Inazuma Eleven:LOS INICIOS [Sofía Evans]

CAPÍTULO 83:EL FIN DEL TIRANO;SEGUNDA PARTE

Pov Sofía

Escuché el pitido que daba inicio al partido, seguido de un pase de centro de Axel y Austin. El de primaria le pasó la pelota a nuestro ex atleta, después Nathan se lo pasó a Xavier, y finalmente el pelirrojo se lo pasó a nuestro estratega.
Jude empezó un duelo por la posesión del balón contra uno del equipo Zoolan, y tras una finta logro seguir adelante al burlar al adversario.

—¡Axel!—le paso la pelota a nuestro delantero.

No obstante uno del equipo contrario apareció de la nada y se interpuso en el pase robando el balón. Era normal en un partido que los adversarios cortasen pases, lo extraño fue la rapidez en que corrió el otro jugador al cortar el pase. Esa era la verdadera cuestión. Con una velocidad normal no hubiera sido capaz de llegar a robar la pelota en medio del pase. Desde entonces me percaté de que algo andaba mal y que debía poner mucha más atención.

—¿En que momento llegó allí? —escuche preguntar a Scotty para si mismo.

Nathan trató de detener al jugador contrario de pasar nuestra defensa, pero ocurrió lo mismo. La velocidad del rival aumento de sobremanera y pasó al peliazulado.
Caleb trató de hacer lo mismo, pero esta vez, en vez de aumentar la velocidad, aumentó la fuerza de salto. Es decir, saltó como cinco metros hacia arriba, una altura que un humano normal, de por si, no lograría alcanzar sin necesidad de una super técnica.

—¡Ni que sea un canguro, por favor!—comenté en voz alta sorprendida

—¿Qué pasa con esa capacidad de salto?—preguntó Hurley anonadado.

Todos estábamos confundidos sobre aquellas extrañas habilidades de nuestros adversarios. Pero la mente siempre en marcha de Jude pareció encontrar la respuesta a aquel enigma en unos segundos

—¡Ya lo se! ¡Tienen el programa de refuerzo humano!—exclamó Jude

—¿Programa de refuerzo humano?—pregunté confundida, tratando de saber que diablos era eso

—No estabas en el partido contra brasil. ¿Lo viste por televisión? —me pregunto Camelia.

Asentí, medio mintiendo. Es verdad que había visto el partido, pero solo el segundo tiempo. Así que si pasó algo interesante o no durante la primera parte, yo no lo vi por estar colándome en el albergue brasileño. Sin embargo me mantuve un poco informada, ya que, ya en el albergue tras darme el alta, le pregunté a Mark como había ido el partido y me comentó que Robingo había sufrido unos cambios drásticos de personalidad debido a que Zoolan le había hecho algo en él.

—Robingo actuaba de un modo extraño, ¿Te diste cuenta?

—Algo así ¿Que con eso?—pregunté

—Al parecer Zoolan implantó en su cuerpo un programa para llevarlo a otro nivel. Vamos, para convertirlo en un súper humano.—terminó de explicar—Un experimento para ver si puede funcionar para implantar en los humanos para la guerra que Zoolan tiene pensado iniciar.

—Ya veo....—fruncí el ceño dándome cuenta de la situación.

En mi mente entró otro recuerdo, el de el partido contra el equipo D y Orfeo, el como Demonio Strada pareció desorientado en medio del partido, que había perdido facultades en medio del enfrentamiento. Ray Dark había dicho algo sobre un programa, y ahora supe que el programa este había sido usado en Robingo y en Demonio a modo de conejillo de indias, y ahora, ya pulido, lo tenían aquellos jugadores-
Dado el caso, dicho programa debe pulir las habilidades del jugador. Por ende sus manías deberían estar pulidas a la perfección, y me costaría mucho detectarlas.

Pero yo no era alguien que se rindiera fácilmente, así que observé más detenidamente el encuentro.

—¡Paren esto!—exclamó Mark—¡Sino sus cuerpos pueden romperse!