Capítulo 17

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Perspectiva de Lionel:

Estaba festejando sin parar, habíamos ganado contra Polonia, pasaríamos a octavos. Los gritos no dejaban de sonar al igual que los cánticos, la victoria sabía muy dulce.

Mi alegría era muy grande, nada lo podría arruinar, de eso estaba seguro. Veía a mis amigos bailar de la emoción, me daba mucha risa y pena, aún así me dedicaba a bailar y saltar con ellos.

Todo estaba yendo bastante bien, yo no podía esperar a llegar al hotel y celebrar con mi bello ricitos, incluso planeaba estar el resto de días dormido a su lado, acariciando sus rizos mientras beso sus lindos labios. No quería esperar más por lo que me apresuré en guardar mis cosas, sin dejar de cantar, estaba a punto de irme, pero pronto llegó nuestro DT.

Creímos que iba a celebrar con nosotros, pero nos sorprendimos al verlo un tanto serio, nos pusimos a pensar si habíamos hecho algo mal o si nos iba a regañar por algo. No fue hasta que caminó directo a mi que se todos se callaron, tenía nervios mientras más se acercaba, temía lo que me fuera a decir.

–Lionel...– una vez frente mio me miró serio, poniendo su mano en mi hombro– tal vez deberias ir con tu novio.

–¿Eh? Pero si estábamos festejando, queríamos disfrutar su compañía antes de irse con Ochoa– De Paul soltó un bufido, muchos estuvieron de acuerdo con él.

–Lo sé, pero realmente creo que es mejor que esté ahora con él– empezaba a preocuparme.

–¿Qué pasó?, ¿hubo un problema?, ¿está bien?, ¿está herido?– empecé a hacerle muchas preguntas y esperaba respuestas.

–Sí, pasó algo– todos estaban callados  esperando una terrible noticia– no pasaron.

Esta vez el silencio reinó más tiempo, algunos estaban con la boca abierta, otros no se lo creyeron, otros tenían caras de preocupación. Yo era una combinación de todo eso, no quería creer sus palabras, no parecían que fueran lógicas.

–¿Q-Qué?, ¿es una broma?– pregunté esperando una afirmación pero sólo negó.

–Mira, acaba de salir en las noticias– me mostró su celular.

Lo tomé y rápidamente me puse a ver videos, foros, noticias, todo lo que pudiera. Esto no podía ser cierto, Memo estará demasiado devastado y algunos videos los demuestran. Miré a Scaloni, le entregué su celular y me fui corriendo, esperaba llegar pronto al hotel, nos acabamos de ver y de nuevo se iba a alejar, no quiero que sea verdad.

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Estaba desesperado, tuve que irme en taxi, quería llegar lo más pronto posible. No quería que mi novio se vaya, todavía quería estar más tiempo con él después de no vernos por unos meses, quería estar a su lado. A pesar de que hace unas horas me encontraba molesto porque no me respondió, pero ahora me da igual, mi prioridad es él.

Es por eso que estaba jadeando mientras caminaba por el pasillo, veía en algunos cuartos a sus compañeros, los saludaba pero solo asentían y miraban a otra parte. Llegué donde estaba la habitación de mi amado, se notaba un ambiente pesimista sea donde sea, dí ligeros toques esperando su voz.

–Dije que quería estar solo– escuché del otro lado de la puerta, una voz tan fría y seria que si no fuera porque la conozco, no pensaría que es de Memo.

–Amor... soy Lionel... ¿puedo pasar?– dije con voz suave.

No escuché nada por unos segundos, pero cuando estaba por tocar otra vez, la puerta se abrió. No pude evitar hacer un gesto de tristeza, parecía que había llorado horas a pesar de que sólo pasaron unos minutos.

¡Maldito Chapulín!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora