Todos miman a Rex y el perro lo disfruta deja mostrar su barriga y mueve una pata cuando lo rascan es divertido de ver sin embargo Harry estaba distraído quería ver y jugar pero tenía hambre y no quería ir a la habitación quería estar presente por lo que Severus no tuvo más remedio que alimentarlo en la sala sentados ya iba siendo hora de irse estaba exhausto mentalmente de los Weasley.
Los chicos les daban miradas asombradas mientras Harry succionaba en su regazo Severus los fulminó a todos y todos ellos alejaron sus ojos de inmediato el chucho estaba viendo de vez en cuando ¿sera un perro mágico? .
Un rato después Severus anuncio que se marcharía de todos modos en dos días se verían otra vez el chucho lo siguió
–¿Pueden cuidar de el?
–Claro que si Severus
–¡No! Es mi perrito– se queja Harry –Va con nosotros por favor papá.
–No es posible estamos en malfoys no está permitido se quedará aquí Harry.
–Pero puedo convencer a los señores papá lo prometo. Pobrecito Rex, por favor, por favor– solloza
Severus suspira mirando al perro con desdén el animal se encoge de su lugar moviendo la cola mira entre el y Harry
–No, es mi última palabra.
Harry se sienta en el piso llorando abiertamente el perro se acerca moviendo su cabeza sobre el cabello de Harry, Severus observa la pataleta con un poco de diversión y molestia honestamente. Demasiado mimado.
–Deten esto Harry, no estaras llevando el perro sucio levantate ahora.
–No– grita en respuesta atrae la atención pero no le importa que lo miren haciendo un berrinche. Es un novato sobrevivirá muchos años para olvidar que una vez hizo esto. –Rex viene con nosotros siempre, es mío dijiste que si.
–Harry
es una advertencia
–Es mio- chilla mirando entre lágrimas a su padre –Por favor, por favor papi va conmigo siempre .
–Bien– escupe frustrado. Harry deja de llorar y sonríe levantándose del piso le sonríe de nuevo a Molly y Arthur que lo miran no sabe que emoción es esa en su cara. –Andando, vendré para el viaje.
Con eso se marchan
Tienen la suerte de no cruzarse a nadie en el camino hacia sus habitaciones una vez en la habitación Severus toma el hombro del niño y lo guía a una esquina
–Te quedaras ahí como castigo entiendes hasta que yo diga lo contrario no quiero quejas ni llantos – ordena, Harry lo mira con ojos bien abiertos suspira y se queda quieto mirando la pared blanca.
El perro lo mira a el sin mover cola
–Ven aquí perro tonto– el perro no se mueve –Si no haces caso te enviaré a las calles de nuevo.
Parece funcionar el perro lo sigue Severus lo guía al baño donde obliga al ánimal a bañarse la tierra sale de su pelaje mojado parece más delgado invoca a un elfo para darle de comer y beber y una ligeras gotas en la bebida para pulgas y garrapatas desaparecerán de su cuerpo. Sale del baño viendo a su hijo todavía en el mismo lugar se cambia de ropa exhalando un suspiro de cansancio mental.
Recuerda que tiene que hacer el nido así que abre el clóset de los Malfoy sacando las sabanas y mantas y almohadas de repuesto las olfatea para luego impregnarlas de su olor una vez hecho busca la esquina cercana a la cama y comienza a armar el nido el perro sale minutos después mirándolo. Hace un capullo acolchado usa las almohadas como muros alrededor una vez terminado se sienta en la cama relajado .
