Plus que ma propre vie. -Timothée Chalamet-

11

Llegamos al pabellón donde se jugaba el partido. Ese sitio era enorme, había miles de personas. Teníamos que bajar por unas escaleras hasta llegar a pie de pista, allí buscaríamos nuestros asientos. Mientras íbamos bajando note como mi teléfono vibraba, lo saque de mi bolso, era Mir mi manager. Avise a los chicos de que era importante y tenía que cogerlo, bajaría a buscarles en cuanto terminara la llamada. Me hice a un lado y descolgué la llamada. Me llamaba para felicitarme por todo lo que había conseguido en tan poco tiempo en la ciudad. Me pregunto si estaba en el partido de hoy de la NBA, le dije que sí, que un amigo mío jugaría. Me pareció raro que me preguntara si estaba aquí, pero no le di importancia, después de hablar un par de minutos con ella nos despedimos y colgué. Baje las escaleras hasta la pista, mire a mi alrededor y vi a mis amigos que me saludaban con los brazos arriba para que les viera. Por desgracia el lado por donde tenía que pasar estaba lleno de cámaras así que tuve que dar toda la vuelta por alrededor de la pista. No podía cruzar por en medio porque estaban grabando y preparando la pista. Empecé a rodear la cancha hasta que llegue a mis amigos.

-¿Porque has dado toda la vuelta?.-me pregunto Alice.

-En ese lado está lleno de cámaras y fotógrafos, no podía pasar.- le dije

Me senté, me quité el abrigo y acomode mi pelo. Aún faltaban unos veinte minutos para que empezara el partido.

-Hey, have you seen Edward? (Ey, habéis visto a Edward?).-les pregunte a los demás.

-No, I guess we won't see him until he comes out to play (No, supongo que no le veremos hasta que no salga a jugar).-dijo Bella.

-Alice, ¿me acompañas a por algo de beber antes de que empiece el partido?.-le dije poniéndole ojitos.

-Vamos pesada.-me dijo levantándose.-Now we come guys (Ahora venimos chicos).-les dijo a los demás,

Nos acercamos a la barra que hay abajo, el camarero nos atendió. Las dos nos pedimos una copa, hoy estaba de celebración, necesitaba beber alcohol. Mientras esperábamos, una chica se acerco a mi con su grupo de amigas, me pidieron una foto, cosa que me sorprendió pero debía de acostumbrarme supongo. Al irse Alice me miró y rió.

-Tengo una amiga famosa, no lo puedo creer.-y volvió a reír.

Volvimos a nuestros asientos, el partido estaba a punto de comenzar. Estuvimos hablando entre todos opinando que equipo creíamos que ganaría. Después de un rato Alice, que se sentaba a mi lado me tocó en el hombro, llamando mi atención.

-Tengo que decirte algo.-me dijo bastante misteriosa.-Cuando diste la vuelta por la pista para llegar hasta nosotros vi algo. Un chico se te quedo mirando cuando pasabas frente a él. Creí que te había mirado por casualidad al pasar por delante, pero no te ha quitado el ojo de encima desde que has llegado. Yo lo había visto todo por casualidad, el chico es famoso y yo le estaba mirando a él, y justo te vi a ti pasar y me di cuenta de todo.-me contó Alice riéndose.

-¿Que?.-dije riéndome.-¿Quien es el chico?.-le pregunté mirando hacia todos lados.

-Vale fíjate.-me dijo- Justo en frente, en primera fila. Hay un chico moreno, con el pelo rizado, un abrigo de Prada...-continuaba explicando.

No me hizo falta saber más detalles. Era el, era Timothée. Recordé lo que mi amiga me había dicho. ¿Famoso? que va, él no era famoso. Me di cuenta de que tenía razón, no paraba de mirarme, al darse cuenta de que le miraba me sonrió como si no me hubiera visto en años, con verdadera sorpresa. Sabía que el venia, pero no me imaginaba que también estaría en pista. Mire a Alice, ella lo miraba a él, se le caía la baba. Pensé que era una broma.

-¿Me estas vacilando?. Es el chico del café del que te he estado hablando estos días.-le dije.

-¿El?.-me miro rápidamente.-No puede ser cielo, te habrás confundido, ese chico es el crush de medio mundo.-me dijo riéndose.