓𝖙𝖗𝖆𝖉𝖎𝖈𝖈𝖎𝖔𝖓𝖊𝖘 &quot;// 𝑻𝒐𝒌𝒚𝒐 𝒓𝒆𝒗𝒆𝒏𝒈𝒆𝒓𝒔 𝒙 𝑶𝒄'𝒔 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora