Capítulo 13-De vuelta a la realidad

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Como había crecido tan repentinamente, a la rubia ya no le quedaba su ropa de pequeña, por lo cual Sakura debió enviar a Kankuro y Gaara a comprarle algunas cosas, mientras ella se quedaba con la vestimenta de hospitalización mientras. En esos momentos, los únicos que estaban a su lado, eran Naruto y Kakashi, quienes observaban en silencio a Temari.

—¿Cómo te encuentras? —Sonrió Kakashi. —Me he enterado por Sakura que tu cuerpo está en perfectas condiciones. Sin embargo, lo que me preocupa es tu estado emocional...no debes estar bien con todo lo que te enteraste ¿verdad?

—Pues...estoy algo confundida, porque descubrí que mis hermanos no son realmente mi familia, y quien realmente eran mis padres eran los mismos que Naruto. —Miró al rubio, quien le costaba mantener contacto visual. —Es una historia un poco enredada, pero tras vivirla en mis sueños, la he comprendido.

—Sobre ello, ten. En estas cartas, encontrarás todas las respuestas que todavía pueden existir en tu mente. —Suspiró Kakashi, dándole 2 cartas.

—mmm ¿De quiénes son?

—Son las cartas que dejó nuestra madre...antes de morir. —Susurró Naruto. —Todavía no he leído la tuya, porque no estaría bien leer algo que no me pertenece.

—Ya veo, la leeré entonces.

Querida Tamae:

No sabía cómo decirte esto cuando eras más pequeña, por ello le pedí a tu padre que te la entregara cuando tuvieses la edad indicada para hacerlo. Hace muchos años, me detectaron anemia a causa de que no comía como debía ¿Recuerdas que siempre te dije que debías alimentarte bien en base a verduras y carne? Siempre te lo dije para que no pasaras por esto, porque tu madre no hizo caso a tu padre cuando se lo dijo.

Al principio, mi anemia era una enfermedad que tenía cura, dado que podía curarme sólo tomando ciertas medicinas que me recetaron. No obstante, cuando quedé embarazada de Naruto-kun, los médicos indicaron que mi anemia había aumentado extrañamente y por ello, era muy difícil que lograra sobrevivir al parto...

Entiendo que, con esta noticia, debes estar pasando por lo mismo que pasé yo en su momento. Pero sabes hija, las cosas suceden por algo, no debes culpa a Kami-sama por esto ni mucho menos a tu hermanito. Al contrario, debes estar agradecida con Kami que te ha hecho ser una niña muy alegre y sana.

Me duele saber que no podré verte crecer, sin embargo, sé que serás muy fuerte en el futuro, al igual que tú padre. A partir de ahora, tú serás la mujer a cargo de toda la casa, así que debes encargarte de cuidar a esos dos. Especialmente a tu hermanito, quien ni siquiera alcanzaré a conocer, debes enseñarle todo lo que debe saber sobre el mundo Ninja.

Sé que podrás hacerlo, Tamae. Confío en ti, mi pequeña. Nunca olvides que siempre estaré ahí mirándote desde el cielo, cuando más me necesites. Así mismo, no olvides jamás quien eres: Tamae Namikaze Uzumaki.

Te quiero mucho

Se despide

Kushina Uzumaki (Tu madre)

Cuando Temari terminó de leerla, su rostro se inundó de lagrimas que no podía controlar, las cuales resbalan por sus mejillas. En ese momento, Naruto se acercó a ella y la abrazó. "Temari, lo siento por todo" Susurró su hermano, generando que la rubia llorara aun más y se atreviera a corresponder su abrazo.

—No tienes que disculparte. Yo debería ser quien me disculpara, si no te hubiera dejado solo...las cosas habrían sido muy distintas.

—Es posible que hayan sido distintas, pero si no hubieras huido de Konoha, no habrías conocido a Gaara y a Kankuro ¿Te arrepientes de ello?

Hina y Temi-ChanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora