𝐑𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐥𝐢𝐬𝐨𝐧☆

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𝐑𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐥𝐢𝐬𝐨𝐧
𝐗
𝐋𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫𝐚
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❝blowjob during game❞
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Te removiste bajo las sábanas blancas mientras abrías tus ojos lentamente, palpaste con tu mano a tu lado en la cama en busca de tu novio, que, claramente no se encontraba allí, tu ceño se frunció al no verlo contigo, normalmente tú solías ser la primera en despertar de la siesta diaria que ambos tomaban.

Un bostezó se desprendió de tus labios mientras te deslizabas por el largo pasillo camino a las escaleras, te detuviste en la sala de juegos de Rich al oír su voz proveniente de la habitación, él reía y lanzaba un par de groserías.

En silencio te recargaste sobre el marco de la puerta, viéndolo allí sentando en su sofá mientras jugaba algún tipo de juego que desconociste, a través de sus audífonos pudiste oír la voz de Antony y Raphinha del otro lado, burlándose de probablemente algún mal chiste de tu novio.

Le tomo un par de segundos darse cuenta de tu presencia, te dedicó una media sonrisa y palmeo su muslo para que te sentaras en el.

Seductoramente moviste tus piernas, acercándote a pasos lentos, paseaste tus manos por sus hombros bajando hasta su torso, dejando un beso en su cuello, haciendo que Rich se tensara bajo tu tacto, confundido por tu comportamiento repentino, simplemente decidió seguir con lo suyo.

Estabas en su regazo, acariciando su pecho en cada oportunidad que tenías, las yemas de tus dedos trazando pequeños círculos sobre la tela de su camiseta mientras escondías tu cabeza en el hueco de su cuello, su colonia varonil llenando tus fosas nasales, lamiste su piel sensible, logrando que su respiración se vuelva entrecortada, tratando de mantener su postura.

─¿Qué es lo que intentas hacer?─ Masculló, apartando levemente el micrófono de su boca, lo suficiente para que sus palabras no fueran audibles para sus compañeros.

─Nada.─ Respondiste con falsa inocencia. ─Sólo disfruto un momento con mi hombre. ¿Acaso no puedo?─ Pestañaste rápidamente, abanicando tus largas pestañas. Sabías perfectamente que los besos en el cuello eran su debilidad y te burlaste de eso.

─T/n...─ Advirtió, aún que era conciente de que la advertencia iba dirigida más para él, tratando de contenerse y no joderte allí mismo.

─¿Hermano? ¿Estás ahí?─ La voz de Antony resonó a través de los audífonos de Richarlison, este volvió a retomar su juego, indicándole que seguía ahí y que solo se distrajo un par de segundos.

Un jadeo escapó inconscientemente de sus labios cuando te acomodaste sobre su regazo, tus movimientos fueron lo suficientemente buenos al sentir como su polla tocaba el punto justo en tu trasero.

─Détente, bebé.─ Susurró, casi en una súplica.

Ignoraste sus palabras por completo continuaste burlándote de él constantemente, provocando que perdiera su paciencia.

Decidiste que era hora de dejar tus burlas de lado, alejándote de tu novio sólo para después posicionarte de rodillas entre medio de sus piernas.

Masajeaste sus muslos bajo su oscura mirada, desesperado por que hicieras algo más que burlarte de él tan descaradamente, estaba tan perdido en tus toques que no si siquiera se dió cuenta cuando estalló su auto en aquel juego de carreras.

Reprimiste una carcajada al escucharlo lanzar groserías, envolviendo tus dedos alrededor del elástico de sus pantalones cortos de chándal, los bajaste rápidamente sin titubear. Estabas deseosa por probar su polla una vez más, y Richarlison esperaba impaciente a qué lo hicieras.

Escabulliste tu mano derecha debajo de sus boxers, pronto soltando su longitud al aire libre, desprendiendolo de la tela, aún estaba suave, semi duro podías sentirlo.

Lamiste la palma de tu mano dejando caer saliva en ella, para luego envolverla alrededor de su polla, podrías saborearla ahora mismo dentro de tu boca.

Por su parte, Richarlison tenía su vista en el juego, no queriendo que sus amigos lo atraparán en ese estado, lo volverían loco y jamás se olvidarían de aquello, molestandolo cada vez que lo recuerden, se mantuvo serio, su mandíbula estaba tensa y rogaba por qué lo chuparas de una buena vez, sin emitir ningún tipo de sonido sospechoso aún que deseaba demasiado hacerlo.

─Chupalo, amor, quiero que sientas como se pone duro en tu boca.─ Susurró, dedicándote una mirada fugazmente, sus palabras habían sigo tan calientes que hicieron que tu centro de empapará con gran facilidad.

Tu lengua subió y bajo dolorosamente lento por su glande, asegurándote de que esté bien lubricado para meterlo en tu boca, lo deslizaste por tus labios tomando tanto de él como podías, enviándote una pequeña arcada cuando su punta toco fondo en tu garganta, descansaste unos segundos en tu lugar antes de comenzar con tus movimientos.

Subiste y bajaste a su alrededor, revoloteando tu lengua en la rosada punta de su pene.

Tan pronto sentiste como se ponía duro poco a poco, la sensación de que se endureciera tan fácilmente aumentaba tu calor, pero esperabas que el devuelva tu favor luego.

Tus ojos no se despegaron de los suyos  ni por un segundo, viendo cómo muecas de placer inundaban su rostro perfectamente, él frunció su ceño, cerrando sus ojos fuertemente.

Masturbaste con tu mano lo que no alcanzaba a caber en tu boca, aceleraste tu ritmo, la mano de Richarlison aterrizó en tus cabellos un poco alborotados, formando una colita descuidada para ayudarte mejor con tu trabajo.

El moreno te llevó a un ritmo considerado por él, tirando de ti para que puedas retomar el aire segundos después obligándote a llenarte de nuevo con su polla nerviosa.

Sus caderas viajaron hacia arriba, enterrandose aún más en ti, follaba tu boca como a él más le gustaba, rápidamente con embestidas bruscas y descuidadas, tus lágrimas no tardaron en aparecer y rodear tus mejillas.

Un gemido fue ahogado por su miembro palpitante cuando tus labios apretaron su polla duramente, enviando espasmos por toda su longitud, estaba cerca y podías notarlo.

Pudiste ver cómo tu novio apagaba su micrófono y sacó los audífonos de sus oídos dejándolos descansar sobre la mesita, ahora sus dos manos estaban en tu cabeza, tirando de tu cabello dolorosamente.

Dejó de reprimir sus gemidos, dejándolos salir al aire, su orgasmo lo golpeó finalmente, dejando ir el nudo que atravesaba su estómago, dejo escapar un fuerte gruñido mientras echaba su cabeza hacia atrás, su semilla salió disparada por tu garganta.

─Tragatelo todo, meu amor. Buen chica.─ Elogió, viéndote tragar su semen caliente, sin dejar caer ninguna gota de este al suelo.

Cuando finalmente bajo de su altura, volviste a acomodar su pantalón junto con sus boxers, y te subiste de nuevo en sus piernas, descansando tu cabeza sobre su amplio pecho mientras él acariciaba tu espalda dulcemente.

Volvió a ponerse sus audífonos.

─¿Dónde estabas hermano, te estuvimos llamando.─ Raphinha río, buscando una explicación ante la ausencia de su amigo.

─Estaba ayudando a T/n con algo. Pero ya estoy de vuelta.─ Explicó falsamente, tratando de que estos no se dieran cuenta de lo que había sucedido segundos atrás.

Sonreíste ampliamente ante su tonta excusa, de todas formas, no sabías que realmente él no había logrado desactivar su micrófono, y aquellos chicos habían estado presenciando todo desde el otro lado. Sin dudas tuvieron un motivo para burlarse de Richarlison durante mucho tiempo.

Bueno, esto es terrible pero tenía que cumplir😭

Annzw11  Esperó que te guste y mil disculpas por la demora <3

━━𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒;; 𝐅𝐮𝐭𝐛𝐨𝐥𝐢𝐬𝐭𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora