𝙴𝚜𝚌𝚞𝚎𝚕𝚊 𝚍𝚎 𝚓𝚒𝚗𝚎𝚝𝚎𝚜 [Jenlisa & Chaesoo]

Extra

NARRADOR

El tiempo pasaba rápido, más de un año y medio había pasado, tal y como la rubia lo había dicho desde entonces sus días especiales siempre eran inolvidables, aunque para ellas cada uno era especial, claro mentirían si dijeran que no tenían una que otras discusiones y desacuerdos como cualquier otra pareja porque si los tenían y mucho solo que sabían cómo resolverlos, hablando las cosas siempre se resuelven mejor, ese era su lema y hasta ese momento les había servido muy bien.

Ya no estaban en la escuela y ahora la rubia estaba en preparación para pronto hacerse cargo de las empresas de sus padres, era su aniversario número dos desde que se casaron, la rubia siempre estaba ocupada pues se esforzaba mucho para poder dirigir correctamente el legado de su familia, cada mañana se despertaba a las seis de la mañana para ir a la empresa con su padre luego de que cada noche se acostara a más de media noche revisando papeles y llevando cuentas enormes de la empresa.

La castaña la quería ayudar en todo lo que fuera posible pero ella sabía muy poco sobre eso ya que quien estudió más para eso había sido la rubia, claro ella debía heredar las empresas de su padre también pero desde un principió ella dejó claro que no sería quien las dirigiera por lo que se quedó en que la castaña seria la dueña pero el director sería su primo hermano más cercano Jiyong quien al quedar en eso ha estado estudiando para ello, claro sería el accionista mayoritario después de Jennie ya que no dirigirá una empresa de gratis.

La rubia no era que la descuidaba pero últimamente no habían tenido tiempo para pasar juntas y mucho menos para tener intimidad, se pasaba todo el día en la empresa con su padre volvía tarde en la noche en las cuales se la pasaba en el despacho hasta aun más tarde en la noche y nunca la siente llegar a la cama ya que es tarde y se queda dormida, en las mañanas apenas se podían ver ya que aunque la castaña se levantara temprano para poder verla y darle los buenos días, su esposa siempre estaba apurada y solo le daba tiempo a darle un pequeño beso he irse corriendo con una manzana en la mano.

Claro que no iba a permitir que eso le quitara lo divertido y maravilloso a su matrimonio por lo que ese día especial tenía más de una sorpresa para su esposa.

Se levantó más temprano de las cinco de la mañana luego de que la noche anterior se fuera a la cama muy temprano al ya tenerlo planeado, poniéndose una bata manga larga por lo fría que estaba la mañana se colocó una pantuflas y se dirigió escaleras abajo, estando allí busco en la alacena sacando los ingredientes para prepararle el desayuno a su esposa.

POV JENNIE

Me levanté más temprano para hacer el desayuno porque se que lisa va a levantarse a las seis en punto como siempre, y no me gustaba nada el hecho de que últimamente ni siquiera desayuna antes de irse y si eso es el desayuno no quiero saber como será a la hora del almuerzo, tal vez ni siquiera sale a comer bien y solo pensarlo no me agradaba.

Pensando en lo poco que ha de haber estado comiendo, prepare tocino, pan tostado mismo a los que les hice una figura de corazón en el medio he hice el huevo allí, también prepare panqueques con crema, fresa, banana y miel junto con un jugo natural de frutas, hice mucho de cada cosa ya mencionada y al terminar lo puse todo sobre una charola y fijandome en la hora eran casi las cinco y medía, tome la charola y me dirigí escaleras arriba hasta llegar a nuestra habitación, allí deje la charola sobre la mesita de noche y me senté en la cama juntó a lisa que aún seguía completamente dormida y sonreí acariciando su mejilla, ella había estado siendo tan responsable con sus cosas el último año que empezaba a extrañar a esa lisa despreocupada que perdía clases para encerrarse conmigo en los dormitorios.

Jn: lili mi amor- bese su mejilla, me parecia increible el hecho de que llevaba meses sin besarla debidamente o incluso sin tocarla mucho pero lo más increíble es que tuviéramos tanto tiempo así y ella no había venido a mi apunto de llorar por intimidad, ella estaba tan ocupada que ni siquiera podía hacerlo y me apenaba porque sabía cómo era- despierta mi vida- acaricie su cabello mientras besaba su mejilla suavemente varias veces repetidas