Cap 23: una pequeña broma

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NARRADOR

Al fin era viernes, las últimas clases estaban por terminar pero aún así las jenlisa no habían tomado ninguna de las últimas tres, ambas se encontraban en la habitación de la rubia pues harían sospechar a la directora de la castaña si la rubia hubiera vuelto a ir a visitarla y ambas se encerraban en la habitación de la castaña, por lo que habían decidió que sería mejor que la castaña la visitara a ella.

En ese preciso instante la rubia se encontraba sobre su esposa besándola de manera hambrienta mientras la penetraba de manera lenta, la castaña gemía entre besos y rodeó a su esposa con sus piernas mientras mantenía sus manos en su cuello.

Jn: Mmm~ l-lisa

Se separó del beso y arqueo la espalda cuando la rubia la tomó de la cintura empezando a embestirla con fuerza, la rubia tenía los labios entreabiertos y una capa de sudor cubría sus cuerpos, la castaña apretó las sábanas con fuerza y sus gemidos se hacían cada vez más altos, estando cada vez más cerca.

Ls: vamos bebé~ déjame sentirte llegar

Escuchar la voz de la rubia así de ronca la excitó de sobremanera y solo bastaron un par de embistes más igual de fuertes para escucharla gemir el nombre de su esposa mientras llegaba al tan ansiado orgasmo.

Jn: Ahh~ lisaa

La rubia jadeo al sentirla, se inclinó hacia delante apoyándose en sus brazos sin dejar de mover lentamente y unió sus labios con los de su esposa hasta que sintió su orgasmo aproximarse, de esta forma empezó a moverse nuevamente con rapidez en busca de su propia liberación.

Ls: Mmm~ Ah.

Terminó dentro del preservativo luego se recostó sobre su esposa despacio con la respiración agitada y la envolvió con sus brazos respirando de la misma manera.

Mientras sus respiraciones se normalizaban la castaña acariciaba su cabeza y quitaba los mechones rubios que se pegaban al rostro de su esposa suavemente.

Poco después la rubia se levantó saliendo de ella y se quitó el preservativo haciéndolo un nudo y lo tiró a la basura luego se recostó nuevamente en la cama apoyando su esposa en el respaldo y abrió sus brazos hacia la castaña quien llegó hasta ella colocándose entre sus piernas apoyando su espalda en su pecho, de esta forma la rubia tiró el edredón por la parte baja de su cuerpo.

Jn: ¿no crees que deberíamos empacar ya para irnos a casa?

Ls: la última clase aún no termina así que tenemos un poco de tiempo. Nunca me había quedado así con una chica luego de haber tenido sexo, me gusta- echo el cabello de la castaña a un lado y dejó un beso en nuca

Jn: ¿nunca habías estado así con una chica?- la rubia tarareo en respuesta negando

Ls: luego de terminar les inventaba que debía hacer algo importante y cada quien por su lado ¿que tal tu querida esposa? ¿Habías estado así antes?

Jn: digamos que no, no me gustaba, contigo no se si es por el hecho de que eres mi esposa que soy más activa en el sentido sexual pero antes digamos que solo lo hacía por necesidad desde mi primera vez por lo que mi actividad sexual no era mucha, creo que no tuve más de tres experiencias antes de ti

Ls: vaya, eso me encanta, y la verdad también me sorprende, eres maravillosa en la cama- mordió ligeramente su cuello y la castaña echó la cabeza hacia atrás- me encanta

Jn: bueno, que no quisiera tener muchos encuentros sexuales no quiere decir que sea muy inocente- la rubia sonrió

Ls: créeme que lo noté preciosa

𝙴𝚜𝚌𝚞𝚎𝚕𝚊 𝚍𝚎 𝚓𝚒𝚗𝚎𝚝𝚎𝚜 [Jenlisa & Chaesoo]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora