Hina y Temi-Chan

Capítulo 3-Misión rango A "Ir de compras"

Los dos Shinobis entraron a una de las más grandes batallas de su vida, ir de compras con dos pequeñas problemáticas, si bien Tenten decía que no era para tanto, porque eran sólo niñas, Naruto sabía que Hinata podía causar desastres de manera inconsciente queriendo ayudar y Temi generaba grandes berrinches donde fuese. Ambos tragaron saliva, tomándose en serio lo de la misión rango A, considerando lo que se aproximaba.

—¡Temi-chan ten cuidado con eso! —Comentó Shikamaru, viendo como la pequeña rubia se subía arriba de un maniquí.

—¡Hina, no sigas a Temi-chan! —Habló Naruto preocupado, notando que Hinata quería hacer lo mismo.

—Tranquilos, chicos. Saldremos de esto en cualquier momento. —Los animó Tenten.

—Eso espero. —Suspiró Naruto.

Mientras Tenten escogía la ropa, Shikamaru y Naruto hacían lo posible por no perder de vista a las pequeñas, quienes se mostraban muy enérgicas en esa tienda, ya sea jugando a probarse sombreros, como también desordenando otros atuendos. Si no se daban prisa, en cualquier momento los regañarían. Se preguntaba como lo hacían otros padres en situaciones similares a esa, teniendo en cuenta todas las adversidades que se presentaban. Por esas razones, Shikamaru consideraba que era problemático hacerse cargo de niños. Es más, en esos momentos estaba agradecido con sus padres de que no tuvieran más hijos, porque no habría podido ser un hermano mayor. "Ya está" Les anunció Tenten, mostrándoles que ya tenían todo lo necesario.

—Bien, entonces iré a pagar. —Respondió Shikamaru aliviado. —Naruto, necesito que cuides a las pequeñas mientras voy a pagar todo con Tenten.

—¡¿Eh?! ¿Cuidarlas?

—¿Hay algún problema? —Le preguntó Shikamaru con el ceño fruncido.

—No, ninguno. —Respondió Naruto nervioso. —Yo me encargo, no te preocupes.

—Bien, entonces nos vemos luego. —Sonrió Tenten.

—Temi-chan, Naruto cuidará de ti. Así que, pórtate bien ¿De acuerdo?

La pequeña rubia afirmó con fuerza la chaqueta del shinobi, ignorando las instrucciones que le había dado. Shikamaru intentó soltarse de su agarre, pero parecía no querer hacerlo. Por ello, la tomó en sus brazos y besó su frente. "Tranquila, ya regreso. Tienes que cuidar a Hina-chan. Vendré por ti en diez minutos" Le mencionó y Temi asintió con su cabeza, dibujando una sonrisa en su rostro.

Cuando Shikamaru se fue, Naruto se sentó con las pequeñas en una banca, rogando que no se movieran de sus asientos. Por el momento, estaban tranquilas moviendo los pies y conversando con calma. "Eso es, quédense ahí y no se muevan" Pensó el rubio nervioso, buscando un plan b en caso de que la misión fracasara, cualquier cosa tenía el jutsu clones de sombras preparado para retenerlas. Pero su descanso no duró mucho, porque de repente la pequeña rubia se levantó de improvisto y anunció que estaba aburrida, antes de que Naruto intentara callarla, Hinata se unió a sus palabras.

—¡Ya sé! ¡Juguemos a las escondidas! —Sonrió Temi.

—¡A las escondidas no! —Exclamó Naruto. —Si hacen eso, se pueden perder.

—¿Eh? ¿No podemos? —Preguntó Hinata triste, Naruto se quedó en silencio sin saber que decir, mientras Temi lo miraba con ojos inquisidores por haber puesto triste a su amiga.

—Pues...

—¡Vamos juguemos! No te pediremos nada más que eso. —Habló Temi, quien comenzó a llorar. —¿Por qué eres tan malo? Hermanito.

—Temi no es así. —Intentó calmarla Naruto, viendo como todos los presentes lo miraban con desprecio. —Baja la voz.

En ese momento, unas mujeres empezaron a mirarlo con reproche, insinuando que era un mal hermano y apuesto que las trataba mal siempre. Así iniciaron los murmullos por todas partes, aunque Naruto intentaba calmar a Temi, ya había empezado a llorar con todas sus fuerzas. Hinata también lloraba con angustia, provocando que más personas se reunieran a su alrededor. "Está bien, juguemos" Anunció Naruto, viendo como las niñas gritaban de alegría y el resto de las personas se retiraba satisfecha.