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𝐉𝐮𝐝𝐞
𝐗
𝐋𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫𝐚
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❝A bit of Jude in the locker room❞━☪━
─Vas a hacer que nos atrapen.─ Murmuras mientras Jude está demasiado ocupado palpando tu camisa en el vestuario.
Se suponía que solo debías dejarle una muda de ropa y seguir tu camino, pero él tenía otras ideas. Muchos de ellas de hecho, sus dulces palabras se convirtieron en néctar, que pronto se convirtió en manos pegajosas que no podían mantenerse solas.
Así que aquí estás presionada contra casilleros fríos mientras él entierra su rostro en tu cuello y deja que sus manos deambulen. ─ Te ves demasiado bien.─ Se queja.
Resoplas, pero entreténlo de todos modos. Ha pasado un tiempo desde que pudieron desestresarse ambos, y la forma en que vino trotando desde la cancha hacia ti... Si, eras débil.
─¿Cuánto tiempo tenemos?─
─Como 10 minutos.─ Resopla contra tu piel. Asientes con la cabeza, extendiendo suavemente una mano entre ustedes dos, sintiendo su polla ya dura.
─¿Duro ya, bebé?─Él solo gime, mordisqueando la piel debajo de tu oreja mientras tratas de quedarte callada.─Puedes eh, ¿Chuparme?─ El súplica.
─Si, yo puedo.─ Exhalas, dejándolo tomar asiento en su lugar, Bellingham detrás de él mientras te pones lo más cómoda posible en los fríos pisos de baldosas.
Esperas pacientemente a que se baje los pantalones cortos, se detiene por un segundo. Estás a punto de interrogarlo antes de que se incline para darte un rápido beso en los labios. ─Eres tan hermosa.─ Murmura.
Te sonrojas y lo ves bajar el resto de sus shorts, lo suficiente para que su polla finalmente este a la vista, con un líquido preseminal de color rojo brillante que gotea en la punta y casi te sientes mal, casi.
Es su culpa realmente por hacer que esto se arruine básicamente por nada. Pero es tuyo ¿No? Quien más tiene que cuidarlo, pobre cosa.
Exhala pesadamente, los ojos enfocados en ti y solo en ti. Su labio inferior entre sus dientes mientras sus ojos suplican tu misericordia, y tú misericordia la das.
Tomando suavemente tanto de él como puedas, sin apartar los ojos de la forma en que sisea y se derrite contra su pequeño rincón. El número 22 te devuelve la mirada mientras tomas una mano para apretar suavemente su muslo. Tus rodillas ya están rogando por arder, pero no podría importarte menos.
Puedes sentir la forma en que se tensa con cada lamida, cada vez que vas un poco más abajo, cada segundo tu mano se acerca unos centímetros hacia arriba. Hay muy pocas cosas que ames más que verlo desmoronarse pot ti, muy pocas cosas que te enciendan tanto. Te hace rebosar de orgullo saber que eres la única que puede verlo así.
─Por favor.─ Él susurra, apenas sabe lo que está pidiendo en este punto, pero tú le respondes con la lengua, y te da un tic en el paladar.
Tu mandíbula comienza a aflojarse pero no vas a parar en el corto plazo, no cuando se ve tan bonito a tu merced.
Comienza a lloriquear cuando alcanzas una mano para apretar lo que no puedes alcanzar con tu boca, recibe un suave golpe en la parte interna del muslo, pero eso solo lo hace estremecer mientras lucha por mantener la compostura. Sus ojos llorosos tratando de mirar hacia otro lado, pero él simplemente no puede.
Sabes que no pasará mucho tiempo ahora, sus muslos se mantienen apretados y su respiración se esfuerza mucho. El sudor que tenía caminando aquí solo aumenta, rodando por un lado de su cara, se ve tan caliente, tan jodidamente caliente.
Y tiene la desagradable costumbre de besarte tontamente después de correrse en tu boca, no puedes esperar.
Mueve sus caderas involuntariamente y te atragantas con él por un segundo cuando la punta de su polla se clava en la parte posterior de tu garganta, con los ojos llorosos, trata de hacerte correr, de controlarte, pero apartas sus manos y vuelves a bajar, un poco más vigorosamente.
Está lanzando tantas palabrotas que apenas puedes seguir el ritmo.
Sus manos apretando el banco desesperadamente es la única advertencia real que recibes antes de que las cuerdas de semen se disparen por tu garganta. Extiende una mano para sostenerte allí por un segundo y tarareas a su alrededor, tragando lo que te da.
Gime, dejando que te tomes tu tiempo para bajar, arropandose antes de, ah, ahí está, el beso que estaba esperando, haciéndote un lío, besándote descuidadamente hasta que no puedes respirar.
Él agarra tu cara con una mano, mirándote.
─Te amo jodidamente mucho.─ Murmura contra tus labios antes de hacer un lío más grande con ellos.
Para cuando estés lista para volver a salir, tus labios estarán hinchados y tu mirada deseará más, pero no tienes tiempo para tales lujos en este momento.
Apoya sus manos en la prominencia de tu trasero antes de darte un último beso, un beso inocente en tu frente.
─Enviame un mensajes de texto cuando llegues a casa, amor. Gracias por todo, cariño.─
Asientes con la cabeza. ─Te estaré esperando.─
Te da una mirada antes de que las cosas hagan click en su cabeza.
─Ah, no puedo esperar a llegar a casa entonces. ─ Te lo asegura, sonriendo y regresando al terreno de juego.
No puedes esperar a terminar lo que él empezó.
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historias_777 Espero que te guste ✨
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━━𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒;; 𝐅𝐮𝐭𝐛𝐨𝐥𝐢𝐬𝐭𝐚𝐬
Kısa HikayeAlgunas serán traducidas de Tumblr, otras simplemente son de mi autoría.