Albus entró a las habitaciones de Severus luego de ser llamado con urgencia dicho hombre rabiaba de un lado a otro
–¿Que sucedió?
–Harry
–¿Que sucede con Harry? – pregunta de nuevo
–Ayer, me olvide de darle de comer estaba enfermando si no hubiese ido a buscarme algo malo pido haber sucedido. Lo alimente y me disculpe con el no quiso ir a las últimas clases pasamos la noche en su nido no ha querido hablarme, no quiere salir de su nido, tampoco quiere ir a clases no se que hacer.
–Bueno habla con Minerva que les escriba una constancia de falta y listo
–Esa es una solución pero no me gusta dejarlo así albus, no debo dejarlo con alguien más apenas lo deje contigo y Hagrid si lo dejó solo me pondré peor por que algo molesta a mi novato- sisea
–Habla con el
–¡Ya hable con el, no quiere responder! – musita en voz baja y peligrosa
–Bueno, me quédare con el hasta que regreses para alimentarlo trataré de que me diga algo ¿te parece?
-Esta bien– asiente derrotado –Cualquier cosa avisame
Albus entra a la habitacion del niño una vez Severus se marchó. Harry como dijo Severus esta envuelto en sus mantas en su nido rodeado por un montón de peluches apenas se le ve la cara, Harry que esta en silencio mirándolo atentamente el niño lo ve con cautela así que Albus no se acerca al nido si no que se queda sentado en la cama del niño.
–Buenos días muchacho ¿como te sientes?
Sin respuesta
–Severus me dijo lo que sucedió, esta arrepentido Harry el lo siente mucho Severus siempre ha sido un hombre muy solitario, amargado y simplista pero cuando esta contigo cuando vio lo hermoso de tener un novato lo enamoraste de inmediato, ahora sonrie y expresa sus sentimientos, te ama Harry y lo estas castigando con tu silencio muchacho.
El niño no responde solo se queda mirándolo
Albus suspira
–¿Hay algo en lo que pueda ayudarte quizás pasarle un mensaje de tu parte? – inquiere, nada. –¿Quieres un dulce? – saca su bolsa de caramelos de Limón pero estos son diferentes son rojos como el dulce que vio a su papá comer por primera vez, Albus extiende su mano lanza el dulce hacia el nido Harry lentamente, lentamente extiende su mano para tomarlo y se lo lleva a la boca. Albus sonrie.
Albus invoca un libro para pasar el rato
–Mi papá me regaño por besarle la boca
Albus lo mira con una ceja alzada Harry continua
–Lo vi en sus libros de la oficina los besos así que lo hice y me regaño dijo que no era debido por mi edad pero si podía besar su mejilla o abrazarlo.
–El tiene razon– Severus no le ha reclamado eso. Sabe que un día el asunto va salir. –¿Te pego?
–No
–¿Por qué no quieres hablarle?
–Se olvida de mi
–Un error seguro– responde
–Los Dursley también se olvidan de mi cuando me encerraban en el armario. Me duele mucho.
–¿Donde te dolía?
–El corazón
–¿Te dolió lo que hizo Severus? – pregunta
–Si pero no el corazón. Mi cabeza dolía tanto como mi estómago y mi garganta ardia – explica
